Robert Dean: adiós Chicago

Ya mis piernas no podían mas, y la lluvia, demasiado fría, encontré una plaza- aquí me sentare, esto es demasiado para mi, estoy tan asustada. Porque vino? Porque hace esto?, ya me destruyeron una vez, no puedo permitir nada mas, es suficiente, no pueden engañarme de nuevo- busco mi teléfono y trato de mantenerlo seco para realizar una única llamada, Jessica, es el único lugar seguro ahora, rayos Stefan deja de llamarme. Aquí esta el número de Jessica

- Hola Jessica?- mi teléfono vibra, es Stefan llamando de nuevo

- Sarah, donde estás?

- estoy en una plaza en algún lugar de la ciudad

- envíame tu ubicación y paso por ti

- esta bien- rayos se me agota la batería y Stefan no para de llamar, oh no, espero que haya recibido mi ubicación. Después de unos minutos ahogandome en la lluvia, finalmente llegó, un paraguas en la mano y una toalla en la otra; la puso sobre mis hombres y me senté en el asiento cubierto por mantas que ella ya había preparado; me moría del frío.

- por favor dime que no fue el quien te dejo aqui, bajo esta lluvia

- no, fui yo; he salido corriendo de su casa

- espera que?- pregunto mientras miraba por el retrovisor

- realmente no quiero hablar de eso- le respondí mientras me acurrucaba aun lado, me quedé dormida sin darme cuenta

-Sarah! Hey despierta!, no puedo cargarte hasta la casa debes levantarte- estaba un poco desorientada con los ojos hinchados de tanto llorar; no me habia dado cuenta de eso, al entrar Jessica me llevo a una pequeña habitación para huéspedes

- tengo curiosidad de saber que pasó, pero no es necesario que me lo digas si no quieres- dejo una toalla y ropa seca, se detuvo un momento en la puerta- descansa!.

Hoy he vivido un absurdo jamás pensé que algo así ocurriría, pero parece que esta ciudad es así, o quizás soy yo la que atrae este tipo de cosas. Debo lidiar con Robert y con Stefan, es momento de definir que pasará la realidad es que mi vida no está entre dos hombres, sino dos hombres y vivir mi vida como escritora. Pero quién de ellos me ayudará a ser lo que deseo?...

🎶 likes a virgin uhuhu!, touch for the very first time...🎶

- ugh!, Jessica esta loca, vaya forma de comenzar el día!

- Sarah!, jum luces terrible!

- gracias, muy amable de tu parte- le digo con ironía

- lo que quiero decir es que, así no puedes salir a verte a ese hombre tan hermoso, por que piensas ir a verle, verdad?- me dice algo curiosa, pongo las manos sobre mi cabeza

- si tengo que hacerlo además toda mi ropa esta en su casa

- no te preocupes, yo te daré algo para que estes presentable

- desde cuando eres asi de amable?- pregunto con sarcasmo

- en realidad no lo soy, pero creo que necesitas ayuda, además no soy alguien de mal corazón- me sorprende su respuesta, pero no deseo alargar este momento

- debo irme ya- pongo la palma de mi mano sobre mi frente- debo ir hoy con el Señor Dominic

- no hay problema te vas conmigo solo termino de comer estas frutas, tu deberías comer unas estas pálida- me siento avergonzada

- si lo haré- ella se va por el pasillo a su habitación tan particular como comenzó mi día, estoy ansiosa por saber que pasará.

- toma Sarah colocar esto, no tienes que devolverlo- tengo mis dudas respecto a esta ropa

- que sucede?

- hum pues no se si... Esta ropa este bien para mi

- esta perfecta para cualquiera que tenga dos sexis hombres persiguiendola- me siento avergonzada y sorprendida-, ya deja esa cara de víctima, por favor, toma las riendas

- ja- sonrió aun avergonzada- es extraño todo esto para mi

- pues que no lo sea, ya vístete

- ok- sonrió - en un momento salgo- este traje de quedará super ajustado, que se supone que logre con esto?, bueno no tengo opción; necesito saber como me siento al estar con él, Robert.

Hago una cola de caballo?, no mejor lo dejo suelto, un poco de perfume...

- ya estoy lista podemos irnos

- mirate nada más!, tienes curvas!

- gracias! No es como si fuera una tabla- lo digo con ironía

- bueno vámonos, te espera un gran día

- ja, si- solo hay silencio por el camino; pero percibo el día de hoy mejor, ya no tengo miedo solo estoy ansiosa, sonrió para mí

- bien, hemos llegado!

- Aquí voy

- suerte Sarah!

Al entrar todos posan sus miradas en mi, ni bien veo mi antiguo cubículo, ocupado con alguien más me encuentro con el Señor Dominic

- bienvenida Sarah

- gracias- sonrió levemente

- buenos días Dominic; Sarah podemos hablar- es Robert, me doy vuelta, sus ojos brillan

- no es el momento responde Dominic vamos a la sala de conferencias; necesito hablarles de algunos cambios- asiento con la cabeza y le sigo. Siento un escalofrío por mi espalda, se que Robert esta justo detrás de mi, puedo sentir la fuerza de su mirada sobre mi, puedo ver en las puertas de cristal como me observa

- pasa Sarah, Robert ven necesito decirte algunas cosas- observo como hablan el señor Dominic esta muy serio, y Robert parece algo retador, fija sus ojos en mí cada tanto, solo lo observo curiosa, para mi sorpresa no siento miedos