"Recuerdos de un hijo"

Aun hoy recuerdo quien fue mi padre

Aun hoy recuerdo su rostro, demacrado y cansado, ojos llenos de cansancio, suplicando un sueño profundo.

Aun recuerdo las delicadas siluetas de sus mejillas, caídas por el paso del tiempo, y aquellos pelos que formaban su robusta barba.

Aun recuerdo el dolor de aquella noche fatídica donde la peor noticia fuer recibida, aun recuerdo el sonido de mis pensamientos, detenidos al escuchar lo que me decía aquella jovencita que olvide el nombre.

Aun recuerdo el sonido del lamento de aquella jovencita, que pedía a gritos despertar de aquel sueño que yo presenciaba, recuerdo la odiosa tranquilidad de esa noche, la imagen de la luna que velaba mi cabeza aun persiste en mi mente.

El llanto de mi madre retumba en mi cabeza cada noche, cada vez que veo la luna, de cualquier noche tranquila, los recuerdos invaden mi mente, y el recuerdo del dolor vuelve.

Aunque recuerdo el rostro de mi padre, no recuerdo su voz, recuerdo sus palabras, pero no su significado, recuerdo sus brazos, pero no recuerdo el calor de su abrazo, recuerdo sus manos, llenas de arrugas, y cansadas, pero no recuerdo aquella sensación que creaban al rozarse con mis cabellos, aun cada domingo recuerdo escuchar su caminata por la casa, aún recuerdo verlo cortando el pasto, cansado pero contento.

Aún recuerdo la vez que lo vi dormir, dentro de lo que mas odie es ese momento, recuerdo que su rostro se veía igual al de ayer, cuando lo veía dormir, sus ojos estaban cerrados como cada mañana, y labios se abrían como cada mañana, todo era igual, y al mismo tiempo no lo era.

Recuerdo haber jurado que respiraba, recuerdo haber golpeado el cristal, esperanzado de que sus ojos se abrieran, como cada mañana, como cada día.

Implore que despertara, pero nada pasaba, sus ojos permanencia cerrados, su rostro permanecían dormido.

Recuerdo la ultima vez que lo vi despierto, recuerdo la última vez que vi sus ojos cansados, el sonido de sus pasos, recuerdo un montón de cosas, pero no recuerdo las emociones, no recuerdo nada de eso.

Recuerdo su tumba, pero no siento tristeza, recuerdo sus fotos, pero se ven tan diferentes al de mi memoria, no se parecen en nada.

Recuerdo quien era mi padre, pero no siento nada, no siento tristeza, ni siento alegría, por que, aun así, aunque permanece dormido, en aquel cementerio, no está muerto, porque lo recuerdo, recuerdo a mi padre, recuerdo el dolor, recuerdo el llanto, y desearía sentir los recuerdos, pero solo los veo.