Mi amistad con Maddy empezaba a ser buena, aunque el ochenta por ciento del tiempo debíamos esforzarnos para comprendernos una a la otra.
Durante esos días, comencé a sentir molestias, dolores y solo rogaba que el nacimiento de Alice no fuese prematuro. Pero fue en vano. La mañana del 5 de diciembre, hablé con Maddy para decirle que mi estado era crítico.
En el almuerzo no había probado bocado lo que a Facundo le pareció extraño:
-Amor, ¿Te sientes bien? -Me preguntó pacientemente.
-¿Tu qué crees? Creo que he roto fuente en la mañana mientras hablaba con Maddy y las contracciones no han cesado desde entonces. -Le dije sonriente.
-Calma. Respira que yo prepararé las cosas.
-Yo estoy calmada Facu... Tú eres el alterado.
-¿Quieres que traiga a Trini? ¿O que llame a alguien de la familia?
-No. Solo quiero que vayamos a la clínica y te calmes. Tu nervios me alterarán a mí.
Llegamos a la clínica conduciendo por la autopista rápida, y las contracciones continuaban:
-Deja que pida el ascensor. -Dijo Facundo impaciente.
-Amor, estoy por tener un bebé, no estoy quebrada. Deja que baje las escaleras. - Dije riéndome y respirando profundo.
Por momentos era capaz de soportar el dolor y de pronto ya no podía hacerlo. Facundo estaba más despistado que de costumbre y más asustado que yo, -lo que me resultaba muy cómico,- tal como era de esperarse; y ver sus reacciones me hacían olvidar el dolor y controlar más la respiración.
A las 19:15 nació nuestra pequeña Alice, con un peso de 3,650kg; era una bebé sana a pesar de haber nacido antes de tiempo, sus padrinos iban a ser mis cuñados a quienes les envié la primera fotografía. Nuestra hija era un angelito, traía calma a mi vida revuelta, principalmente por no tener el consejo de alguien con experiencia. Este era un mundo que no había experimentado con Aixa.
Facundo llamó a Trini para turnarse en la clínica y en la mañana mi amiga llegó con un gran oso para Alice
-Están tus suegros afuera con Facu y cargando a Alice.
-Déjalos. Son sus abuelos... Que no me quieran no tiene que intervenir en la relación con su hijo y su nieta.
-Por cierto, es hermosa la gorda. Tiene tu nariz.
-Trini, tiene menos de un día de nacida y ya pareces una tía chismosa. No sé a quién se parece. Solo sé que Facu está feliz.
El día que volvimos a casa, Tim pasó a visitar a su ahijada, se lo notaba cansado y desganado, era evidente que extrañaba a Maddy.
Tuvimos unos días de clases intensivas de cómo cuidar a una bebe tan pequeña y un cambio drástico en nuestro estilo de vida. Facundo se levantaba a mitad de la madrugada mientras yo alimentaba a Alice hasta quedar dormidas.
Eran las cinco cuando deje a Alice en su cuna y fui a la cocina, no esperaba encontrar tan terrible escena aquella madrugada; Facundo estaba tirado en el suelo cubierto de sangre:
-Amor... Facu. - Trataba de despertarlo.
Busqué la herida sin éxito, a su lado había una botella de leche rota. Llamé a emergencias; no sabía cuánto tiempo estuvo inconsciente pero había mucha sangre. No pude acompañarlo a la clínica y sin saber cómo actuar en medio de mi desesperación le escribí a Maddy:
WhatsApp enviado: "Algo le sucedió a Facundo"
A las pocas horas recibí la llamada de Maddy.
-¿Qué sucedió con facundo?
-No lo sé Maddy, me levanté a dejar a Alice y lo encontré inconsciente en la cocina en un charco de sangre. No se mas que eso. Llamé a emergencias y se lo llevaron pero no pude acompañarlo, Trini no estaba para cuidar a Alice.
-¿Dónde está él ahora?
-En la clínica, yo dejaré a Alice y voy para allá. Dile a Tim que los mantendré informados.
Pasé toda la tarde sin señal al lado de Facundo, tenía un corte profundo en el brazo pero salvo por la pérdida de sangre estaba fuera de peligro; solo quedaría internado unos días para estar seguros de que estuviera completamente bien.
-¿Cómo estás? Me diste un gran susto. -Dije mientras acomodaba sus almohadas.
-Amor, perdón. No quise asustarte. Estoy bien si estas a mi lado. ¿Alice?
-Está con Trini y la niñera en casa. Me preocupaba perderte... aunque las cosas no estén del todo bien....
A media noche regrese a casa con mi móvil muerto y agotada; así que no llamé a Maddy con las novedades hasta el día siguiente. Llamé en la mañana para darle tranquilidad a Tim y también a ella.
El regreso de Facundo de la clínica fue cargado de felicidad y de cuidado. Ya no solo debía ocuparme de Alice sino también de las vendas de facundo y de que los puntos no salieran de su lugar o se infectaran.
Pasé la Navidad con Trini y sin Alice. Facu la llevó a casa de sus padres luego de una discusión relacionada con mis celos por la existencia de Estefanía; pero el Año Nuevo fue más tranquilo, solo los tres y en familia.
-Brindo... -Dijo levantando la copa a media noche del comienzo de un nuevo año