Me puse pálido cuando la escuche susurrar diabetes y mirando la jeringuilla supuse que era insulina. me arrodille y vi que tenia la falda subida por una blanca pierna y la liga de la media corrida. Me sentí un bastardo. Mire en su pierna e inyecte en un lugar que estaba menos marcado que los demás. Me levante y moje mi pañuelo con agua fresca y lo pase por su frente hasta que la vi reaccionar.
_ perdóname..._ susurre, entonces abrió los ojos. ¡ Dios si era bonita!. Sus ojos profundamente azules se clavaron en los míos, una nariz naturalmente respingada sobre una boca llena y un diminuto lunar sobre el labio del lado izquierdo terminaron de perderme. Se acomodo la falda y la media mientras yo no podía dejar de ver su piel de porcelana sin maquillaje. Parecía una jodida muñeca.
_ esta bien , no se preocupe señor Blake_ dijo con una voz suave y algo ronca pero tremendamente dulce.
_ soy un idiota podrías haber caído en coma..._ me sonrió de nuevo y trato de ponerse de pie mareándose un poco, la tome de la cintura sintiendo la suave curva de sus caderas y mientras nos mirábamos a los ojos la solté despacio aunque quería seguir sosteniéndola.
_ estoy bien en serio..._
_no tienes que trabajare si te sientes mal...._
_ Jane _ dijo mirándome a los ojos _ Jane Roses y no se preocupe en serio me siento bien_
_ Jane no tienes que trabajar, te pagare la noche igual_ fue lo único que atine a decir
_ no se preocupe señor Blake de verdad estoy recuperada_ su voz dulce coincidida con su sonrisa_ voy a volver a trabajar, un gusto conocerlo señor Blake_
Asentí con la cabeza porque fue lo único que se me ocurrió a hacer. La acompañe a la cocina y la deje con Olivia que me miro extrañada, nunca de las veces que trabajaron para mi me aparecí por la cocina mucho menos para acompañar a una empleada.
Volví a la mesa con mis invitados, ignorando el molesto interrogatorio de Mercedes sobre donde había estado. No la había invitado a la cena pero apareció igual y no pude echarla sin hacer un escandalo. La gente siguió hablando de cosas que no me interesaban y el parloteo de Mercedes sobre su nuevo capricho me estaba volviendo loco. Solo podía pensar en Jane y en la manera de volver a verla . En ese momento ella entro con el carro comedor y comenzó a indicarle a sus compañeros donde iba cada plato. Cuando le sirvió a Mercedes la ensalada cesar con aderezo ella puso mala cara y chillo literalmente
_¡ esto no es lo que pedi!_
Jane suspiro y dijo
_ señora recuerdo exactamente que pidió cada invitado al detalle, el señor y la señora Prat pidieron una entrada de vieiras, el señor Bárdalos y su acompañante la ensalada verde, la señora Koblet y su hijo son judíos por eso pidieron knishes de papa, los señores Rivert ensalada de col ,el señor Blake no quiso entrada y usted pidió la ensalada cesar son aderezo_
_ es imposible tiene demasiadas calorías_
Tire mi servilleta con impaciencia esto se estaba volviendo ridículo pero Jane de nuevo me sorprendió
_ solo tiene 60 calorías y las gastaría yendo y viniendo a los servicios señora_
Mercedes iba a decir algo mas entonces Robert Prat nos sorprendió a todos hablando
_¿ como es que una bella joven con memoria fotográfica esta trabajando de camarera?_ me sorprendió porque estuvo callado y casi molesto toda la cena, lo había invitado porque quería convencerlo de que cambiara sus antiguos software por los nuevos de mi empresa y no había logrado hablar con el
_ en realidad estoy terminando mis estudios como asistente personal y secretaria ejecutiva_ respondió con una sonrisa amable
_ una chica como tu podría estudiar la carrera que quisiera niña_ dijo amablemente
_ tengo mis razones señor Prat _ dijo ella amablemente
_ Blake creo seriamente que esta chica podría ser la asistente ideal para ti, nunca olvidaría ningún detalle y además es una dulzura , se parece a mi desaparecida nieta_ dijo con la voz emocionada. Su mujer miro a Jane con los ojos húmedos y ella les sonrió y les sirvió un poco de agua .
_ si Jane esta de acuerdo me gustaría hablar con ella luego de la cena_ dije mirándola a los ojos.
_ será un placer señor..._ dijo y al escuchar la palabra señor de su boca pude sentir en mi pantalón tirar una erección furiosa.