El amanecer trajo consigo una nueva energía, y Luna y Adriel se sintieron renovados mientras se preparaban para continuar su entrenamiento con los Illumina. La luz del sol brillaba sobre el claro, iluminando el lugar donde tantas revelaciones y aprendizajes habían tenido lugar.
Selene se reunió con ellos, su mirada seria. —Hoy se enfrentarán a una prueba importante. No solo pondremos a prueba sus habilidades en el combate, sino también su capacidad para trabajar juntos bajo presión.
Adriel frunció el ceño. —¿Qué tipo de prueba?
—Las sombras han comenzado a moverse de manera más agresiva en las cercanías. Hemos detectado una presencia oscura que busca perturbar el equilibrio de la luz. Necesitamos que ustedes dos nos ayuden a enfrentarlo.
Luna sintió que su corazón latía con fuerza. —¿Qué tipo de presencia?
Selene tomó un profundo respiro, la preocupación visible en su rostro. —Es un antiguo enemigo de los Illumina, un ser que se alimenta de la oscuridad y que busca debilitar nuestras fuerzas. Su nombre es Nyx, y su llegada significa que la batalla final está cerca.
—¿Cómo lo enfrentaremos? —preguntó Adriel, sintiendo la gravedad de la situación.
—Primero, debemos prepararnos. Necesitan recordar lo que han aprendido hasta ahora y estar listos para unir sus fuerzas. La batalla será intensa, y necesitarán estar en sintonía para poder derrotar a Nyx.
Luna asintió, sintiendo que la responsabilidad recaía sobre ellos. Era un desafío que nunca habían anticipado, pero sabían que no podían retroceder.
Mientras se preparaban, Selene los guió en una serie de ejercicios, recordándoles cómo canalizar su luz y usar la oscuridad a su favor. Luna y Adriel se sintieron más conectados que nunca, su unión fortalecida por cada momento que pasaban juntos.
—Estamos listos —declaró Adriel, su mirada decidida.
Selene llevó a Luna y Adriel a una zona más profunda del bosque, donde la luz del sol apenas penetraba entre las ramas. La atmósfera se volvió tensa, y un escalofrío recorrió el aire.
—Aquí es donde hemos sentido la presencia de Nyx —dijo Selene, sus ojos observando con atención. —Estén alerta y prepárense.
Luna sintió cómo la energía del lugar se intensificaba. En el fondo, sabía que enfrentar a Nyx no solo sería una batalla física, sino también una confrontación emocional.
Mientras avanzaban, una sombra oscura emergió del suelo, tomando forma. Era un ser imponente, con ojos brillantes como estrellas y una risa profunda y resonante.
—Bienvenidos, pequeños iluminados —dijo Nyx, su voz un eco en la oscuridad. —He estado esperando por ustedes.
Luna sintió un escalofrío recorrer su espalda. —¿Qué quieres?
—Quiero ver hasta dónde están dispuestos a llegar por su luz —respondió Nyx, su sonrisa cruel iluminándose en su rostro. —¿Están listos para enfrentarse a sus miedos más profundos?
Adriel apretó la mano de Luna, su energía resonando con la suya. —No tenemos miedo de ti.
—¡Cómo me divierte escuchar esas palabras! —Nyx se rió, y su risa resonó en el bosque. —Entonces, dejemos que comience el juego.
Con un movimiento de su mano, Nyx invocó sombras que comenzaron a girar a su alrededor. Eran figuras distorsionadas, sus rostros eran un reflejo de los temores de Luna y Adriel.
Luna cerró los ojos un momento, recordando lo que habían aprendido. —¡Juntos! —gritó, proyectando su luz hacia adelante.
La luz dorada se expandió, y las sombras retrocedieron un momento. Pero Nyx no se detuvo. Alzó sus manos, y la oscuridad se intensificó, envolviendo el claro en un manto de negrura.
—¿Es esto lo mejor que pueden hacer? —preguntó Nyx, su voz burlona. —La oscuridad siempre prevalecerá.
Adriel miró a Luna, sus ojos llenos de determinación. —No podemos rendirnos. ¡Debemos luchar!
Luna asintió, y juntos comenzaron a proyectar su luz, fusionando sus energías en un resplandor brillante que iluminó el claro. La luz luchó contra la oscuridad, pero Nyx continuó empujando con su poder oscuro.
—¿No ven? —dijo Nyx, acercándose a ellos. —La luz es débil. Solo alimenta mi poder.
Con cada palabra, Luna sentía que sus temores volvían a surgir. La sombra de su exnovio apareció de nuevo, sus palabras resonando en su mente: "Nunca serás suficiente". Pero en lugar de dejar que esas palabras la dominaran, Luna se enfocó en la luz que llevaba dentro.
—¡No! —gritó. —No dejaré que mis miedos me controlen. ¡Somos más fuertes juntos!
El resplandor de su luz se intensificó, deslumbrando a Nyx. La sombra retrocedió, y las figuras distorsionadas comenzaron a desvanecerse.
Adriel tomó la delantera, enfrentando a Nyx con una feroz determinación. —La luz siempre encontrará una manera de brillar, incluso en la oscuridad más profunda.
Nyx, visiblemente irritado, alzó su mano y lanzó una ráfaga de sombras hacia ellos. Pero Luna y Adriel estaban preparados. Unieron sus manos y proyectaron su luz en un haz unificado que chocó contra las sombras, creando una explosión de energía.
El claro se iluminó con una brillantez que había sido desconocida para el lugar. Las sombras comenzaron a disiparse, y Nyx retrocedió, sorprendido por la fuerza de su luz.
—Esto no ha terminado —gritó Nyx, su voz llena de furia mientras se desvanecía en la penumbra. —Regresaré.
Cuando la oscuridad se disipó, el claro volvió a la calma. Selene y los guerreros se acercaron, admirados por la valentía de Luna y Adriel.
—Han hecho un trabajo extraordinario —dijo Selene, con una mezcla de asombro y orgullo en su voz. —Lo que han enfrentado no es solo una prueba de su poder, sino también de su conexión y confianza el uno en el otro.
Luna y Adriel se miraron, sintiendo la adrenalina fluir a través de ellos. —Fue intenso —admitió Adriel, aún recuperándose de la batalla.
—Pero lo hicimos juntos —dijo Luna, sintiendo que su conexión se había fortalecido aún más.
—Esto fue solo un primer encuentro con Nyx —advirtió Selene. —Deberemos estar preparados para lo que vendrá.