Capitulo 3

Valerie.

Thomas y yo salimos de la escuela y yo tenía un rostro victorioso.

El solo me miraba y soltaba una risita. Llegué a dónde se encontraba mi chófer y Thomas se despidió de mano; tengo que decir que esperaba un beso a lo menos en la frente.

Veo que el se va caminando hacia la dirección opuesta, y dándole una última mirada suspiro ondo y suelto -Thomas...

Estaba de nuevo en el mar de mis pensamientos hasta que el chófer freno.

Al parecer ya habíamos llegado, fue tan rápido. Tanto tiempo me perdí en mis pensamientos...

Baje del coche y me diriji a la puerta, la abro rápidamente con intenciones de entrar corriendo directo a mi habitación.

Pero algo me hace frenar, es mi padre y esta crusado de brazos mala señal...

-Valerie. Tengo que hablar contigo_dice cuando me vio en camino a mi habitación.

Yo simplemente rodé mis ojos para sentarme frente a el 

-¿Que es lo que quieres decirme?_digo en mi lenguaje de señas.

-Pues, el vendra_dice mirando a la ventana.

-¿Quien?_digo con curiosidad.

-Sebastian...

Ante esa mención de su nombre mi vista se nubla, mis pocos recuerdos vagos vienen de nuevo a mi.

De nuevo abro los ojos y estoy en un lugar distinto lo reconozco es la casa de Sebastián ¿Pero que hago aquí?.

-Hola mi amor_dice Sebastián besándome.

Intento quitarme pero veo que yo no tengo el control, es solo un recuerdo...

Veo que yo le sonrió y me dice -Mi amor sabes que siempre estaré contigo, pase lo que pase...

Ante esas palabras mi corazón se rompe, esas palabras tan vagas en algún momento me gustaban.

Las lágrimas comienzan a salir, me doy cuenta de que el recuerdo ha acabado y mi papá solo me mira, espero un abrazo pero... No llega, el tiene el corazón duro como una piedra.

-No_digo dando un golpe a la mesita de centro.

-Lo siento pero no está en discusión_dice saliendo de la casa.

¿Cómo puede hacerme esto? Soy su hija ¿No?. Pero se que por más que insista no se rendirá, el es hijo de su mejor amigo. Supongo que le pidió que se quedara con nosotros y el solo acepto.

Me seco las lágrimas y subo a mi habitación, necesito consuelo ¿Pero de quién?.

Tomo mi teléfono para llamar a Michelle pero no lo hago, no la quiero preocupar.

Me recuesto en mi cama cierro mis ojos y caigo en un profundo sueño. Al menos eso me brinda paz...

Thomas.

Veo a Valerie darme una última mirada y desaparece suspiro profundamente y para distraerme un poco corro lo más rápido que puedo para llegar a mi casa.

Llegó y veo que me eh cansado porque el sudor comienza a resbalar de mi frente.

Veo a mi padre en el comedor y lo saludo.

-Llegas justo a tiempo, cámbiate y baja a cenar_dice mi padre sonriendo.

-Claro papá ahora bajo_digo subiendo a mi cuarto.

Me doy una ducha rápida y me visto con unos pantalones negros y una playera blanca.

Bajo al comedor encontrándome con mi padre y mi madre esperándome.

Me siento y comenzamos a comer estaba delicioso por cierto parece que mi mamá cocino.

Al terminar me quedé un rato sentado y derrepente siento una punzada en mi cabeza, agh como duele cierro los ojos fuertemente intentando que el dolor pase.

Y así fue, abro los ojos topandome con la mirada de mis padres nerviosos y sorprendidos.

-Tengo algo en la cara_digo riendome.

Al ver que no dicen nada tomo rápidamente mi teléfono para observarme y...

Tengo un ojo de diferente color es amarillo. ¿Pero que carajos?.

Les devuelvo la vista a mis padres y en eso mi padre comienza a hablar -Temia que esto pasara pero ya estás en edad de esa etapa_dice seriamente.

-¿De que hablas?_respondo.

-Pues, hace mucho tiempo una de nuestros antepasados lanso una maldición a un hombre ambicioso... Y lo hizo cuando la luna llena estaba en todo su esplendor y un lobo auyaba.

Sin pensar lo que pasaría la maldición también nos afecto sabes cómo...

-¿Cómo?

-Haciendo que fuéramos hombres lobo_dice cerrando los ojos para después abrirlos y que estos estubieran amarillos.

-Pero que carajos_digo nervioso.

Mi madre solo asiente a lo que mi padre dijo y yo solo paso saliba.

Haci que soy un hombre lobo.

Genial lo que me faltaba...

Valerie.

Me despierto dandome cuenta que ya es de mañana, mi estómago gruñe ya que no comí nada en toda la noche.

Me levanto y me visto dispuesta a bajar a comer algo.

Estaba apunto de llegar cuando escucho la voz de ese imbécil.

Intento subir de nuevo pero mi padre me detiene.

-Valerie ¿no vas a saludar?_dice.

Mi furia se eleva porque tuvo que decir eso maldita sea.

Me volteo y saludo con la mano.

-Hola Valerie que gusto verte de nuevo linda_dice guiñándome un ojo 

Eso me hace estallar tanto furia como tristeza doy la vuelta para subir a mi habitación, pero un agarre me detiene es Sebastián.

Como  quisiera hablar para decirle lo que se merece.

Intento safarme pero no puedo me arrima a el dandome un abrazo.

Y me susurra -Te voy a recuperar, cueste lo que cueste.

No puedo salir de su agarre mi maldita pesadilla de que volviera se está haciendo realidad.

Se esperaban que Thomas fuera un hombre lobo, ustedes que team son Sebastián o Thomas, yo soy más Thomas. Espero que les este gustando un saludo ♥️