Rostros vacios

Primer y único capitulo

Disfruta del cuento.

Ahostar es un niño de apenas 12 años, él es de baja estatura, pero, sin duda, su coeficiente intelectual sobrepasa los límites, toda la ciudad le conoce y no solo por tener inteligencia nata y montones de dinero como herencia, sino, porque, corre el rumor de que perdió la cabeza por completo, lo toman por un chiflado, ¿Cuál es la razón? Nadie lo sabe, pero la mayoría de los habitantes comentan que Ahostar ha pasado días dentro de casa, sin ir a la escuela, la razón de esto es completamente desconocida, pero...lo que más tienen alarmados a los habitantes de la ciudad, es que, no volvieron a ver a sus padres desde hace tres años.

Una mañana, Ahostar corría de regreso a casa, brincando los charcos que se formaban en la calle debido a la lluvia, los aplastaba con toda la energía que tenia, la energía de un niño.

había ido a la escuela finalmente, pero solo, para perder el tiempo, pues realmente  no requería de la escuela, pues tenía un aprovechamiento excepcional, sería tan fácil el solo dejar la escuela y quedarse cómodamente en su hogar, donde jamás le ...       

había ido a la escuela finalmente, pero solo, para perder el tiempo, pues realmente  no requería de la escuela, pues tenía un aprovechamiento excepcional, sería tan fácil el solo dejar la escuela y quedarse cómodamente en su hogar, donde jamás le juzgan, insultan y miran con miedo desmedido, pero él no es ningún tonto, si va a la escuela, no levantara demasiadas sospechas sobre su más oscuro secreto.

Entra a su casa completamente empapado, arroja su mochila por un lado y comienza a gritar; ¡MADRE! ¡PADRE! ¡HE VUELTO! No obtuvo respuesta inmediata, por ende dedujo que su madre se encontraba en la inmensa cocina de la residencia, como todos los días, siempre se encontraba sentada frente a la mesa, sin expresión, y esta vez no fue la excepción, efectivamente, estaba en el lugar de siempre con ese mismo gesto vacío.

¡Hola madre! ¿Cómo estás? ¿Qué hiciste para cenar? besa a su madre en la mejilla y mira por curiosidad lo que está en el plato, ¡Cielos, albóndigas!, ¡mis favoritas!, sonríe, pero esta se vuelve a borrar, puesto que su madre no le correspondió con el mismo semblante.

Dos horas después, Ahostar corría por los pasillos para matar el aburrimiento, la mansión es enorme, ni siquiera la había explorado del todo, le intrigaba esa puerta de color negro... color a muerte. Se encontraba al final del pasillo, que conectaba con otros más, el color de dicha puerta le inquietaba, no se atrevía a indagar detrás de esta.

 se encamina al estudio de su padre, que estaba en una silla, con el periódico entre las manos, su mirada estaba perdida entre las letras, la mirada en trance, a cualquier persona le daría muy mala espina, pero no le importaba, y se sentó en una b...

 se encamina al estudio de su padre, que estaba en una silla, con el periódico entre las manos, su mirada estaba perdida entre las letras, la mirada en trance, a cualquier persona le daría muy mala espina, pero no le importaba, y se sentó en una butaca cerca de su padre.

La escuela se está volviendo más aburrida padre, los profesores no tienen nada nuevo que enseñarme, siento que pierdo el tiempo, el padre continuaba con la vista fija en el periódico, ignorándolo; no parece que a Ahostar le importe en absoluto, así que continúa hablando, no tengo otra opción más que ir sin chistar, de lo contrario, puede que sospechen aún mas de mí, y que poco a poco, descubran mi...secreto, al pensar esto, se puso nervioso, comenzó a sudar frió, incluso, se enojó por ello, sin pensar, le arrebato el periódico a su padre y comenzó a destruirlo; es curioso, ¿Por qué los brazos de su padre estaban aún elevados?, ¡como si aún tuviese el periódico entre las manos!

secreto, al pensar esto, se puso nervioso, comenzó a sudar frió, incluso, se enojó por ello, sin pensar, le arrebato el periódico a su padre y comenzó a destruirlo; es curioso, ¿Por qué los brazos de su padre estaban aún elevados?, ¡como si aún tu...

No hace falta que lo digas padre, me iré castigado a mi habitación. Después de una hora, parecía que el ambiente se había tranquilizado un poco, Ahostar decide salir de su monumental dormitorio; ahora se dirige al salón, sus padres estaban mirando la televisión, la mano del padre tocaba un poco la entrepierna de la madre, mientras ella, solo tenía la mirada fija en la TV.



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En el texto hay: misterio, tragedia, suspense

Editado: 24.01.2019

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