Valeria se despertó lentamente, aún medio dormida, con una sensación extraña en el cuerpo. No era la sensación de derrota ni de tristeza que había sentido durante semanas desde que descubrió que su exprometido, Jason, la había engañado. Había algo diferente en su interior, algo que no terminaba de comprender. Se sentía... renovada, como si una parte de ella que había estado apagada por tanto tiempo finalmente comenzara a despertar.
Miró alrededor de la habitación con los ojos entrecerrados, recordando fragmentos de la noche anterior. La festividad de la boda había sido hermosa, pero lo que más la sorprendía era cómo había terminado su propia noche. Tras meses de sentirse derrotada y sola, algo cambió cuando conoció a ese hombre, un socio de Andrea, con quien había compartido una conexión inesperada.
Valeria había estado involucrada en un operativo algunas semanas antes, donde había ayudado a atrapar a "Alessio", el supuesto líder de "La Famiglia Moretti", una mafia que había causado caos en varias partes de la ciudad. Durante ese operativo, conoció a alguien que la ayudó a enfrentarse a situaciones peligrosas, un hombre carismático que le hizo olvidar por un momento las sombras de su vida personal. Fue una noche intensa, en la que ambos hablaron, rieron, y hasta compartieron un baile durante el operativo, en una interacción que Valeria jamás había experimentado en medio de una misión.
El día de la boda de Leonardo y Andrea, volvió a encontrarse con él. Lo reconoció al instante, y fue imposible ignorar la atracción que surgió entre ambos. Entre bromas, coqueteos y miradas cómplices, algo se encendió en Valeria, algo nuevo, diferente. Estaba decidida a ser una mujer nueva, a dejar atrás la imagen de la que había sido engañada por su ex. Y así, en un acto impulsivo, esa noche decidió compartir su cama con él, entregándole su primera vez, algo que no había esperado, pero que le parecía correcto en ese momento.
Mientras Valeria despertaba del todo, giró la cabeza y lo vio salir de la ducha, secándose el cabello con una toalla. Su corazón latía rápido, y aunque era nueva en el juego de coquetear, decidió intentarlo.
"Buenos días," murmuró Valeria, tratando de sonar juguetona, aunque ella misma no estaba segura de cómo hacerlo correctamente.
El hombre la miró y sonrió, su risa suave pero sincera. "¿Estás intentando coquetear, Valeria? Eres... adorable."
Valeria se sonrojó ligeramente, pero su curiosidad la empujó a hacer una pregunta que había rondado su mente toda la noche. "Nunca me dijiste tu nombre completo. ¿Cuál es?"
El hombre se secó las manos y se sentó en la cama junto a ella. Levantó la mano con una sonrisa y, como si fuera la primera vez que se presentara, dijo: "Tienes razón, no me presenté bien. Hola, soy Alessio Moretti... el verdadero líder de 'La Famiglia Moretti'."
El aire en la habitación se volvió denso en un instante. Valeria se quedó congelada, su mente procesando esas palabras. ¿Alessio? ¿El verdadero líder? Todo encajó de golpe, y su mente se llenó de alarmas.
"Ay, rayos." fue lo único que pensó Valeria, sin poder decir nada en voz alta.