Salvate de Mi

capitulo 9

Andrés de la vega

Por la mañana la resaca no me dejaba colocarme de pie todo me daba vueltas, mi boca y la garganta estaban completamente secas ¿Cómo fue que me quede  con el torso desnudo?  Pequeños flashes aparecen en mi mente

¡La limosnera me manoseo! Claro desea un hijo. Mi cabeza se sentía pesada.

Ahora mismo la devolveré a México, que se largue a chantajear a otro. No le importa nada con tal de sacar dinero pero conmigo  está equivocada.

Me duele la cabeza. No dejaba de sentir como fluía el coñac en mis venas. Debí haber follado con la auditora y bebido menos.- frente al espejo una ráfaga de luz me hace   revivir la escena de anoche.

 Por Dios que asco  vomite. LA VOMITE, vomite todo. Santa cachucha  eres un estúpido Andresito.- me incorporo para darme un baño y quitarme el fatídico olor , no me manoseaba, ella, me limpiaba

Eres el estúpido de siempre Andrés

Baje  por el elevador de cristal que tenía una vista descomunal, se podía apreciar cualquier área del hotel, era un estilo novedoso hecho por mi amigo Dante

Estaba descendiendo cuando la figura de Roberto robó mi atención, caminaba con maleta en mano dirigiéndose justo a la mesa donde desayunaba Alejandra.

¡Caray! Como demonios sucede estas escenas en mi hotel y con mi esposa. Es un cínico.- golpeo el vidrio. Él infeliz va tan sonriente y amigable, por mi parte deseaba traspasar el vidrio para llegar de inmediato hasta ellos

Mi respiración estaba agitada me encontraba  atrapado en la caja de cristal.- tome aire con dificultad - ¿Cómo es que ella lograba  hacerme  sentir esa sensación de enojo? La aborrezco tanto que no soporto verla feliz, sentía un cejo de inseguridad y desesperación. ¿Porque demonios no soy el de siempre?

Pareciera que el maldito  elevador  se aliaba con ellos uniéndose al complot de ese par de granujas

Por fin las puertas se abrieron lentamente - guarde mis manos en los bolsillos del pantalón, mordí mi labio inferior y gire la cabeza desesperado. Me hervía la sangre de verla ¿cómo era capaz de sonreírle amablemente a ese granuja?

 Por más que me apresure parecía me movía en cámara lenta. Solo  alcance a escuchar lo último de su charla

- Desearía hacerte compañía pero debo regresar a México, mi itinerario ha terminado. Me despido deseando pronto volver a verte- ofreciéndole la mano para despedirse.

-Fue un gusto coincidir Roberto y haber tenido tu compañía

 

Que cojones de sinvergüenza, llegue con la respiración agitada, pose mis ojos sobre la espalda de mi acérrimo enemigo

 

-¡Vaya, vaya! De modo que continuas queriendo lo que es mío.- Roberto giro lentamente su cuerpo mostrándome sus estúpidos dientes que estaban a punto de caer al suelo.

 

Estiro su mano derecha para saludarme. Le gustaba jugar a ser el tipo perfecto pero no estaba interesado en seguirle el juego

-No necesitas seguir etiquetas conmigo, solo eres un pobre payaso fingiendo ser un caballero. Te lo advierto deja de hablar con mi ESPOSA o quieres que te rompa la cara de muñeco que tienes.

Levanto  la ceja  sacando una sonrisa retadora  dirigió  su vista  Alejandra.- Con permiso Alejandra, el aire  está viciado.- mientras guiñaba el ojo

-Buen viaje Roberto.- respondió la vendida  un tanto nerviosa por aquella situación

-Basta.- murmure en voz baja, estaba decidido mandarlo al hospital. Pero la mano de Alejandra toco la mía intentando detenerme sus hermosos ojos azules me desarmaron

Infle mis cachetes tumbándome en la silla, Alejandra hizo lo mismo. ¿Cómo una mujer puede ser tan sinvergüenza delante de su esposo? ¡Gracias a mi ella Come, viste y respira, todo a mi dinero!

Agarro el borde de metal de la silla, de un solo movimiento la traigo a mi cuerpo y quedar frente a ella. -Deja de actuar como presidente en tiempo de elección. Ese hombre es escoria entiendes. Que sea la última vez que hablas con él…..tengo hambre que pediste de desayunar- cambie el  tema Roberto no desestabilizaría mi día

Podía respirar el miedo que le causaba Alejandra, pero esa niña tiene unas agallas y esa rebeldía la hacían   hablar sin doblegarse.

-Maestría, buena ropa, dinero en diversas cuentas, pero continuas siendo una persona sin educación ni modales.-

 

La  ignore por completo y hojeé el menú.- ¿Has visto el mar y los alrededores? termino la auditoria. De manera que estoy libre

 

El silencio era una respuesta  no aceptada por lo que  deje caer mi  puño contra el centro de la mesa.

Los comensales de las mesas continuas  se alertaron con temor

-Te hice una pregunta acaso eres sorda- grite con fuerza

-Sí, he recorrido la ciudad pero no me interesa entablar conversación contigo.- desvió su mirada pero logre darme cuenta del cristalino de sus ojos



#9264 en Novela romántica

En el texto hay: amor, un secreto, chicomalo

Editado: 01.05.2024

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