- Melanie y yo, vinimos a dejar todo lo que me pediste, de hecho, ya nos íbamos – dice Jason levantando las manos mientras camina hacia la puerta para salir, seguido de Melanie que no dijo nada, solo bajo la cabeza y salió
- yo estaba checando que nuestra Luna comiera, pero, ya me iba, también – dice la señora Lucia acercándose a Eros, quien la detiene del brazo con suavidad y le pregunta molesto
- ¿comió? –
Emily ve y escucha cómo se comporta Eros y la hace sentir como una prisionera, esperando un juicio, incomoda baja su mirada observando su plato, esperando que no se moleste más porque no se terminó su comida
La señora Lucie le contesta
-sí, si comió – y después le susurra - se ve muy asustada, se amable con ella, debes darle tiempo y tenerle paciencia -
- gracias Nana - solo eso dijo Eros, ya que no quiere discutir con su Nana, que es la única en la manada a quien quiere y respeta, aparte de Jason su beta
El Alpha camina directamente hacia Emily, se acerca mucho, pone una mano sobre la mesa y la otra en el respaldo de la silla de ella y observa su plato casi vacío, no pretende ser acosador, pero, se muere de ganas de verla y oler su aroma.
-no has terminado de cenar – dice el viéndola fijamente a los ojos, para después bajar su vista a los labios de Emily
Ella, se muerde su labio inferior pues está nerviosa, el, está muy cerca de ella, su perfume huele delicioso, el está recién bañado y cambiado, ella, no sabe donde se arregló, solo sabe que se ve sumamente atractivo. Emily mira fijamente a los ojos a Eros, su color entre miel y dorado, le fascina. Eros sonríe de lado de manera arrogante, levanta una de sus manos y con su pulgar libera el labio de Emily que está rojo por la presión de sus dientes
-maldito lazo, maldito vinculo y malditas hormonas, no me dejan pensar, parezco una luciérnaga atraída por la luz – piensa Emily – y todavía el muy cabrón, se ríe de mí, de mi cara de tonta que seguro tengo, reacciona Emily, no dejes que sepa que estas cayendo a lo bruto por sus encantos –
Emily se separa de Eros, dejando caer su mano
-ya no tengo hambre, gracias – dice tranquilamente
Eros no se mueve de su lugar, pareciera que esta dudando que hacer, ella, sabe que esta más que molesto, pero, espera no vuelva a comportarse de manera cruel
-tenemos una charla pendiente, estoy muy molesto, Emily – dice Eros levantándose lentamente, mientras la observa con curiosidad, Emily se remueve incomoda, sin saber muy bien que decir, no quiere enojar a la Bestia
-te deje muy claro lo que debías hacer, ¿Qué tan difícil es para ti entenderlo? –
-entenderlo es fácil, hacerlo imposible, he vivido con mis padres toda mi vida, me han amado, cuidado, protegido y mimado desde el día que nací, no puedo simplemente olvidarme de ellos, quiero ver que ellos están bien – aclara Emily algo desesperada
-te dije que estaban bien – dice Eros
-y yo te dije que quería irme a mi casa y ver a mis padres, sin embargo, me ignoraste, ¿porque esperas que yo te escuche? –
- ¡porque yo soy el Alpha, mando aquí y se hace lo que yo diga! –
- ¿Qué, acaso esperas o crees que soy una idiota sin cerebro que solo va obedecerte porque se te hinchan las ideas? –
Eros no puede evitar sonreír ante su comentario tan peculiar, él puede mostrar su cara de indiferencia y frialdad, mientras no la escuche o la tenga tan cerca, como la vez que solo entro al cuarto a dejarle en claro que no podría escapar, levanta una ceja y dice
-es imposible enojarse contigo –
Emily sonríe embobada viendo su sonrisa
- lo siento, pero, no puedo estar tranquila, no puedo pensar y no puedo disfrutar de esto, si no se nada de mis padres – asegura Emily afligida
-¿Qué es lo que no puedes disfrutar Emily? – pregunta Eros sorprendido
-¿qué? – Emily recuerda las palabras que utilizo hace un momento y se avergüenza
-quiero decir, del campo, de esta bonita recamara, de las atenciones, de conocer nuevas personas o personas lobos, hombres lobo, quiero decir y mujeres lobo y los arboles y las comidas y … – dice Emily muy nerviosa, no quiere excluirlo, pero, tampoco, quiere mencionarlo “Emily eres tan idiota, mejor aviéntate por la ventana” se dice a si misma en su mente
¿y que más, Emily, que otra cosa estas disfrutando? – pregunta el, acercándose de nuevo a ella, le encanta verla tan nerviosa, se ve muy graciosa cuando no encuentra las palabras que lo ayuden a no delatar sus verdaderos sentimientos
- ¿me vas a castigar, por haber escapado? – pregunta ella muy nerviosa, tratando de desviar la conversación y también preocupada por lo que hará Eros
-sí – confiesa el
Emily abre mucho los ojos sorprendida, ahora si comienza a asustarse
-quita esa cara, no será nada doloroso, ni humillante, bueno, quizás no tan humillante -se burla Eros
- ¿qué me va a pasar? – pregunta ella poniéndose de pie
-más tarde te diré que va a pasar, ahora quiero que acomodes lo que te han traído – dice Eros señalando las bolsas
-primero quiero saber ¿Qué me vas a hacer? – pregunta Emily asustada, después de haber leído tanta historia de hombres lobos, espera que la mande al calabozo por una semana, comiendo solo pan y bebiendo solo agua o que le den de azotes o latigazos en la plaza o cualquier otro castigo parecido
- ¿Quién menciono que te hare algo, quieres que te haga algo? – pregunta Eros de manera sensual
-el, ..el castigo es para mí, asumo que me vas a …- Emily no sabe que decir, no es tan tonta como para darle ideas para su castigo
- ¿Qué te voy a que, Emily? – pregunta Eros tomándola por la cintura con una mano
-yo, no sé, por eso te estoy preguntando – Emily esta algo asustada, más no ve coraje o enojo en los ojos de Eros
-respira tranquila Emily, te apuesto que no será nada de lo que te imaginas – dice el, tomando la barbilla de Emily con su mano, para obligarla a mirarlo