Rota

Ventidos

En la primavera nos casamos, desapareciendo así otro poco de los empleados antiguos que quedaban en la casa. El notó mi tristeza ante este hecho y me dio consuelo.

Nosotros nos amábamos y los equivocados eran ellos, la sociedad que no nos entendía y criticaban nuestra relación como si fuera algo inequívoco y enfermo.

Yo no tenía la culpa, ninguno de los dos la tenia.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.