Capítulo 4

Enero 

El mayor significado de celebrar el Año Nuevo es con la vida misma, implica un nuevo ciclo y el comienzo de nuevas cosas, oportunidades tanto personales como profesionales y cumplir con las expectativas que tenemos para los meses próximos.

—Diez… — gritaban todos al unísono.

Como cada año, Lorena celebraba junto con su nana, Nicholas y la familia de este.

—Nueve… Ocho… Siete… Seis… — vociferaban con sonrisas dibujadas en sus rostros todos en aquel gran salón, mientras visualizaban el reloj, donde cada Año Nuevo acogían a Lorena como un miembro más de la familia Wright.

—Cinco… — susurraba Lorena uniéndose al conteo, mientras mantenía su vista en Nicholas, el cual se encontraba abrazado a sus padres y su hermana.

Un dato curioso… a Isabella Wright no le caía del todo bien Lorena… convivían e Isabella la toleraba, pero no era de su total agrado, la razón es que ella conocía de los sentimientos que Lorena tenía hacia Nicholas y no le agradaba, pues Isabella quería a su hermano con alguien más, con aquella persona de la que estaba enamorado.

—Tres… Dos… Uno…

—¡FELIZ AÑO NUEVO! — gritaron todos los integrantes de la familia Wright.

Nicholas abrazo a su familia y buscó con la mirada a sus dos invitadas, la señora Sophie y su amiga Lorena, a las cuales encontró en el exterior, habían salido en los últimos segundos…

—Feliz Año Nuevo. — dijeron ambas mujeres alzando sus copas hacia el cielo estrellado para posteriormente fundirse en un abrazo.

Luego de unos segundos se separaron, y al voltear se encontraron con Nicholas que las veía desde la puerta, el hombre les sonrío, nana Sophie besó la mejilla de Lorena y los dejó solos.

Nicholas se acercó a Lorena y con sus pulgares limpió las lágrimas traicioneras que escaparon de los bellos ojos de Lorena, le obsequió una bella sonrisa y la abrazó.

—Feliz Año Nuevo, cerecita. — susurró en su oído enviando un agradable calor a todo su cuerpo, se separó y dejó un tierno beso en su frente que hizo suspirar a Lorena. — Te amo mucho. — el corazón de Lorena se aceleró como loco.

—Feliz Año Nuevo, Nick. — lo vio a los ojos con amor. — Yo también te amo.

Aquellos “Te amo” eran sinceros, los más sinceros que se pudieran oír, pero no eran dichos con el mismo significado.

Se quedaron abrazados por un tiempo hasta que fue momento de regresar con los demás, entraron y disfrutaron de lo que quedaba de la velada.

Luego de unas horas, Lorena y su nana se retiraron, se despidieron de todos los presentes que restaban, agradeciendo la hospitalidad como cada año.

Nicholas las acompañó, antes de ingresar al automóvil, Lorena le dio un último abrazo y luego de eso encendió su auto y emprendió el camino de regreso a su pent-house en compañía de su nana.

Al llegar al edificio, su nana decidió preguntar sobre la mirada triste de Lorena.

—¿Qué tienes mi niña?

Lorena parpadeó y volteó a verla, dándole una sonrisa fingida.

—Nada nana, solo pensaba en algo.

—¿Segura?

—Si, no te preocupes, todo está bien. — beso la frente de la mujer. — Descansa nana, te amo. — y se encamino a su habitación.

¿En qué pensaba Lorena? Bueno, para su desgracia ella sabía que Nicholas vivía enamorado de la mejor amiga de su hermana, y como cada año él se iría a la fiesta que aquella mujer organizaba.

Ellos tenían una relación de amigos con derechos, pero Nicholas siempre ha deseado ser algo más de Olivia Lawrence, quien curiosamente es su competencia en el mundo empresarial en el que se ha desarrollado y a su vez la razón por la que Nicholas no la ve de otra forma, ah y sin olvidar que por eso Isabella la detestaba pues la veía como un pequeño obstáculo a que Olivia y Nicholas estén juntos.

Raro que la viera como obstáculo, siendo que Lorena nunca se ha interpuesto entre ellos.

§

Nicholas observó el coche alejarse y una vez que desapareció por completo de su campo de visión, ingreso nuevamente a la mansión.

—Aún es temprano… — suspiró Isabella viendo de reojo a su hermano una vez que sus padres se despidieron de ellos para irse a descansar. — ¿Vamos a la fiesta de Olivia? — preguntó su hermana viéndolo con una sonrisa pícara.

—Mmm… — se puso indeciso.

—Oh vamos Nick, se nota que tiene unas ganas inmensas de verla. — lo empujó suavemente del hombro.

—No lo niego, pero Lore…

—Ay no… — lo interrumpió su hermana algo molesta. — … Nick, tu y Lorena no son pareja, no tiene por qué molestarse, además… ¿no habías dicho que ella ya sabía que estas enamorado de Olivia?

—Si, ya lo sé, pero es mi mejor amiga y sabes que ellas dos…

Lo que sucedía es que Nicholas se ponía indeciso pues por un lado estaba Olivia, el amor de su vida y por otro Lorena su mejor amiga, siempre ha deseado iniciar una relación con Olivia, pero al ser enemigas empresariales, no quería quedar mal con Lorena, él sabía que Lorena no se interpondría, que, si él decidía iniciar una relación con aquella mujer, su amiga lo apoyaría, pero aun así aún se mantenía indeciso de dar el paso.