Capítulo XXXVIII

Emily da unos cuantos pasos para atrás, mirando fijamente a Eros, está nerviosa, sin embargo, desea completar la unión, ser su Luna, su mujer. Decidida toma los tirantes de su babydoll y los baja por sus hombros, haciendo que este se deslice lentamente hasta llegar al suelo, Eros se aproxima lentamente fascinado con lo que ven sus ojos, Emily le parece lo más bello que ha visto, con ternura sube su mano derecha hasta la mejilla de Emily y la acaricia, provocando que ella cierre sus ojos encantada con su cálido toque

-eres perfecta, adoro cada milímetro de ti- Eros se acerca y la besa dulcemente mientras la guía hacia su lecho, donde con paciencia y ternura, le demuestra cuanto la ama. Al llegar el momento de tomar su inocencia, Eros se contiene y con delicadeza la hace su mujer, ella, le ha respondido cada beso y cada caricia con dulzura y entusiasmo, más no ha podido evitar soltar unas cuantas lágrimas, unas son de felicidad y otras por un poco de dolor, el, al sentir sus mejillas humedecidas, la besa con ternura, borrando todo rastro de ellas. Eros se siente embelesado, la imagen de ella, entregándose sin reparos, y disfrutando de sus caricias, lo vuelve loco, ambos, están por llegar a la cumbre de su placer y el, debe marcarla, por lo que, separa un poco su rostro del de ella, para mirarla fijamente mientras continua con sus candentes movimientos, Emily esta  extasiada, lo mira con dulzura y deseo, mientras ve como los ojos de Eros cambian de un Hermoso color miel a un encendido color rojo, Emily ya no siente miedo, ahora ama ese color escarlata, y esa voz tan ronca y dominante

-mírame Emily-  exigió el  -eres mía, mi luna, mi mujer y mi todo, por siempre- dijo y sin darle tiempo a contestar, arremetió contra su boca en un beso salvaje, respirando con dificultad, con los pulsos acelerados y con el corazón rebosante de felicidad, Emily y Eros estallaron de placer, Eros rápidamente saca sus colmillos, sin que Emily lo vea, ya que mantiene sus ojos cerrados todavía disfrutando el fantástico momento, el, sin dudar los clava en su delicado y terso cuello, haciéndola estremecer y soltar un leve gemido, cuando la unión ha sido completada, Eros saca sus colmillos con delicadeza, mientras Emily se desvanece por el efecto de la marca.

Eros sonríe Feliz, no puede creer su suerte, ella es tan increíble, sin poder evitarlo la contempla con devoción, mientras la cubre con una manta y se recuesta junto a ella envolviéndola con sus brazos, para dormir feliz y tranquilo, como no lo ha hecho en años. Eros sabe que solo puede dormir unas horas, ya que tiene que ayudar a Jason, deben ir por Margaret. Pasadas esas horas Eros despierta y lo primero que ve es a su mate todavía entre sus brazos, Emily, una simple humana que lo acepto y lo quiso como es. Viéndola tan tranquila entre sus brazos Eros le hace una promesa, el promete dejar todo su pasado atrás y comenzar de nuevo, no quiere odio, ni rencor en su vida, no quiere que nada empañe su felicidad, quiere darle a Emily todo lo que ella merece y sobre todo una vida llena de amor.

 Eros sientes su calidez y absorbe el delicioso aroma que desprende su mate, quiere volver a hacerle el amor, pero, ella no despertara en mucho tiempo, por lo que se levanta y se viste rápidamente, cuando está listo, busca entre las cosas de Emily, un pijama y su ropa interior, con delicadeza la carga y la lleva hasta la bañera, donde le da un rápido baño y la viste, después, la acomoda de nuevo en su cama, la besa castamente en los labios y en la frente, antes de decir

-volveré pronto mi Luna, te lo prometo, lamento de verdad no poder quedarme contigo, pero, debo ayudar a Jason- dice Eros, apenado le deja esas mismas palabras en una nota sobre su almohada, Eros, la contempla por unos minutos más y la vuelve a besar antes de partir. Al salir Melanie, Lucia y Ryan están fuera de la carpa, esperando sus indicaciones

-hola, buenos días y gracias por ayudarme- dice Eros, intentando ser un mejor Alpha para su Luna

-¡wou, no pues si estuvo muy bueno el frutifantastico, mira que ya hasta saludas, das los buenos días y agradeces- dice Ryan asombrado y burlándose, haciendo que Melanie se cubra la boca escondiendo su sonrisa y que Lucia tosa para que no se note su risa. Eros lo fulmina con la mirada y todos se ponen serios inmediatamente, ya que no está Emily para calmarlo

-Melanie quédate junto a Emily, revísala cada tanto, por si tiene temperatura o algún malestar, y con tu vida me respondes- Melanie trago grueso y solo asintió

-Ryan tú, te quedas aquí afuera, te mandare a doce vigías más, tú los coordinas, los quiero rondando todo el tiempo, cuatro en cada turno- Dice Eros y Ryan asiente- -no te metas a la carpa, ¿entendiste? –  espeta Eros con molestia, Ryan asiente de nuevo

-Lucia, por favor, cada tanto checa que todo esté bien y suples a Melanie y a Maya, para que coman, ambas se turnaran para cuidar a nuestra Luna-

-si mi Alpha, como usted ordene-

-tengo una pregunta- dice Ryan y Eros voltea los ojos al oírlo

- ¿si escucho un ruido dentro de la carpa, puedo entrar a ver que es o si ella me llama puedo entrar? -  dice Ryan sonriendo

Eros respira hondo para no enojarse – no Ryan, no puedes entrar, para eso está Melanie, Maya y Lucrecia-

-pero, y si, quiere hablar conmigo, quizás, desahogarse, contar chisme de su noche de bodas, ya sabes como son las mujeres- replica Ryan

Eros mira furioso y se acerca a Ryan - ¿Por qué mi mujer hablaría contigo de su noche de bodas? - pregunta Eros tratando de mantener el control

-pues obvió, porque soy su mejor amigo en todo el mundo, o bueno en toda la manada- responde Ryan presumiendo

-no Ryan, no quiero que hables con ella de ese tema- dice Eros tajante

-pero, y si hiciste algo mal, si no le gusto, como te podre dar un buen consejo a ti o a ella, si no me cuentan? - pregunta Ryan realmente intrigado