Rosas | Kaisoo

Capítulo 5: Rosa verde

161ea6c08ec3914f574448161770.jpg

 

Rosa verde: Agosto.

—You bitch!

Kim se esperó mil y un escenarios, pero el ser empujado en la vereda nunca pasó por su cabeza. Byun BaekHyun, uno de los disque amigos de KyungSoo estaba sobre él golpeándole con un bolso probablemente mucho más caro que todos sus órganos. JongIn se removía como un gusano, no buscaba lastimar al más bajo, solo quitárselo de encima. Y cuando lo logró, Byun y él estaban rodeados de personas. Parecía un ring improvisado.

—¡Dime que es mentira! —gritó el más altivo de los dos.

—Para ti puede ser lo que quieras, tu opinión sobre mi relación con él no me interesa.

—Pero a él le interesa lo que yo piense.

—Entonces, ¿qué haces acá?

BaekHyun pisoteó. —No montaré otra escena, hablemos. —Sonrió, arreglando su cabello.

Los espectadores luego de tomar las respectivas fotos como si fueran paparazzis se esfumaron.

—¿Qué son? —insistió Byun, buscando oír lo que quería oír y, eso significa que quería escuchar una mentira.

—Si no aceptarás la respuesta no hay caso en que preguntes. —JongIn cogió un balde inmenso adornado con sus bellas flores y lo metió en una casita, BaekHyun miraba aterrado la morada.

—Por favor, dime que no vives aquí.

—No vivo aquí, pago una pequeña renta solo para guardar mis flores. —Metió otro barril.

—Thanks God.

Y ahí no se detuvo la irritante voz del ganador a "Altanero del año". JongIn, con su paciencia al límite solo pensaba en KyungSoo, solo pensaba que todo sacrificio es bien recompensado, pero para eso hay que atravesar un mar de desafíos. Se sentía como Ulises en la Odisea, solo que con un poco menos de suerte.

Oh, Atenea, ¡¿por qué no me ayudas a mí?!

De un momento a otro BaekHyun había tomado su mano y en su palma había depositado un fajo con dinero. —Tengo más de esos, pero te los daré con una condición. ¿Escuchaste? ¡Solo una! —La vena en la frente de JongIn se hizo notoria. —Lo dejarás en paz.

—No me alejaré de él, por gente como tú es que él está arruinado.

—Gente como yo es gente como él —dijo sin un ápice de dulzura. —Conozco a mi amigo como la palma de mi mano, deberías pensar en que soy alguien decente y te lo estoy pidiendo, porque cuando su madre se entere, ella te destruirá... o a él, pero igual te lastimaría, ¿no? Lo amas, ¿cierto? ¿Quieres verlo sufrir? Solo déjalo y no habrá problemas para ninguno.

—Él ya tiene un problema, necesita ayuda. —El tono de voz de JongIn era bajo.

—¡Bien! Contratemos un psicólogo, problema resuelto.

—El psicólogo no solucionará nada si la gente que lo rodea sigue siendo una mierda.

—¡No te creas un héroe!

—¡Y tú no te creas la última Coca-Cola del desierto!, estás pasando de moda. —Cerró la puerta con fuerza y con sus flores bien guardadas dentro. Miró fijamente a Baek, pasó por su costado y chocó su hombro contra el del contrario. Si Byun quería tener una estúpida guerra, él le daría la estúpida guerra y, obviamente, ganaría.

 

 

 

---

 

 

 

Ni bien KyungSoo abrió la puerta, saltó a los brazos del morenito y le robó un beso. Tocó el paraíso y no quiso dejarlo ir. Levantó a KyungSoo del suelo, cerró la puerta como pudo y los encaminó a la habitación del mayor, donde se acurrucaron.

Mientras KyungSoo buscaba en Netflix una película para ver, JongIn no podía apartar su vista de la rosa verde que descansaba encima de la mesita de noche.

—No la has puesto en un jarrón.

—¡Oh! Me olvidé. —Rio. —Ten. —Le entregó el control remoto y salió de la habitación.

JongIn se acostó en la cama, mirando el techo. Su mente repetía como él había seleccionado cuidadosamente la rosa verde y la había llevado consigo a la cita. Habían acordado ir a desayunar a un restaurante, pero JongIn le imploró a Soo que le cocinara algo, Do no se resistió y lo cumplió.

Kim mantuvo la flor escondida hasta que comenzaron a comer huevos revueltos, se paró con valentía delante de KyungSoo y con palabras atoradas en su garganta. No hubo necesidad de "meterle floro" a la confesión, sólo entregar la rosa y decir el significado era bastante emotivo para Do, quien aceptó inmediatamente.

La rosa verde significa esperanza y es la mejor rosa para regalar cuando se inicia una nueva relación.

Tú y tus flores enamoran.

Si realmente quieres algo, no dejas que nadie ni nada te detenga hasta que lo consigas. —JongIn lo tomó de la cintura con gentileza, como si cogiera entre sus manos la obra de arte más cara del mundo. —Yo te amo y quiero que ames.

Yo ya te amo, JongIn. —Pero Kim no podía creer fácilmente en esas palabras, aunque las hubiera anhelado desde el primer momento en que sus ojos se posaron sobre aquella pequeña y despampanante figura.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.