Ruido de Alas

Capítulo 1

Boston, Massachusetts

Veintidós años después

 

La ceremonia había sido muy íntima, realmente sencilla; ella la había querido de esa forma, él estaba más que encantado y de acuerdo, solo invitaron a sus amigos más allegados, los que de verdad debían de estar en aquella celebración. Sus padres no asistieron.

Allyssa Mc’Namara y Will Pratt, acababan de casarse. Ella era modelo de campañas y pasarela, competitiva y reconocida en su medio; él era fotógrafo profesional, especializado en varias áreas de su habilidad.

—Está más que feliz el día de hoy.

—Lo sé.

—Quita esa cara, Liam. Cualquiera que te vea, piensa que Ally está yéndose del planeta a compartir la existencia con un montón de salvajes caníbales violadores.

—No digas babosadas, Lev. Sabes que yo no estoy de acuerdo con esta boda.

—Liam…

—No, no me harás cambiar de parecer. Es muy pronto, no se conocen, prácticamente no saben nada el uno del otro.

—Saben que se aman.

—Eso dicen ellos.

—Eso se están demostrando.

—Amar, no es solamente firmar un papel e intercambiar anillos. Ambos sabemos eso, perfectamente.

—Estas obstinado y hecho una furia. Pero no puedes seguir protegiendo a tu hermana toda la vida de todo lo que ocurre. Tiene que vivir, Li… eso también lo sabes.

—Ese es el problema, Lev. Que, con solo veintidós años, Al, ha vivido demasiado.

En ese momento, Allyssa, le hizo señas a su hermano y a su mejor amiga para que se acercaran, se tomarían una foto familiar. Y en eso se resumía la familia de Ally. Ellos tres eran una sola unidad, un todo que se movía junto.

—Hermano, por favor, sonríe un poco, ¿sí? Hazlo por mí.

Y como siempre, ahí estaba Liam, dándole exactamente lo que su hermana pedía en el momento en que lo pedía. No se hizo de rogar, y sonrió en las fotografías que compartía con su hermana y con su fiel amiga.

—Menos mal la sesión de fotos no saldrá tan costosa, Will —dijo Levy, mirando al esposo de su amiga.

—Vamos, Lev. Como crees que siendo fotógrafo no me encargaría de los recuerdos de este día. Jim, por favor mueve un poco la luz hacia la derecha, necesito que no impacte directamente en el cuadro.

—No seas mandón, soy publicista, no tu asistente.

—Ya, pero años junto a mi te han hecho uno excelente, vamos haz lo que digo. Luego tomaré las fotos de los padrinos…

—Vaya, pero esto sí que es una verdadera sorpresa. Si no lo veo con mis propios ojos, no lo creo. La bellísima y esplendida modelo Allyssa Mc’Namara, siendo esposa y propiedad de mi querido y famoso colega, Will Pratt.

La voz de Bradley Spark, cortó el momento del festejo; Will, no se consideraba colega en lo absoluto de aquel fotógrafo, que vendía su trabajo al mejor postor y que con sus fotomontajes había hecho tanto escándalo y daño a la carrera de muchos artistas, políticos, actores y pare de contar. Sabía que la única razón por la que estaba ahí era porque la prensa ya había dado con el lugar de la reunión y ahora estaban expuestos.

—Vamos, Brad. No seas tan puntoso, si sigues de esa forma nuestra pareja del momento se negará a la entrevista.

Elvira Stone, una de las periodistas más reconocidas de la revista GFG —Glam Fashion Glam—, apareció tras Bradley, mirando con picardía y conciencia a los recién casados.

Will y Ally, sabían que no se librarían de esta, que tendrían que darle la primicia de su relación y boda a GFG. Jim, como publicista, se los había advertido, de la misma forma que lo había hecho Olivia, la publicista y mánager de Ally.

Casi en un abrir y cerrar de ojos, sin que Ally se diera cuenta de donde salió, Olivia ya estaba junto a ella preparándola para lo que tenía que decir, lo que no debía responder y como debía llevar aquel interrogatorio disfrazado de entrevista que realizaría Elvira, de la misma forma comenzó a aconsejar a Will que, de ambos, era el que más rápido se ofuscaba y salía de sus casillas. Jim, también se acercó a su amigo para calmarlo un poco, bien sabía que debía estar furioso con la presencia de Bradley, en aquel lugar.

—Bienvenida, Elvira. La verdad, esperaba que llegaras un poco antes, ¿demoras en la información? —dijo Olivia, tratando de aligerar el ambiente y dándole un poco de chispa a Elvira, ninguna de las dos se soportaba.

Mientras la mánager de Ally, hacia su trabajo; Levy, hacia el suyo, retocando el maquillaje de su amiga, y haciendo que su peinado easy twist suelto y despeinado, estuviera más que impecable.

—No le des el gusto de hacerte volar la cabeza, Will. Estábamos claros que sería un milagro si se libraban de esto el día de hoy. Son personas del medio, quizás no un Bradgelina, pero sabes que son conocidos a escala —dijo Levy, terminando de acomodar el corbatín del ahora prácticamente su cuñado.

—Lo sé, pero no soporto a ese tipo. De verdad, Elvira tiene que cambiar de fotógrafo.



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En el texto hay: romance, drama, amor

Editado: 17.11.2020

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