Rey Bestia

Capítulo 4

—Bueno, cenaré contigo cuando me entregues mis cosas —Le sonrío y estiró la mano hacia él—. Traía una mochila marrón con una flor rosada en el medio, quizá la tienen por ahí tirada junto a la basura, la necesito.

Quinn levantó una ceja con falsa modestia, mirándola como si acabase de oír un buen chiste. No iba a quedarse ahí encerrada ni un minuto más. Le pasó de largo y salió por la puerta hacia un pasillo amplio. Las paredes estaban decoradas con un tapizado de pequeñas figuras color verde suave, de modo que no era tan fuerte a la vista. Todo traía una decoración más moderna de la que imaginaba, a excepción por los viejos cuadros donde podía verse la silueta de diferentes monarcas. Y en medio de ellos, un cuadro mas reciente dejaba lucir a un rey sentado en un trono, en su forma humana, y vistiendo esa capa poderosa que había visto ya un par de veces. Ese debía ser Alecsander, pensó internamente, observando con detalle las facciones serias, duras y sombrías que traía. Era intimidante y bastante... atractivo.

No tenía idea de cuánto tiempo pasó allí, mirando el recuadro con bastante curiosidad, queriendo observar cada detalle de su rostro perfilado, sus ojos azules, su cabello rubio y sus labios rosados, carnosos. Kyra extendió la mano como hechizada hacia el cuadro, deslizando los dedos sobre la fotografía como si de una caricia se tratase.

—No hagas eso —escuchó decir una voz con cautela detrás suyo.

Quinn la miraba en una esquina de las columnas, de brazos cruzados y los ojos entornados sobre ella, estudiándola en silencio.

¿Cuánto tiempo había estado siguiéndola?

Kyra parpadeo confundida hacia él como si acabase de salir de algún trance mágico y se acercó a la única persona que conocía en ese enorme lugar.

—Eres un anfitrión terrible —comentó ella en voz baja, mirando hacia el final del corredor que daba a unas escaleras casi escondidas—. ¿Puedes devolverme mi mochila?

—Nena, no te voy a devolver nada. Te voy a ser sincero, vas a quedarte aquí, ahora eres parte de la manada. Eso es todo lo que necesitas saber.

Kyra soltó una risa estruendosa y exagerada al oírle. Su cabeza dolió de la risa al pensar en todo lo que había tenido que pasar, para terminar atrapada con lobos más peligrosos que los que conocía en casa. Había pasado días huyendo, siguiendo el camino al mundo humano y de pronto, ese sujeto le decía que iba a quedarse allí contra su voluntad. No podía asimilar la ridícula idea de haber huido de una manada para involucrarse a otra muchísimo más grande.

—¡¿Qué?! —gritó con lágrimas en los ojos, su estómago dolía y una delgada energía desesperante abrumó su cabeza en un instante. Intentó calmarse, respirando profundo y pensando en ideas inteligentes para salir de esa pesadilla—. ¡Nunca acepté ser parte de esta manada!

Quinn la miraba paciente sin moverse ni un centímetro de la cómoda columna donde estaba apoyado. Mantenía las manos en los bolsillos del pantalón y asentía con falsa tristeza, como si la entendiera.

—Sí, bueno, así están las cosas. Pero no te preocupes, porque sabemos que no eres un lobo de verdad, ayudarás en la cocina, en la limpieza o en el jardín, lo donde quieras.

—No, tú no entiendes —Le dijo con impaciencia, apuntándole en el pecho con el dedo índice—. ¡Yo no me voy a quedar aquí, así que te ordeno que me devuelvas mis cosas inmediatamente! —gritó desesperada, sin obtener ninguna respuesta.

—Todos lo lamentamos igual que tú, pero no hay de otra —Quinn se encogió de hombros—. Mira, te dejaré tu mochila, si te comportas bien en la manada, ¿qué te parece?

Kyra lo miro enfadada, impotente, y ahogó un grito interno antes de respirar profundo y decir—: Haz lo que quieras, me iré sin el bolso.

Avanzó a paso firme por el lado contrario por el que venía, la rabia acumulándose en su interior y maldiciendo su mala suerte ¿Cómo era posible que terminó allí metida entre tantos lobos que amenazaban con secuestrarla? ¿Es que acaso sabían de sus padres y querían usarla como moneda de cambio? No... no podía ser, de lo contrario no la dejarían andar tan libremente por allí.

Con mochila o sin ella iba a irse en ese preciso instante, es más, quizá esperaría a que anocheciera para huir por alguna parte del castillo. Ese lugar era bastante grande como para cuidar de toda la zona limítrofe. Kyra rondó por los pasillos, abriendo cada puerta que tenía acceso hasta que llegó a una biblioteca más grande que su propio salón. Ahogó un jadeo de sorpresa, escrudiñando con la mirada que los estantes iban del suelo hasta el techo. El lugar olía tan fuerte a libros antiguos, que no pudo evitar estornudar, avanzando entre los libreros que parecían ponerse cada vez más escondidas. No había señal de que alguien usara ese lugar jamás, pensó mientras tomaba el primer libro que tocaron sus dedos.

"Alquimia"

Las paginas estaban picadas por las polillas y el lomo del libro no podía sujetar sus propias hojas. Miró con lástima cómo caían pedazos diminutos al suelo cuando lo abrió. Era un buen lugar para esconderse definitivamente, ahí podría pasar horas de horas indagando de ese mundo mágico y sus criaturas extrañas, pensó mientras regresaba al pasillo. Pero quizá podía encontrar algo sobre su condición, sobre por qué era la única de su familia que no heredó el linaje lobuno. Miró al techo, intentando identificar algún tipo de señal en los estantes que marcarán la zona que estaba buscando. Estaban al fondo, tanto que recorrió al menos unos veinticinco muebles. Cruzó los dedos sobre los libros, pidiéndole al cielo que por favor no estuviera tan arriba.

"Géneros de lobos ancestrales" , "Herencia linaje ancestral" , "Herencia lobuna" ¿podía servir? Deslizó la mano sobre este último cuando entonces algo captó su atención. Había un estante más adelante corrido hacia la derecha, era un pasaje que iluminaba la entrada a algún lugar. Dio un paso hacia adelante, dejándose llevar por la curiosidad para saber qué estaba sucediendo allí abajo que causaba tanto alboroto. Dio un paso bajo el umbral de la estantería falsa, la respiración entrecortada y el corazón palpitándole tan fuerte que le dolía un infierno.




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