Odio mi vida, o bueno mejor dicho la odiaba, quiero contarles una historia que sin duda alguna nadie creería al oírla, es alucinante, comencemos por el día en que decidí dar el paso final.
Eran las 10 de la mañana, era horrible tener que levantarme todos los días en la misma aburrida habitación, ver siempre los mismos cuadros y que cada centímetro de ella te recuerde que nunca podrás ser feliz, mi padre es el típico hombre de negocios que no permanece en casa por viajes al extranjero, ¿un secreto sobre el?, engaña a mamá con una mujer mucho más joven, su secretaria, es repugnante, obviamente mi madre lo sabe, pero ella que puede decir si es una prostituta mal pagada. Hace un mes termine mi carrera universitaria, pero no logro encontrar una solución para mi fatídica vida, es verano, la época que se supone debe ser la más alegre, pero no, todos mis compañeros están de viaje, menos yo.
- ¡Alessandra, Alessandra!- era mi hermanita de 5 años que entro a mi habitación como un rayo, tenía lágrimas en los ojos - Mamá se cayó, no despierta- Baje rápidamente las escaleras con ella en mis brazos y la vi en la cocina, no fue una caída, alguien le había disparado en la cabeza, había un hueco enorme en el cristal, sin duda alguna esto había sido planeado con mucha antelación.
Llame a la ambulancia, sabía que ya no lograrían hacer nada, la verdad no me dolió su muerte, sabía que a causa de esto entraría menos dinero a casa algo que nos perjudicaría pero que más daba, mi hermanita no paraba de llorar y sinceramente me tenía algo estresada, ¿no podía callarse unos minutos?, mi padre nunca llego, la enterramos lo más pronto posible dado al costo que llevaba tenerla en una morgue, nunca se encontró un sospechoso
Pasaban los días, el silencio reinaba, solo se oía el crujir de la cama cuando mi Gabriela tenía una pesadilla, no podía más con esto, si seguía así mi ansiedad iba a aumentar y no quería cometer ningún mal acto luego del pasado acontecimiento, me levante y cogí mi laptop, busque vuelos económicos, tenía algunos ahorros y quizá con esto podría darme el lujo de unas vacaciones junto con la pequeña que yacía bajo mis cobijas, Noruega fue la única opción, estaba en un precio alcanzable y se veía muy lindo para esta época, lo compre y empecé a alistar lo poco que tenía, cogí a mi hermana en brazos y Salí camino al aeropuerto, lo sé, estaba loca al hacer esto, eran las 2 A.M pero, ¿tú qué harías si toda tu vida te la pasaras estudiando, tus ratos libres oyendo las discusiones de tus padres y casi ni poder salir porque no tienes el dinero para costear un poco de cerveza o algo en un club?, solo será una semana, mi padre no se dará ni cuenta de que no estamos,
Gabriela no despertó en ningún momento lo que hizo el vuelo más placentero, aunque había muchos ancianos olorosos que me hacían dar nauseas luego de 10 horas de vuelo por fin llegamos, era un sitio hermoso, incluso desde el aire se lograban apreciar lagunas y ríos de gran densidad, no conozco nada de este lugar pero sin duda alguna, este será el mejor verano de mi vida.
Sin duda alguna había hablado muy rápido, nos perdimos rumbo al hotel, dado que no el conductor no hablaba inglés y mucho menos español, indicarle a donde debíamos ir fue horrible y lo peor de todo es que nos cobró una exagerada suma de dinero, para este punto Gaby ya había despertado y me miraba con ojos de curiosidad como pensando que en sus sueños se tele transporto a otro mundo, lo sé, lo veía en su mirada, continuando con lo que decía, al llegar por fin a nuestro lugar de descanso las habitaciones buenas se habían terminado y nos tocó en una mucho más económica para mi suerte, pero que tenía problemas de humedad, además que habían cucarachas por todo lado ¡ERA TOTALMENTE ASQUEROSO!, no entiendo como mi hermanita se reía viéndome desesperadamente tratar de matar a un sucio animal de esos, caí exhausta pero logre matar ¡UNA! Y me sentía alegre por eso, era un comienzo, comimos una deliciosa cena luego de un largo día de estar encerradas tratando de limpiar un poco, podría ser un hotel pero no nos quedaríamos en un sitio tan nauseabundo, tenía todo listo para el otro día, dejaría a Gaby en una actividad para niños en la cual cuidarían de ellos todo el día, con suerte podría aprender a nadar mientras tanto yo me iría a hacer senderismo a un sitio llamado Preikestolen que se dice que es un acantilado, allá voy aventura.
Recuerdo que en ese momento mi trasero toco el duro suelo, y se preguntaran la razón, sencillo, un chico paso a toda velocidad y ¡me tiro!, ni siquiera se detuvo a ver si me había pasado algo además de ponerme más plano lo poco que tenía, mi hermanita no aguanto la risa y se tiro al suelo junto a mí, creo que hacía mucho tiempo no la había visto sonreír tanto como hoy, primer objetivo cumplido, que Gaby sea feliz.