Rompiendo la maldición

Capitulo 12- MARATÓN.

Thomas.

Después de darle a Valerie, los tipos se fueron.

Ya no me importaba nada en absoluto, ni siquiera que me matarán.

Con tal de ir con mi amada y estar con ella en un paraíso tan hermoso como ella.

La sangre no dejaba de salir, intentaba parar la emorrajia pero no lo lograba.

Pronto yo también estaba lleno de sangre.

Vi al chico de la otra vez salir a toda velocidad pero lo detuve.

Tomé a Valerie en mis brazos y corrí lo más fuerte que pude hacia el bosque donde sabía que podría haber una probabilidad de que viviera.

Llegué a un lago y la meti en el, según creencias de mis familiares decían que sanaba las heridas.

Su mano tocó mi mejilla y sonrío lijeramente.

-Thomas, me prometes que estarás bien.

-No digas eso, tu lo vas a comprobar mientras estés a mi lado_digo expulsando algunas lágrimas.

-Dejame ir tienes que seguir_dice moviendo sus labios.

-No mi luna, no te dejare_digo apretándola en mi pecho.

Por más que quería evitar llorar no puede me dieron en mi punto débil.

Vi algunas lágrimas resbalar por sus mejillas.

Cómo desearía que esto fuera solo una pesadilla.

Siento que me acuchillan por detrás y suelto a Valerie.

Y... La corriente se la lleva.

-¡NO!.

Intento llegar a Valerie nadando pero no lo logro.

Mi luna, mi mate, mi vida.

Mis lágrimas no cesan y veo al tipo que me acuchilló es el mismo que le disparó a Valerie.

También veo a mi tío, está en su forma lobo acavandolo.

Valerie mi dulce luna, mi estrella que llegó a iluminarme en mis oscuros días.

-¿PORQUE?_grito.

Mis ojos se tornan completamente amarillos.

La bestia está tomando el control.

Ahora que mi mate no está...

Mi vida se ha vuelto a apagar y dudo que se vuelva a encender.

 

Valerie.

Veo lágrimas en las mejillas de Thomas, eso hace que mi corazón se parta.

Siento un horrible dolor, es la bala.

Intento no llorar pero no lo puedo evitar.

Veo que alguien apuñala a Thomas y me suelta.

No puedo nadar y la corriente me lleva.

Veo a Thomas intentando venir hacia mi pero no lo logra.

-¡Thomas te amo!_fueron mis últimas palabras.

Y entonces mi vista se oscureció...

Entre abro los ojos dándome cuenta que tengo un rostro frente a mi.

Enseguida retrocedo pero el chico me habla.

-Tranquila no te haré daño.

Me detengo y busco mi herida.

Pero en su lugar solo hay una cicatriz.

¿Que carajos?.

El lago me curo tal y como pensaba Thomas...

Thomas, ¿Estará bien?.

-No puedes hablar_dice el chico.

Muevo mis labios y digo -¿Dónde estoy?

-Estas a salvo, que bueno verte de nuevo hermanita.

¿Hermanita?.

Pero yo no tengo hermanos.

¿Quien es este chico?.

-Yo no tengo hermanos_respondo.

-Eso te hicieron creer_dice ayudándome a ponerme de pie.

Lo miro curiosamente y suelta una risa.

-Algun día nos volvemos a ver hermanita.

Chasquea sus dedos y cuando miro de nuevo estoy en mi habitación.

Tengo un hermano y ¿Cómo acabe ahí?.

Son muchas preguntas.

Pero ahora solo quiero ver a el chico que me alegra mi vida.




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