Mi corazón necesita unas vacaciones, solo trabaja, ¿cuánto tienes que ganar para ser feliz?, enfermo y cansado pero no quiero estropearlo porque la vida sigue.
“Dis-ease”
—Osita pooh no me gusta verte decaída, dime que te pasa —Leo acaricia mi cabello con delicadeza como temiera que me vaya a romper si pone más fuerza
Estamos en una cafetería, mi hermano, Seby-by, Mati, Tomi, Javi, Blanca y Julian el novio de mi amiga, Vlad de nuevo tuvo un mal dia en la práctica, eso significa que me canceló a última hora esta salida, salida que venimos planeando desde hace una semana.
—Solo dinos a quien debemos partirle la cara princesa —habla Javi
Alejo mi plato aún con media rebanada de pastel de chocolate, hoy no tengo ganas de comer chocolate, de igual manera dejo mi malteada de chocolate y ordenó una limonada en su lugar.
—A nadie —digo sin ánimos— estoy bien, solo no ha sido un buen día
—Pueden culpar a Vladimir por eso —dice Blanca
—¡¿Estás así por ese pendejo Mali-li?! —exclama Seby-by— vamos a partirle la cara little fox
Ambos se ponen de pie, incluidos Mati y Tomi.
—Sientense —les ordena Leo
—Pero —replica Mati
—Ahora —vuelve a ordenar mi hermano logrando que los chicos se sienten— ¿que hizo esta vez? —exige saber mi hermano— y no me digas que estas asi porque te volvia cancelar porque no te voy a creer nada osita
Volteo a ver a mi amiga que me reta con su mirada a que le diga la verdad, lo que realmente pasó, Julian que esta a su lado obviamente esta deacuerdo con ella, con sus labios me dice que si no lo hago yo, les dirá el, Julian es un buen chico, un buen chico que se ha visto en medio de mis peleas con Vlad, me ha defendido en más de una ocasión, y esta de mas decir que a Vlad no le cae bien, regreso mi vista a los 10 pares de ojos que esperan mi respuesta.
—Se enojó porque —hago una pausa para tragar saliva— me vio platicando con Emilio
—¿El capitán del equipo? —pregunta Tomi y asiento
—¿Te vio besándolo como para que se enojara? —bromea Mati
—¡Claro que no! —me apresuro a decir— estábamos debatiendo sobre un libro
—¿Un libro? —pregunta Seby-by
—Me vio leyendo durante la practica —comienzo a explicarles— al terminar mientras esperaba a que Vlad saliera de las regaderas se acercó para charlar sobre mi lectura porque da la casualidad que el tambien esta leyendo el mismo libro —hago una pausa para darle un trago a mi limonada— cuando salió y nos vio riendo, no le gusto
Prefiero guardarme los detalles para mi.
—No es la primera vez que le arma una escena de celos sin sentido —agrega Blanca
—Los chicos tienen miedo de acercarse a ella por miedo a como vaya a reaccionar Vladimir —completa Julian
—Lo voy a matar —Leo se pone de pie al igual que los chicos
—Leo —suplico con los ojos llenos de lágrimas y él se ve obligado a tomar asiento de nuevo
Escuchó el discurso que me da mi hermano con la cabeza agachada, y todo empeora cuando recibo un mensaje de Vlad o más bien una foto suya sosteniendo una rosa pidiéndome perdón por su comportamiento, yo sonrio por el gesto pero los demás no dejan de decirme que su comportamiento no es sano, lo defiendo diciendo que todos tenemos peleas y ellos lo atacan diciendo que nuestras peleas ya no son normales, el busca pelear por cualquier cosa y yo una vez más salgo en su defensa.
Ya no puedo comer mas sandwiches, pizza, hamburguesas y comida rápida, he comido lo suficiente por toda una vida, extraño la comida de mi mamá, han pasado tres días desde que se fue a un congreso con la tía Ana, papá, el tío Arturo y yo estamos sufriendo, Blanca no sufre de comida porque está a dieta y su nutriologa tiene el servicio de comida, se ha ofrecido a cocinar para nosotros pero la pobre apenas tiene tiempo, nuestros papás hacen lo mejor que pueden para alimentarnos pero ellos también tienen un trabajo que atender, muero por comer un caldo de pollo con verduras o un filete de res, cuando mamá llama todas las noches le decimos que estamos comiendo bien para que no se preocupe, antes de que mi hermano se fuera el se hacia cargo de alimentarnos, él fue bendecido con los dotes culinarios de mamá, dotes que no llegaron a mi por desgracia siempre que intento cocinar hay algo que sale mal y no pienso seguir intentandolo, no voy a desperdiciar comida, comida que ha mucha gente le hace falta, y estamos deacuerdo en que no puedo sobrevivir a base de postres, mi cuerpo necesita proteína y vitaminas, extraño mucho a mi mami.
Dejo mi sandwich a la mitad y lo guardo en mi mochila, no puedo seguir comiendo, la comida de la cafetería ya me aburrió siempre venden lo mismo, burritos, tortas, tacos acorazados, molletes, maruchan, más comida 0 nutritiva.
Estoy sentada en las escaleras de la facultad viendo a los alumnos ir y venir, algunos fuman y tengo que cambiarme de sitio de nuevo, odio el olor a cigarro, nunca entenderé porque las personas fuman, no le veo sentido a ingerir humo por la boca sin ningún beneficio aparte de que huelen horrible, les arruina sus pulmones.
—¿Porque luces triste y miserable?
Veo a Alexander parado justo a mi lado ¡por dios está enorme! se que es altísimo, pero sentada aquí luce incluso más alto, no puedo evitar sonreír, y tampoco puedo evitar verlo vestido con su uniforme blanco, ¡dios! que bien luce, viendolo puedo entender porque los hombres más guapos del campus están en medicina, si todos lucen como el, estudiar en su facultad debe de ser un sueño para cualquier chica, se siente a mi lado ofreciéndome un chocolate que tomo con gusto al ingerirlo sintiendo como se derrite en mi boca.
bendito sea el chocolate y Alexander vestido de blanco, yo admitiré por ti lo que no quieres decir, Alexander es un dios griego bajado por los mismísimos dioses, grabare esta imagen para que nunca la olvides, si asi luce en uniforme médico ¿como lucirá en su uniforme del equipo?