Capítulo 13

Ismaíl

La observa dormir, me sentía tan tranquilo, eran cerca de las siete de la mañana, muy temprano para que Taína despertara, pero yo no podía seguir durmiendo, por más que lo deseara mis propios pensamientos me acosaban, acaricié su mentón delineando el perfil de su rostro muy suavemente como la caricia de una pluma, no quería despertarla, esa mujer a mi lado había cambiado tanto mi vida en tan poco tiempo, que temía que al perderla nunca sería el mismo, ella a logrado meterse bajo mi piel a dejado su huella que es imposible de borrar, tomé mi cámara de la mesa de noche, tomé una foto de su rostro, de su cuerpo envuelto entre las sábanas blancas que realzaba el tono dorado de su cabello, poco a poco abrió sus ojos grises, sonriendo me miró 

- Cosa fare amore mío - me encanta a escucharla hablar italiano, no era muy bueno en el idioma pero ella me había dado una lecciones y algo podía comprender 

- Té tomo unas fotos, eres mi  bella musa 

- Ti amo con tutto il cuore - me incline sobre su cuerpo 

- Yo también te amo mi pequeña, eres lo mejor que me a podido pasar - bese su boca suavemente, ella tomó la cámara girando nuestros cuerpo, quedando sentada sobre mí, tomó una foto de mi rostro 

- Sonríe para mí - sonreí para la foto, jalando su brazo la abraze a mi cuerpo, tomando una foto de ambos, Colocó una mano sobre mi mejilla 

- En que piensas tanto amor - 

- Tengo miedo de despertar un día y que tu no estés ahí a mi lado - 

- Los dos sabemos que en un mes debemos regresar a tierra, tú tomaras un vuelo a tu casa y yo tomaré otro - 

- No quiero recordar que solo nos queda un mes - 

- Tenemos que hablar de esto en algún momento - 

- Lo sé pero aún no, todavía tenemos tiempo, y quiero aprovechar todo lo que sea posible 

- Demián - 

- Déjame demostrarte cuanto te amo - 

- No importa el tiempo que pase ni la distancia que nos separe, tú siempre tendrás un lugar en mi corazón y mi mente, yo jamás voy a olvidarte Ismaíl - 

- Yo tampoco voy a olvidarte Taína - 

Un mes después 

- Qué haces Taina ¿Te estás ocultando? - miré a Sara 

- No, que te hace pensar eso - 

- El hecho que Ismaíl te está buscando por todo el crucero como loco, me dijo que ya no estabas al despertar ¿porque te ocultas? 

- Sabes que fecha es hoy Sara - pose mi mirada en el mar 

- Hoy es el último día en este barco, se que dije que podría lograrlo, pero no puedo Sara, yo de verdad me enamore de él, no quiero decir adiós, no puedo despedirme de Ismaíl - sentí mis lágrimas rodar por mis mejillas sin control, la mire 

- Yo sabía que esto pasaría, pero era tan feliz que viví el momento, el tiempo se acabó, ahora que hago - 

- Linda no tienen que decirse adiós - 

- Mi vida está en San Francisco, y posiblemente me vaya fuera del país, su vida, su trabajo, su familia todo lo que ama Demián está aquí, ¿quién soy yo para hacerlo escoger? - 

- Eres la mujer que ama, yo se que es así, he sido testigo de su amor - 

- Pero el amor no es siempre suficiente, ambos teníamos una vida antes de entrar a este crucero y regresaremos a ella al bajar de él y por más que me duela no lo puedo cambiar - 

- Taína - 

- Sara estoy escondiéndome porque tengo esta estúpida idea de que las cosas cambiarán, pero siento que cada segundo que pasa más rápido- ella abrazó mi cuerpo tratando de consolarme, sollozo sobre su hombro tratando de calmar mi dolor pero sin recibir resultados 

- Como es que se metió tan profundo en mi pecho en tampoco tiempo, explicame porque siento que me están quitando una parte de mí - 

- No tiene explicación, tienes que hablar con él, estás perdiendo el tiempo que les queda juntos, se que te duele, pero debes verlo, hablar o dentro de unos años te lamentará no haberte despedido de él - 

- Tengo miedo de no poder soportarlo - 

- Ambos corrieron el riesgo de enamorarse, los dos sabían que su historia tenía un final, ahora tienen que afrontarlo juntos - 

- Tienes razón, pero como haces para ordenarle al corazón que es lo que debe hacer, él no conoce razones, el corazón solo sabe sentir - 

- Lo sé Linda - 

Me pare frente a la puerta con indecisión, no quería afrontar la realidad pero no podía escapar más de ella, Sara tenía razón, debía hablar con Demián y despedirme de él, la puerta se abrió antes de poder tocar, Demián me miró sus ojos se notaban tristes 

- Taína mi amor te he estado buscando por todos lados, regrese a la habitación con la idea de que tal vez habrías regresado - no le permití hablar más, me abrace a su cuerpo con todo la fuerza que me era posible, sin poder soportarlo más mis lágrimas descendieron nuevamente por mis mejillas, las palabras murieron en mi boca, no era capaz de decir nada, lo único que salía de mi boca eran sollozos