CAPÍTULO 7 – TAL VEZ SU TESORO

POV DE ROSE:

“Chicos, como hoy es viernes, vamos a pasar la noche con mi mamá y mi hermana. Hagan sus maletas, y sean unos amores y hagan la mía también. ¡Regresaré del trabajo lo antes posible!" Cathy grita instrucciones por encima del hombro, ya a mitad de camino fuera de la puerta.

“¡Está bien, adiós!" Eva y yo respondemos al unísono.

El restaurante cierra temprano hoy porque mi jefe se va de viaje el fin de semana. Esto significa que tengo la tarde libre y planeo visitar uno de mis lugares favoritos al que no he ido en un tiempo. Cathy y Eva estarán en el trabajo y no quiero volver al apartamento sola, ya que Zoe y Helen seguramente estarán allí, y no quiero lidiar con ellas más de lo absolutamente necesario.

Después del trabajo, decido caminar hasta mi destino en lugar de llamar un taxi, porque es un día muy bonito y me gusta caminar. Solo me toma unos veinte minutos llegar al lago y me detengo a admirar la belleza de mi entorno.

El lago está rodeado de árboles cubiertos de flores durante todo el año.

He estado visitando este lugar durante años, pero nadie, ni siquiera Eva y Cathy, lo saben. Es el lugar donde puedo olvidar todas mis preocupaciones y simplemente pensar en paz. Me acomodo en un banco cercano y empiezo a reflexionar sobre mi vida, volviéndome ajena a todo lo que me rodea mientras me pierdo en mis pensamientos.

Horas después, me doy cuenta de que ya es de noche y me levanto para irme a casa. Será mejor que haga las maletas de Cathy y la mía, o seguro que me enterrará viva.

Estoy a punto de darme la vuelta y marcharme cuando escucho a alguien gritar como si estuviera regañando a otra persona. La curiosidad me gana y me giro hacia el sonido, aunque sé que no es asunto mío.

POV DE DANIEL:

Hoy me siento realmente fresco y feliz. Dormí mejor anoche de lo que he dormido en ocho años. Miro el reloj y veo que son poco más de las seis. Normalmente no duermo más allá de las cuatro, así que esto es realmente un logro.

Después de pasar una hora en el gimnasio, me preparo para ir a mi oficina. Tengo que resolver el drama de ayer, de lo contrario tendré problemas y realmente no necesito más de esos.

Extraño la dulce voz de la amiga de la señorita Joseph y el sonido de sus suaves palabras cuando intentaba despertarla. Hablando de la señorita Joseph, ella llegará pronto, así que tengo que decidir qué, si es que algo, voy a decirle sobre anoche.

Un golpe en mi puerta me informa que se me ha acabado el tiempo, así que doy permiso para que la señorita Joseph entre, aún sin estar seguro de qué le voy a decir.

"Buenos días, señor", dice con incertidumbre.

"Le pedí a un amigo que te llamara desde mi número anoche para informarte que quería que escribieras la agenda de una reunión que se iba a llevar a cabo esta mañana. Sin embargo, me dice que una de tus amigas respondió tu teléfono e intentó despertarte, pero no tuvo éxito. Mi amigo ha solicitado que mueva la reunión para esta tarde, así que quiero que prepares la reunión ahora. Este archivo contiene toda la información que necesitas. Dile a la recepcionista que reserve la sala de conferencias para esta tarde. Esta es tu única tarea hasta la noche. ¿Está claro, señorita Joseph?" Le entrego el archivo sin siquiera una sonrisa.

"Lo siento mucho, señor. Recuerdo que mi amiga intentó despertarme, pero estaba realmente cansada..."

"No quiero excusas. Solo haz lo que se te dice."

"Sí, señor."

Espero que la señorita Joseph no le cuente a su amiga sobre esto. Si lo hace, estaré en un gran problema y Mio Tesoro sabrá que soy el "jefe demonio".

Exactamente a las 12:00, la señorita Joseph me trae la agenda de la reunión y bajo para terminar con esto. Sé que la reunión irá bien, porque Mio Tesoro deseó que así fuera y yo le prometí que concedería cualquiera de sus deseos.

Después de la reunión, estoy listo para el fin de semana. He firmado todo lo que necesitaba ser firmado y todos los proyectos van bien. Mi asistente personal manejará cualquier otra cosa que surja hasta el lunes.
Decido que necesito un largo paseo, así que ordeno a mis guardaespaldas que me sigan y le digo a mi asistente personal que se encargue de todo en la oficina antes de dirigirme a mi garaje secreto. Me subo a mi Lamborghini y salgo sin un destino en mente.

Esto continúa hasta que mi coche se descompone en medio del camino. Salgo para buscar a alguien a quien pedir ayuda, pero no hay nadie alrededor.

Escaneo mis alrededores. Se ven extrañamente familiares, aunque no recuerdo haber estado aquí antes. Necesitando una forma de liberar mi furia, llamo a mi jefe de seguridad y empiezo a gritarle.

“¿Te pago para quedarte parado detrás de mí? Mi coche se ha descompuesto en medio de la carretera y no hay absolutamente nadie aquí. No sé qué vas a hacer, pero quiero otro coche en diez minutos.”

“Lo siento mucho, señor. Señor, ¿puede decirme dónde está? Llegaré lo antes posible”, me tranquiliza Oliver.

“No sé dónde estoy. Rastrear mi GPS o haz algo. Quiero otro coche lo antes posible.”

“Está bien, señor. Solo aguante un momento.”

“¡Urgg! ¡Está bien!” Luego corto la llamada.
Después de unos minutos, Oliver me vuelve a llamar.

“¿Qué quieres?”

“Señor, el lugar donde está ahora se llama Green Lake. Tomará más de una hora llegar hasta usted, incluso con el coche más rápido y los mejores conductores. Señor, si lo desea, enviaré su helicóptero para recogerlo.”

“No sé qué vas a…” Mientras grito en el teléfono, escucho la voz de una chica llamándome. Dios, creo que es la misma chica. Reconozco su voz, pero podría estar equivocado, ¿o no? Quiero estar seguro primero.

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**Nota del Autor**

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