Capítulo XXXIII

Hola Bellos Lectores, gracias por sus comentarios, sus votos, sus hermosas palabras de consuelo y por platicarme sus propias vivencias, les mando un cariñoso abrazo y un sincero gracias, ya que ustedes me motivan a seguir. Aquí otro capítulo, no saben lo que me costo hacerlo, espero les guste, esta hecho con mucho amor, recuerda votar y comentar, besos.

Eros avanza por el pasillo hasta llegar junto a Jason y Ryan que ríen, seguro de él, Eros le da un golpe en la cabeza a Ryan, causando que él se queje, mientras Jason sonríe viendo a su amigo volver a ser el de antes

-te encargaste de lo que te pedí- pregunta Eros a Jason

-sí, vienen en camino, espero lleguen a tiempo- dice Jason

-sí, yo también lo espero- dice Eros algo preocupado

-de verdad espero que lleguen a tiempo, si no es así, imagínate que lleguen cuando estén consumando la ceremonia de unión y pidan verlos, jajaja- dice Ryan burlándose y riendo, Jason no puede evitar reírse pensando en la escena

Eros quiere matar a Ryan con la mirada -eres tan idiota, ruega porque eso no pase o te pateare el trasero-

-Eros, no quiero interrumpir tu alegría, pero, sabes que yo debo irme, Madison, no podrá esperar mucho- dice Jason preocupado

-lo sé y no te preocupes, sabes que todos te respaldamos, quiero que hables con todos los guerreros y los rastreadores, cítalos en mi despacho, mañana a medio día partimos, solo seleccionare a un grupo de cada uno para protejan a Emily- espeta Eros

-Eros, te lo agradezco, pero, tú… - Eros lo interrumpe y le pone una mano sobre el hombro a Jason

-pero nada, tu has mantenido unida y en orden está manada, además de seguir siendo mi amigo a pesar de todo, te debo más que mi lealtad por siempre- dice Eros muy seguro

-qué bonito verlos mostrar su cariño, yo también los quiero mucho chicos- dice Ryan abrazándolos a los dos, haciendo reír a Jason y bufar a Eros, quien sin poder evitarlo sonríe

Jason y Ryan ríen un poco más y después se marchan los tres al despacho. Mientras Emily en su cuarto, duerme un rato, para estar lista en la noche.

Emily despierta al escuchar que tocan a la puerta, se sienta rápidamente tratando de despertarse, la puerta se abre y se asoma Melanie

-Luna, disculpe que la interrumpa, pero, he tocado desde hace rato y no contestaba, he venido ya dos veces, creo que estaba muy cansada, sin embargo, debemos arreglarla para la ceremonia, ya es un poco tarde- dice Melanie

- ¿Qué?, no puedo creer que dormí tanto, pasa por favor, deja me doy un baño rápido-

-claro Luna, traeré a las chicas- Melanie, sale del cuarto, mientras Emily se baña rápidamente, al salir del baño se encuentra a Melanie y a otras dos chicas que la van a ayudar a arreglarse, también ve, que sobre la mesa esta un sándwich y una limonada

-Luna, le traje un sándwich, para que tenga algo en el estómago, al tiempo que usted come, nosotros empezaremos con nuestro trabajo- dice Melanie, acercando todo lo que va a ocupar para arreglarla -ellas son Maya y Eva- dice Melanie, Emily les sonríe

-mucho gusto y gracias por ayudarme chicas- dijo Emily, las chicas sonrieron asintiendo, Maya empieza a peinar a Emily, Eva toma algunos cosméticos y comienza a maquillar a Emily, mientras Melanie saca la ropa del vestidor, los zapatos y busca los accesorios que Eros mando a traer para ese día

Han pasado algunas horas, Emily se ve frente al espejo y ama lo que ve, esta emocionada, su maquillaje es natural, sin embargo, resalta su belleza, el peinado es un semirrecogido que termina con una trenza despeinada, que tiene pequeñas y delicadas joyas simulando con su forma las ramitas de un árbol, Emily tiene puesto su pijama de botones, todavía no se cambia, no quiere ensuciar el vestido, gira viéndolo sobre la cama y sonríe feliz

-gracias, chicas, me ha encantado como me han dejado- dice ella viéndolas con amabilidad

-no es nada Luna, usted es muy bella, además fue un gusto ayudarle en este día- dijo Eva

-disfrute su día Luna y gracias por aceptarnos, bueno a todos, a la manada- dice Maya

Melanie solo sonríe está feliz por su Luna y por su manada, sin embargo, una pequeña parte de ella, esta triste ya que soñaba con estar con Eros

Emily vuelve a girar para verse al espejo de nuevo, esta tan feliz, todo es perfecto para ella, lo único que cambiaría sería el poder tener a sus padres con ella en ese momento, una lagrima rueda por su mejilla al pensar en ellos, cierra sus ojos concentrada en tratar contener sus sentimientos y no llorar, cuando siente unos brazos rodearla a abrazarla por detrás con ternura, Emily siente, huele y sabe que es Eros, por lo que sonríe y se limpia las lágrimas rápidamente, para verlo a través del espejo

- ¿Por qué esas lagrimas Lindura? - pregunta Eros

-es solo que... estoy muy feliz- dice ella no queriendo incomodarlo y mirando el cuarto vació, las chicas al parecer salieron en silencio, cuando entro Eros

-Emily- dice Eros sabiendo que no es solo eso

-te juro que estoy muy feliz, es solo que me habría gustado ver a mis padres este día, se que para ellos será un golpe saber que me casé sin su presencia y su bendición- dice ella algo triste

-lo se Lindura, de verdad que te entiendo, a mí me habría encantado que mi familia estuviera conmigo también- dice Eros sonriendo tristemente

-Eros lo siento, no quise…- intenta decir Emily, sin embargo, Eros la calla poniendo un dedo sobre sus labios mientras susurra un shhhhh- tu no has hecho nada, así son las cosas y no es nuestra culpa y no nos pondremos tristes hoy, límpiate esas lágrimas y dame una de tus bellas sonrisas que siempre alegran mis días- pide Eros, caminando hacia la puerta, para abrirla y dejar pasar a los padres de Emily, que entran con precaución y al verla corren a abrazarla, al mismo tiempo que ella lo hace

- ¡Mamá, Papá! Están aquí- dice ella sin poder contener sus lagrimas mientras los tres se abrazan