Devan
El lunes llegué alrededor de las ocho de la mañana a mi oficina. Sin embargo, me sorprendió mucho encontrarme con mis dos hermanas, Taylor y Laurie, cargando un par de canastas.
—Chicas, ¿qué están haciendo aquí? —Me sorprendí al verlas a ambas después de tanto tiempo.
—¡Feliz semana de cumpleaños! —Gritaron al unísono y bufé al saber de lo que se trataba. Ellas siempre optaban por celebrar toda una semana mi cumpleaños porque a mi familia le gustaban esas ridiculeces. Aplaudí con aburrimiento.
—Gracias, pero, no tenían qué molestarse viniendo hasta acá a saludarme —las abracé—Laurie qué bonita te ves, has crecido un poco más en estos últimos meses.
—Ella ya es una mujer adulta —la molestó causándome una gran sonrisa—Y ese corte de cabello y el maquillaje la hace lucir muy bien ¿Cierto, Devan?
—Sí, tienen razón. Me pregunto si van a quedarse aquí —pregunté al notar que, en los próximos momentos, Winter estaba a punto de aparecer y que iba a ser algo incómodo porque tendría que presentarle a mi familia y no sabía si ella estaba de acuerdo con eso.
—Por supuesto que nos vamos a quedar y te acompañaremos todo el día en el trabajo —Taylor besó mi mejilla mientras tomaba asiento en mi escritorio y me disponía a
—Buenos días, dulzura, lamento haber llegado un poco tarde...—Winter apareció de pronto y dijo aquello sin percatarse de la presencia de mis hermanas debido a que estaba revisando su teléfono. En cuanto alzó la vista, se dio cuenta de lo que pasaba y se puso muy nerviosa. Qué tierna—Oh, lo siento, buenos días.
Mis hermanas se le quedaron viendo por varios segundos con una expresión bastante curiosa en el rostro y intenté no reírme en ese mismo instante.
—Taylor, Laurie, ella es Winter, la correctora que está escribiendo mi libro biográfico —la presenté y ellas fingieron una sonrisa, sabía muy bien que ellas se estaban preguntando la razón por la que ella se había dirigido hacia a mí de tal manera.
—Un gusto, señorita Winter —Taylor, como la mayor de ambas, se acercó a apretarles la mano.
—Me alegra conocerlas tan pronto, es como si me hubiesen leído la mente —rodó los ojos riendo—Como saben, estoy escribiendo un libro sobre su hermano y para la editorial, es de suma importancia que realice un par de grandes investigaciones que nos ayuden a comprender de mejor manera la vida temprana del señor Reed…Entonces, no sé si ustedes estarían dispuestos a conversar un poco conmigo al respecto.
—Por supuesto que no tenemos ningún inconveniente al conversar contigo, al contrario, estamos encantadas —Laurie respondió con una sonrisa en el rostro, cosa que le agradecí.
—Lamento decir esto, señoritas, pero, voy a tener que dejarles debido a que tengo una reunión dentro de cinco minutos. Por favor, continúen trabajando mientras regreso.
—Claro que sí, señor Reed, usted no debe preocuparse por eso —Winter anunció para acercarse a mí con una linda sonrisa. Maldije al darme cuenta que no nos encontrábamos a solas y que, por lo mismo, no iba a ser capaz de comerla a besos hasta cansarme.
—Muy bien, las veré dentro de unas horas —me despedí y salí de la oficina después de cerrar la puerta. Realmente esperaba que mis hermanas no se pusieran demasiado intensas y lograran ponerla incómoda de cierta manera.
Winter
—Señorita Winter, no quiero incomodarla en lo absoluto ni mucho menos, sin embargo, hay algo que me haya llamado mucho la atención…—La pequeña Laurie empezó a hablar y un tremendo escalofrío me recorrió el cuerpo entero—¿Tu relación con mi hermano es netamente profesional o es mucho más que eso?
—No he de mentir cuando digo que me incomoda un poquito su pregunta —tragué saliva, si bien es cierto han aparecido dejándome en shock sin saber que decir o hacer, sin embargo, tampoco es como si deseara caerles mal—Y creo que lo indicado es que su hermano les responda de la manera correcta.
—Por supuesto que no es de buena educación preguntarle este tipo de cosas, señorita Winter, por favor, le ruego que olvide lo que mi hermano le interrogó —Taylor colocó una de sus manos sobre mis hombros y me sonrió, asentí de inmediato. Fue entonces que comprendí que la hermana menor de Devan era de ese tipo de personas que no eran capaces de callarse y guardar para sí mismas lo que piensan—Dime, preciosa, qué necesitas saber y nosotras con gusto vamos a responderte.
—Simplemente lo que necesito es que ustedes me cuenten más acerca de la personalidad de su hermano, también un poco sobre sus inicios y lo que creen que los inspiro a hacer todo lo que hace hoy en día. El objetivo del libro es contar toda la vida del señor Reed, de principio a fin, sin ningún tipo de omisiones. Necesito saber mucho más sobre su personalidad, porque como saben, él es una persona un poco cerrada.
—En primer lugar, cabe recalcar que Devan es un muy buen hombre. Le gustan las cosas simples, más que las lujosas la mayor parte del tiempo. Adora los helados y todo tipo de postres, de igual manera le gusta mucho la música. Si tuviésemos que decir que él tiene un artista o grupo preferido, no cabe duda de que ese grupo es Coldplay, ama cada canción de esa banda.
—¿Una canción qué más le agrade, tal vez? —Planeaba anotar cada pequeño detalle en mi libreta. Aparte de que ese dato iba a resultar muy útil, también iba a ayudarme a avanzar en nuestra relación puesto que era una cosa más que ambos teníamos en común que era de mi conocimiento.