Capítulo 7.

Devan

—Mason, no creí volver a verte —le dije con una sonrisa torcida mientras me percataba de la mirada curiosa que me daba Winter—Te presento a Winter, la talentosa mujer que está trabajando conmigo en un nuevo proyecto y a Quinn, su hermana.

—Un gusto, señoritas.

—Chicas, por favor, espérenme un momento en el auto. No tardaré demasiado —indiqué y ellas luego de asentir, desaparecieron de mi vista.

—Devan Reed, me he dado cuenta de que sigues siendo el mismo hombre que conocí en aquellas épocas —susurró sin dejar de mirarme de pies a cabeza. Odiaba que las personas lo hicieran, en verdad.

—Bueno, Mason, te pido de favor que no hables si no tienes idea de la persona en la que me he convertido luego de perder a Olivia —contraataqué.

—Olivia…—se calló por varios segundos, perdido en sus pensamientos—Hace ya tanto que no he escuchado su nombre.

—¿Y eso? ¿No se supone que eras su mejor amigo? —Enarqué una ceja, sorprendido gracias a su reciente confesión.

—Después de que rompiste con Olivia, ella se fue y nunca más volvió a tener ningún tipo de contacto conmigo. Digamos, que, por lo mismo, dejamos de ser mejores amigos —Mason explicó—Muchos dijeron que se encontraba bastante dolida por la decisión que tomaste por ambos y que, por ello, optó por abandonar todo lo que tenía. Eso es lo que causaste en Olivia. Eso es lo que tú le hiciste —soltó y la furia invadió todo mi cuerpo por completo—Y he dicho que no dejas de ser el mismo hombre que conocí debido a que veo que sigues haciendo las mismas cosas…Le coqueteas a las mujeres bonitas con las que trabajas y luego les arruinas la vida. Devan Reed eres como una maldita plaga que amenaza con nunca llegar a su fin.

Hijo de puta, eso es lo que era este imbécil.

—Por cierto, si ya lo has olvidado…Permíteme recordarte que la relación que tuvimos los dos fue porque estuvimos de acuerdo con eso, y si alguien fue el que salió perjudicado por dicha unión, fui yo. Olivia no era la persona que yo creía al principio y fue por eso que perdí todas las esperanzas de continuar a su lado porque era alguien que me hacía mucho daño y que no me ayudaba a salir adelante. Yo tenía el derecho de elegir a la persona con la que me sintiera a gusto y por más que ella me gustase enormemente, eso no significaba que debía permanecer amarrado a ella por toda la eternidad.

—Le arruinaste la vida, Devan, mételo en la cabeza de una vez. En cuanto ella se involucró contigo de forma romántica, tiro toda la vida que se ganó a base de esfuerzo y cientos de horas sin dormir por la borda.

—Disculpa, Mason, pero, me parece que es algo que no debería importarte en lo absoluto. Olivia siempre estuvo de acuerdo en dejar el trabajo en mi empresa, y, es más, fue ella la que más miedo tenía al tan solo imaginar que nos descubrieran. Y cuando ella se encontraba sin trabajo, vivió a mi lado y yo mismo me encargué de apoyarla en todo lo que ella necesitó. El día en que nosotros le dimos fin a nuestra relación, ella no me respondió nada. De hecho, se limitó a recoger todas sus cosas de mi apartamento y nunca más volví a saber algo sobre ella.

—Jamás se comunicó con ninguna de las personas que formaban parte de su vida después de la ruptura. Ni siquiera conmigo, que compartió tan buenos e importantes momentos —suspiró molesto.

—¿Si es así cuál es el motivo qué defiendes para venir a atacarme ahora qué ha pasado tanto tiempo desde lo sucedido? —Subí el tono de mi voz, si yo no buscaba una manera de dejar ahí esta conversación lo más pronto posible, algo malo iba a pasar en los próximos cinco minutos.

—Siempre te guardé resentimiento porque fuiste la persona que le cambió la vida a Olivia.

—Amé a Olivia y quizá todavía sigo amándola. No obstante, sigo manteniéndome firme respecto a que ella no era la mejor persona y que tampoco fue la mejor amante de este mundo, por lo que no puedes tomarte la atribución de criticar mis acciones. Ella era manipuladora y deseaba que me convirtiera en la persona que ella quería ver y eso nunca va a ser lo mejor dentro de una relación.

—Lo lamento…Yo, yo no sabía nada de eso…Nada más conocía un lado de mi amiga, su lado bueno e inocente en realidad.

—Cierto, es que no todas las personas son las mejores…

—Entonces, te pido que no vuelvas a hablar sobre mí y sobre todo del asunto de Olivia, debido a que me ha costado muchísimo olvidarla y seguir con mi vida y ahora, creo que por fin lo estoy logrando. Quiero…Tener una bonita relación con una persona que sea todo lo contrario a lo que fue mi antigua pareja y si piensas que sigo teniendo los mismos malos hábitos que en un pasado, estás completamente equivocado. Y deberías concentrarte más en tu propia vida y no en la de una persona que juró ser tu amiga y que ni siquiera se ha tomado la molestia de avisarte en dónde demonios está y mucho menos otra cosa. Suerte en todo, Mason, adiós —le di un golpecito en forma de despedida y me alejé de él, sin embargo, me detuve recordando uno de los peores momentos:

—Devan, mi amor, me pregunto cuándo vas a dejar de llevarte con ese estúpido de Ethan. Odio que cuestione cada una de las cosas que digo en las fiestas que Camile organiza —gritó enfurecida apenas ingresé al departamento. Ella se encontraba usando la laptop que había comprado con el dinero que le presté recientemente.