Capítulo XXIX

Jason llega corriendo a casa de Margaret, casi ni puede respirar tiene un nudo en la garganta, en ese momento se lamenta tanto no haberla reclamado, desesperado entra a la casa buscando a su chica, puede oler la presencia de vampiros, los muebles están todos rotos y desparramados dejando en claro que se llevó a cabo una pelea en el lugar. El, sigue buscando a Madison, quien no aparece por ningún lado, al único que encuentra es a un vampiro atravesado por una lanza con punta de plata, de pronto siente ese adorable olor a algodón de azúcar, sigue ese olor y ve unas cuantas gotas de sangre en el suelo de la casa, sabe que son de Madison y están junto al olor del estúpido de Samuel, enojado y desesperado lanza todo en su camino, sale al patio, lo recorre todo y al no ver nada regresa para salir por el frente donde se topa con Margaret, que lo ve venir sin Madison

-no, no, ¡no! -grita Margaret desgarrándose su garganta por el dolor que siente al pensar lo que le pueda pasar y dejándose abrazar por Jason, que le trata de tranquilizarla, mientras ella se deja caer sintiéndose desolada

Mason puede escuchar el grito de Margaret, no le gusta escuchar su dolor, pero, el grito le acaba de confirmar que, en efecto, es la hija de Margaret y de él.

Eros puede escuchar ese grito de dolor y sabe que algo muy malo a pasado con Margaret, más el acaba de ingresar a su casa, después de escuchar por el enlace que su Luna pedía que regresará y no se ira hasta asegurarse de que Emily este bien, Eros encuentra a Ryan afuera de su cuarto cuidando la puerta, se ve bien, no se le ve ningún tipo de daño a él o a la casa

- ¿está todo bien?, Emily me pidió regresar-

-sí, no ha pasado nada, no me he movido de aquí, ¿Por qué Emily te hablaría? – dice Ryan abriendo la puerta para Eros, quien entra rápidamente, Ryan lo sigue de cerca para asegurarse de que Emily este bien

Ella se ve profundamente dormida, acto que lo sorprende, ya que ella no se dormiría en un momento como el que están pasando, de hecho, sería más probable que se escapara para ayudar, el, está seguro que la escucho llamarlo y pedir ayuda, por un momento el duda, pero, está seguro que, aunque casi no la percibió, si lo llamó

-qué bonita se ve dormida, aunque ella siempre se ve bonita - dice Ryan con ternura, Eros voltea colérico con sus ojos cambiando de dorado a rojo y de regreso a dorado,

-ya me voy, ¿me quedo en la puerta? – dice Ryan algo asustado y no espera una respuesta sale de prisa

Eros se acerca a la cama y se sienta junto a su amada, intenta despertar a Emily, ella abre los ojos poco a poco y lo ve, le sonríe y de pronto recuerda que el salió corriendo de casa, recuerda que los estaban atacando

- ¿Estas bien, ¿qué ha pasado? -

-Emily, te escuche, me llamaste por el enlace, pediste que regresara, ¿Qué paso, estas bien? –

-yo, yo… no recuerdo haberte hablado, yo … ¿me dormí? - dice Emily algo confundida, sin dar crédito a lo que paso, se siente avergonzada por dormirse en ese momento tan importante para la manada

Eros la mira desconcertado, ella no lo llamaría para una tontería y menos se dormiría después y más aun bajo un ataque, Eros se levanta rápidamente y recorre toda la habitación centímetro a centímetro olfateando todo, Emily lo mira sorprendida y algo asustada, busca con la mirada que podría estar buscando Eros. El, se detiene junto al vestidor y cierra los ojos y los puños con coraje, sabe que un vampiro estuvo ahí, Mason. Eros regresa con Emily y la abraza, sin embargo, lo que realmente hace es olerla y buscar algún olor o daño en ella, al no encontrar nada Eros suspira aliviado, pero, no tiene sentido que no le hiciera nada a Emily, ¿Por qué no la secuestro o tomo su sangre?, entonces lo entiende, solo vino por información, no quiere una guerra para que no entren a su reino, fue muy listo ya que nadie fue herido y seguro dirá que esos vampiros no eran de su Reino. Eros comprende que se confiaron mucho, pudo perder a Emily y no sabe que ha pasado con Margaret y Madison, apresurado, le da un beso a Emily

-tengo que irme, me necesitan-

-pero…- dice Emily, pero, Eros la interrumpe

-Ryan se quedará contigo, linda, no confió en que este sola- dice Eros abriendo la puerta y viendo al final del pasillo a Ryan esperando

-Ryan, cuídala dentro de la habitación, pero, no te le acerques, entendiste- grita Eros

Ryan frunce el ceño y se acerca preocupado, Eros se acerca a él, también y le susurra

-Mason estuvo en el cuarto, no le digas nada, no quiero que se asuste-

Ryan asiente y sigue a Eros, entra en la habitación, se ve muy serio, Eros sabe que esta enojado y preocupado de pensar que le pudo haber pasado a Emily, a la Luna de la manada, que él estaba cuidando

-regresare en cuanto sepa algo de lo que paso- Eros le da otro beso a Emily y mira a Ryan amenazándolo solo con la vista, Ryan asiente y Eros se va

- ¿Qué pasó? - pregunta Emily asustada

-al parecer unos vampiros han entrado al territorio, no te preocupes, yo me quedare contigo- dice Ryan muy serio

Emily asiente, no muy convencida, analiza a Ryan y pregunta

- ¿Por qué estas tan serio? –

-tengo que estar más alerta, eres la Luna de nuestra manada, la persona más importante de esta manada-

Emily esboza una sonrisa – ese debe ser Eros el es el Alpha- dice ella muy segura

-oh no, el será el Alpha, pero, sin ti solo era una bestia, sin sentimientos, la verdad preferíamos que se quedara en la cueva hasta que tu apareciste, fue entonces que volvió a ser civilizado- dice Ryan con dramatismo

Emily suelta una carcajada, que hace que Ryan sonría un poco

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Jason, puede sentir un leve olor de su Mate, viene de las profundidades del bosque, entonces, suelta a Margaret y vuelve a correr siguiendo ese débil olor. Margaret lo observa, esperanzada se pone de pie de un brinco y lo sigue, sabiendo que el no dejará que le hagan daño a Madison