Rhydian

Ni siquiera recuerdo

Oliver dejó que Lily se fuera, pues la chica tenía razón en algo; sonaba muy disparatado todo lo que él había dicho, pero creía con todas sus fuerzas que algo extraño pasaba. Así que la siguió con su auto de manera sigilosa sin que ella lo notara.
Entonces, la vio discutir con un grupo de chicas en la calle, iba a intervenir, pero mejor espero a que Lily se retirará muy molesta del lugar. Luego de eso estacionó su auto una calle atrás y fue a hablar con las tres chicas.

—Hola, señoritas. Soy un investigador novato cubriendo un caso inventado para pasar la prueba —explicó sacando de nuevo su cuaderno, aunque ya le parecía inútil, pues no había podido escribir nada útil — ¿Puede hacerles algunas preguntas sobre su amiga Lily?

— ¿Amiga? Ella no es nuestra amiga, solo es nuestra compañera —respondió una chica alta de manera presumida.

—Ouh, lo siento, no lo sabía ¿Pueden hablarme un poco sobre ella? Lo que sea, está bien —pidió Oliver listo para apuntar.

—Es... muy extraña, su madre murió hace más de un año y la dejo... traumada o algo así —comentó la misma chica alta. El comentario le parecía una falta de respeto a Oliver, pero se limitó a escribir lo que decía con una amistosa sonrisa en su rostro.

—Nuestro maestro de literatura 3 le pidió que escribiera una novela para mandarla a una editorial, al parecer su historia es... de su agrada, digamos —comentó una con el pelo negro y el típico asentó de chica fresa —Aunque yo creo que se acuesta con él.

—Entiendo... y ¿Han escuchado hablar sobre un "sujeto" llamado Rhydian? —se atrevió a preguntar Oliver.

—Sí, es el nombre de uno de los personajes de su historia —respondió la chica alta.

— ¿Enserio? ¿Y cómo es el personaje?

—Ay, no sé, no entendí bien la historia, además solo nos dejó leer las primeras 25 páginas.

—Ah, yo si entendí un poco —comentó la de pelo negro alzando la mano como si estuvieran en clase —Es extraño, al parecer es como una clase de fantasma, pero en el relato ella lo describe como alguien amigable y algo metiche, con poderes increíbles y extraños.

—Pero no entiendo ¿Por qué preguntas sobre eso? ¿De qué es la investigación? —preguntó la única chica que no había hablado, era mucho más baja que las otras dos y traía lentes color rojo, era la única que parecía hablar sin ningún tipo de asentó extraño y presumido.

—No lo sé, mi... mi maestro nos dio raras pista y nosotros debemos... armar el caso solos —respondió Oliver.

—Deberías pedirle su libro, dijo que ya lo terminó —sugirió la chica alta.

—Claro, ¿Saben a dónde fue?

—Seguro volvió a su casa.

—Gracias —dijo Oliver cerrando su cuaderno y dándole la mano a las tres chicas como muestra de agradecimiento y volviendo a su auto —Ay ¿Qué estoy haciendo? —Se preguntó mientras ponía las llaves en el auto, pero este no encendía — ¿Ahora qué?— insistió.

"¡Bamm!"
Escuchó un horrendo golpe afuera de la puerta de su auto que lo hizo saltar del susto, no había nadie cerca. 
El auto comenzó a agitarse, como si alguien lo moviera con fuerza, Oliver intentó salir pero los seguros se activaron de repente.
El parabrisas comenzó a empañarse, asustando un poco a Oliver, quien seguía tratando de abrir la puerta del auto.

"No lo hagas"

Las letras aparecieron dibujadas en el parabrisas.

— ¿Qué no haga qué? —preguntó al aire.

—Oliver, que tierno nombre —escuchó una elegante voz a su derecha, en el asiento del copiloto. El auto dejó de moverse y un incómodo silencio reino en el lugar.
Oliver volteó rápidamente, encontrándose con un hombre con capucha negra que impedía que pudiera ver su cara con claridad.

—No puede ser —exclamó al verlo, pues había aparecido de repente — ¿Quién eres?

El extraño río poniendo muy incómodo a Oliver —Un amigo —dijo antes de volver a reír con algo de locura —Y me encantaría ayudarte, dándote un consejo —dijo antes de cambiar el tono de su voz a uno más serio y algo aterrador —No te metas, muchacho, olvida este asunto. Si te involucras mucho terminarás en Afterlife y te aseguro que nunca volverás a ver la luz del día.

— ¿Afterlife?

El extraño volvió a reír con gran locura, como si le divirtiera la situación —Ay, solo llevas un día en esto y ya te están buscando. Perdona, creo que me tarde mucho. Suerte —dijo antes de desaparecer provocando que Oliver cerrara los ojos involuntariamente, sintiendo un extraño escalofrío en su pecho, mientras su corazón latía con rapidez.

Lo más extraño de todo fue que cuando abrió los ojos ya no se encontraba estacionado, mucho menos en su auto, estaba sentado en la banca de un parque que él ni siquiera conocía — ¿Qué demonios? —exclamó al notarlo, levantándose de golpe del asiento.

—Ah, despertaste —lo llamó Lily, la extraña chica de vestido negro trayendo consigo un helado de limón.

—Tú—dijo Oliver muy confundido — ¿Qué pasó? ¿Qué me hiciste?

—No debiste meterte —dijo ella.

— ¿Por qué dicen eso? ¿Qué pasa? —dijo algo desesperado.

Lily saco un suspiro cansado —Es muy complicado y largo, pero todo es culpa mía. Hice algo que no debí de hacer y por eso "algo" me persigue, lamento que te atacara también, debió ser porque cree que tienes relación con Rhydian y...

—No, no, no —negó Oliver, pues no lograba entender —Aguanta. ¿Cómo que me atacaron? ¿De qué hablas?

— ¿No lo recuerdas? Estabas en tu auto, tu coche no arrancaba y esta... cosa sin nombre trato de matarte, te hirió en el pecho y te desmayaste.

— ¿Qué? —dijo casi histérico, pues no recordaba eso, pero sintió un pequeño ardor en su pecho, del cual notó una extraña y gran herida, como un rasguño en el —No puede ser, voy a enloquecer, me volví loco ¿no? —se dirigió a Lily, quien solo lo miró Algo aburrida, esperando a que Oliver se calmara un poco —Ay ¿En qué me metí?

—Ok, debes... irte a casa y olvidar que esto pasó ¿Entiendes?




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