CAPITULO 45

Estoy atrapado en una mentira encuentra el yo que era puro, todavía soy la misma persona que era antes, estoy aquí, pero, una mentira sigue creciendo, está tratando de devorar completamente.

“Lie”

Ha pasado una semana y todo el campus sigue culpando a mi novio por haber quedado descalificados del torneo, los chicos siguen furiosos con él, en especial Noah que lo ha estado evitando desde entonces, y por si fuera poco él sigue estando distante, siempre tiene una excusa para no verme.

Clara se ha vuelto mi sombra, no me deja sola en ningún momento, ha detenido a Blanca de golpear a mi novio en más de una ocasión, Dena no deja de soltar comentarios sarcásticos cuando él está presente, Mara no le habla y Emma se ha mantenido lejos con Noah para impedir que Noah se le vaya encima.

—¿Qué te parece si hoy vamos al cine? —me pregunta Clara mientras esperamos formadas en la fila de la cafetería, extraño comer con mi novio, le envie un mensaje y me dijo que está ocupado con un proyecto— acaba de estrenar una nueva película de terror y me muero por verla

—¿Terror? —arrugo mi nariz— sabes que no soy fan de las películas de terror Clara, Dena podría ir contigo

—Sabemos que no le caigo bien a Dena —pone los ojos en blanco— y quiero ir con mi mejor amiga, podemos ver otra película, pero ven conmigo al cine ¿siiiii? —comienza a abrir y cerrar sus ojos

—Esta bien —acepto apretando su mejilla

Cuando es nuestro turno solo ordenó un jugo de papaya con naranja y un sandwich en cambio mi amiga ordena una hamburguesa, una orden extra de papas a la francesa, un coctel de fruta con yogurth, un café y un litro de agua de jamaica, cuando tenemos toda nuestra comida, buscamos una mesa libre.

—¿Cómo van las cosas con Alex? —pregunta con cautela, como todos siempre que me preguntan por nuestra relación

—Igual —respondo con una mueca, jugando con el popote de mi jugo— algo me esconde y no se que es

Ella abre y cierra su boca, la miro con curiosidad esperando a que hable, sin embargo ella se concentra en su comida.

—Mmmm, este hamburguesa está deliciosa

—¿Que me ibas a decir Clara? —se queda con una papa en el aire viendome con la misma cara que hacía cuando era pequeña cuando la atrapaban haciendo una travesura, baja la papa y comienza a enrollar un mechón de su cabello en su dedo, gesto que hace cuando está nerviosa

—Y-yo… no es nada, olvídalo —le quita importancia con su mano

—Dimelo Clara, por favor —tomo sus manos entre las mías

—No quiero ser la causante de más problemas entre ustedes

—No lo serás, lo prometo, pero me debes decir lo que sabes —nos miramos por unos minutos hasta que ella exhala con resignación viendo a todos lados

—¿Has hablado con Alex por las noches?

—No, han pasado semanas que no hablamos por las noches como antes, ¿porque lo preguntas?

Comienza a retorcerse en su lugar con incomodidad y eso solo me genera más curiosidad y al mismo tiempo angustia por lo que sea que me vaya a decir.

—Creo que…

—¡¿Qué Clara?!

—No te alteres Lia, no es fácil decirte esto

—¿Alexander me está engañando?

—¡¿Qué?! —se sobresalta— ¡claro que no!, es otra cosa

—Habla Clara, no le des más vueltas al asunto

—Creo que regreso a las carreras —confiesa, yo no se qué decir ¿como que regreso a correr? ¿desde cuando? ¿por qué?, tengo muchas preguntas en mi mente pero no soy capaz de hablar— hace unos días, mientras hablaba con un amigo me enseñó un video de una carrera a la que había ido, en el video sale Alex —me explica con pena— no lo reconocí enseguida, es decir se parecía mucho a él, pero no podía ser Alex ¿cierto?, cuando le pregunté a mi amigo como se llamaba ese corredor me dijo que era Racer Jr. ¿no lo llamaban así cuando él corría? —pregunta y asiento— eso imagine, le pregunté a mi amigo si era la primera vez que él corría y… me dijo que no, el regreso de Racer Jr. fue un milagro, me dijo que lleva meses corriendo ¿no sabías nada?

Esto no puede estar pasando

Debe ser una confusión

—¿Estas segura?

Clara me enseña en su celular el video, siento como todo a mi alrededor se derrumba, a primera vista puede parecer un corredor cualquiera, pero lo reconozco enseguida y cuando se baja del auto para celebrar la victoria es mas que evidente que es el.

—¿Cuándo es la próxima carrera?

—No lo se Lia, recuerda que mandan las coordenadas horas antes, ¿por qué?

—Cuando sea la próxima carrera, dile a tu amigo que yo voy con el

—No… no creo que sea una buena idea, ese lugar me da miedo Lia

—Y por eso iré sola Clara, necesito… necesito verlo con mis propios ojos, puede… puede que se trate de un mal entendido ¿y si lo están amenazando de nuevo?

Me niego a creer que Alexander ha vuelto a ese mundo por su propia voluntad, no después de que por fin había logrado que lo dejaran en paz, todo debe tener una explicación, el no me haría esto, no rompería su promesa solo porque si.

—No cambiarás de opinión ¿verdad? —niego con determinación, si mi novio regreso a las carreras ilegales tengo que verlo con mis propios ojos, porque se que si lo confronto me mentira a la cara— en ese caso, iré contigo, jamas te dejaria sola en esto —intento replicar, ella levanta su mano— y no puedes decir nada que me haga cambiar de opinión

—Nadie más puede saber de esto

—¿Ni Blanca?

—Nadie Clara, prometelo

Si mi ancla se entera va a delatarme con mi hermano, le prometí que no volvería a ese sitio, sin embargo tengo que romper esa promesa para saber qué pasa con mi novio.

—Lo prometo

***

—¿Lia? ¿Qué haces aquí?

—Hola, Dani —saludo al compañero de carrera de Alexander con mi mano— espero a mi novio

Veo que voltea a su espalda y me mira con confusión

—Alex no está aquí

—¿Cómo que no está aquí?

—Me dijo que tenia que ir a ver al entrenador ¿no te lo dijo?