Nadie cerca mío, todos pasando de largo.
Ni siquiera comprendo que es lo que sucede.
No hay razones para entender el por qué de algunas cosas.
Sólo sé que no existe una persona que de este sentimiento se haga cargo.
Hay un millón de personas y sólo conozco una.
Un millón de palabras y me ahogo en sólo una.
Estos rostros no logro reconocer.
Pero hay uno que logra encender mi ser.
Quisiera entender por qué tus pasos se alejan de mí.
Todo se desmorona, todo llega a su fin.
No hay un final más triste que ver lo que nunca fue.
Aunque quisiera seguir, nada es fácil de entender.
Continúa siendo el mismo sentir.
Con polos opuestos que se niegan a partir.
No es tan fácil permanecer cuando no hay lugar a donde ir.
Sólo queda resistir, e intentar reconocer los rostros que nunca me han hecho sufrir.
#19500 en Otros
poesía de verso libre, poesia anécdotas tristeza romance, poesia reflexiones pensamiento
Editado: 01.11.2020