Los baúles de Clare estaban en el piso que de ahora en adelante sería su habitación; frente a la cama estaba una cómoda con un espejo, donde se miraba a ella misma apoyada sobre sus manos, tenía el cabello suelto y se había puesto un camison que esperaba ocultara un poco, los kilos que tenía demas.
Fue un día largo; la boda se había llevado a cabo en la mañana y el banquete por la tarde, muchas personas los felicitaron y les desearon lo mejor, tal vez Marcus no, por que cuando le dió un abrazo a Damian le dijo algo que no pudo escuchar que hizo que Damian le diera un pisotón.
—Ahora tengo una cuñada que me defenderá—lo acusó
Rió cuando recordó eso, la amistad que tenían era muy bonita.
Comenzó a trenzar su cabello y pensar en si Damian vendría esta noche, una parte de ella quería que viniera y le mostrará que era eso por lo que la gente arriesgaba su vida, su reputación e incluso la relación con su familia, la razón por la cual los poetas le dedicaban tantas palabras cargadas del más puro deleite.
Por otro lado tenía miedo, miedo de ser una decepción o algo peor, miedo por la reacción de su ahora esposo; que había visto mujeres más bellas.
Se metió en la cama, tapandose con las sábanas y decidió esperar si Damian venía o no.
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Damian ya no tenía puesto el saco, su cabello que esta mañana había lucido tan bien arreglado ahora estaba despeinado por las muchas veces que pasó su mano por el.
Pensaba en como haría esto, como empezaría.
Sentado en su cama trataba de encontrar una buena forma de hacerlo, no era un inexperto pero.... esta sería la primera vez en su vida que haría esto sin sentir deseo; no debía equivocarse, Clare no le parecía una mujer sin atractivo, su opinión había cambiado del que tenía cuando la conoció, en el cual le había parecido un poco sosa.
Ahora que llevaba un tiempo tratandola pensaba que era muy tierna, pero no le hacía sentir el deseo que experimentó con otras mujeres, no era mujer por la que los hombres babearan, su apariencia era muy común y aunque sonaba como un arrogante superficial, así era como pensaba y no quería hacerla sentir insignificante; no quería lastimarla, ella había tenido suficiente de eso.
Y le estaba resultando muy difícil encontrar alguna forma de hacer esto, si no asistia esta noche a su habitación, la lastimaría, no podría evitarlo, aunque Clare actuaba como si él no le importaba, este tema era muy delicado y retrasarlo solo empeoraba las cosas, se sirvió una copa de whisky, lo tomó de un solo trago y fue a la habitación de su ahora esposa.
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Clare estaba quedandose dormida cuando escuchó el sonido de la puerta.
—Clare?—era Damian.
Arregló las sábanas y dijó:
—Adelante.
Damian ingresó con pasos lentos, cuando estuvo completamente dentro escuchó como ponía el seguro a la puerta.
Su corazón comenzó a latir más rápido.
Se acerco a la cama y pudo notar que solo tenía puesto la camisa y las calzas, su cabello estaba desordenado, empezó a sentir mariposas en el estómago, él la miro un momento y luego miró los baules.
—Trajiste todas tus cosas?
—No todas, me faltan algunas que traere con el tiempo.
Damian continuó mirándolos, parecía que no sabía que hacer.
—Fue un día agotador —dijo —Tal vez deberiamos descansar y dejar esto para otro día —esperaba que aceptará.
—No, Clare..........—y Damian se toco el cuello como si le doliera.
Entonces se acercó al lado de la cama y se sentó casi al final, la miró, dió unos golpecitos al lado de él y dijo:
—Ven, sientate a mi lado.
Clare levantó las sábanas, su camison se había subido un poco, lo bajó y se sentó donde le había indicado, colocó sus manos sobre sus piernas esperando por el siguiente movimiento de Damian, él se acercó aún más hasta que su muslo tocó la pierna de ella.
—Mirame— le dijo.
Ella obedeció.
Damian colocó sus manos sobre sus brazos desnudos como si fuera a darle un abrazo, inconscientemente bajó la mirada, Damian pasó sus manos de los brazos a su rostro obligándola a no apartar la vista de él, se examinaron por unos segundos y comenzó a acercar su rostro lentamente, hasta que sus labios se tocaron.
Fue solo un roce de labios, que hacía que su corazón latiera más rápido, entonces Damian empezó a moverlos.
Era algo tan diferente, podía sentir el aroma de Damian y sus labios suaves, intentó imitar sus movimientos, él acarició su mandibula con el pulgar, mientras que con la otra mano bajaba el tirante de su camisón, continuó besándola mientras bajaba la prenda hasta la cintura.
Se separaron un momento, sus pechos estaban desnudos, intentó cubrirse pero Damian tomó sus brazos alejandolos de lo que deseaba ver; con lentitud y delicadeza acarició uno de ellos, dibujandolo con su dedo, escuchó como soltaba un suspiro, vió su rostro; había cerrado los ojos, con más seguridad tomó todo el pecho en su mano, apretandolo.
Volvió a soltar un suspiro que silencio besandola, ahora podía sentir sus pechos desnudos tocando la tela de la camisa de Damian; este se separó un momento agarrandola de la cintura, la levantó poniendola de pie, entre sus piernas.
Tenía que mirar hacia abajo para poder ver el rostro de Damian que estaba ocupado bajando el camison hasta que este cayó al suelo, cerró los ojos intentando no avergonzarse y huir como deseaba hacer, sintió las manos de Damian en su cadera, bajando con caricias hacia sus muslos, escuchó el roce de las sábanas.
Damian se ponía de pie; ya no sentía sus manos, abrió los ojos para ver que se quitaba la camis, luego sin dejar de mirarla empezó a quitarse las calzas, sintio grandes deseos de mirar a otro lado pero no quería que él pensara acerca de ella como alguien demasiado sensible, estuvo a punto de lograrlo pero cuando vio el miembro masculino de Damian, simplemente tuvo que alejar la vista; respiró un momento y volvio a mirarlo esta vez al rostro, estaba muy cerca de ella, levantó los brazos y la abrazó como si fuera su cumpleaños, pero sus cuerpos estaban desnudos tocándose por todas partes, sintió su mano acariciar su vientre y viajar hasta su lugar más intimo, la acaricio; tuvo deseos de pedirle que no se detuviera jamas, no fue consciente de como fue retrocediendo poco a poco hasta colocarla sobre la cama.