-York, te ves estupenda- la voz de Max sonaba muy ronca
-Sigo sin entender porque me tuve que vestir así- lo ignore rotundamente y me enfoque en Graham -¿Cual es la ocasión?
-Ya vas a ver
Como nadie volvió a hablar, y tampoco hable y me fije en la Grom que estaba sentada al lado de Max, y me di cuenta de que era Pag, y que estaba con un vestido igual de largo que el mío, solo que era verde oscuro, y con mangas cortas, ademas de que tenia un estampado negro.
Anduvimos por un buen rato en la limusina, Mac estaba junto a Pag sentados en frente de Graham y mío. Nadie hablo durante todo el trayecto, no fue hasta que nos detuvimos que Max hablo
-Bien chicos retírense, es hora de que hable con York
Ambos se retiraron con una sonrisa satisfactoria en la boca, lo cual no me dio buena vibra.
Apenas cerraron la puerta Max se sentó al frente mío, con sus manos acuno mi cara y la giro para que lo viera a los ojos, y a pesar de mis intentos por alejarme me resulto imposible.
-York no quería tener que llegar a estos extremos, pero no me estas dando mas posibilidades. Así que esta es tu última oportunidad, dime la formula, o voy a tener que hacer algo que a ningún de los dos nos va a gustar.
Se refería a obligarme, controlarme mentalmente para que le diera la formula, pero me había dicho que no iba a controlarme
-Pero me dijiste que no me controlarías para que te dijera la formula
-Exacto, para que me dijeras la formula, pero aun así puedo conseguir otras cosas de ti- acerco su cabeza a ma mi, cosa de que nuestras frentes se tocaran -me das la formula o no
-No, nunca- retrocedí en el asiento y choque con la puerta -porque te la daría
-Bien, lo haremos a mi manera- se acerco a mi y apoyo sus brazos a ambos lados de mi cara -mírame a los ojos
Empece a mirar a todas partes menos a su ojos, no quería que se metiera en mi cabeza
-¡York mírame!
Esta vez si lo mire, pero por el simple hecho de que me dio miedo, me aterró, siempre había sido tan paciente conmigo pero ahora me estaba gritando
-Red... vas a olvidar que lo amas, no es mas que una persona que quizo abusar de ti- me miraba tan fijamente sin pestañear -Tu no amas a Red, lo odias
Yo no amo a Red, lo odio, ¡No yo lo amo! Tontita, tu lo ¡Odias! Trato de abusar de ti
Mi cabeza era una batalla en donde mi corazón me decía algo, pero se sentía como un engaño, mi cabeza estaba bien, trato de abusar de mi, yo no lo amo
-Tu me amas a mi, llevamos mucho tiempo juntos, somos el uno para el otro-
Max... Sus ojos tan hermosos, su cuerpo, su forma de ser ¡No Red! ¡Max! Idiota concentrare ¿Que sucede?
Empece a ver como todo giraba alrededor mío, Max, el auto, la calle, luego empezó a oscurecerse todo.
••••••
Empece a abrir los ojos lentamente, acostumbrándome a la luz, estaba en un sillón, acostada, alguien tenia mi mano.
-¡York! Cariño como te sientes- alguien me hablo apenas abrí los ojos completamente
-¿Max? ¿Que paso?
-Tráigale un baso de agua por favor- le hablo a otra persona que no conocía, estaba vestida de negro -Amor te desmayaste, y me asuste mucho
Max, dios este hombre me iba a matar, se preocupaba por mi, a pesar de que sabe que lo nuestro es difícil, sigue amándome
-Max, nunca me vas a perder, aunque lo nuestro sea prohibido- me senté en el sillón y junte nuestros labios, pero esta vez no se sintió como toda las otra veces, en que nuestros labios encajaban a la perfección, esto era distinto
Llego nuevamente la mucha que había salido a buscar el vaso con agua, y me lo paso
-Aqui tiene señorita, espero se sienta mejora
-Gracias- tome un sorbo de agua
¡Dios! Estaba deliciosa, fría, refrescante, relajante
-No creo que se prudente quedarnos, es mejor que nos volvamos a casa
¿Volver? Pero si no eh podido disfrutar ¿Que hacemos acá?
-Max, cariño ¿Dónde estamos?
-Es mi fiesta de cumpleaños, pero no estas en condiciones de quedarte
¡No me puedo ir, tengo que estar acá para Max!
-Claro que puedo estar acá, no voy a arruinar tu cumpleaños bebe
-Estas segura- por algún motivo, sentía que Max si se quería quedar, pero la mismo tiempo se preocupaba por mi y quería irse
¡Si!
-Claro- me pare lentamente y Max se paro junto a mi, me dio la mano, y salimos del salón en que nos encontrábamos.
Estaba repleto de gente, todos vestidos elegantemente, y gracias a dios yo también tenia puesto un vestido elegante.
A lo lejos divise a Pag, ablando con otra persona, un hombre, que se veía bastante guapo con terno, pero no tanto como mi Max
-Cariño, espérame acá, voy por unos tragos y vuelvo- me dio un beso en la cabeza y desapareció entre la gente
Me decidí por ir a hablar con Pag y el hombre que estaba con ella, iba en su dirección cuando alguien me agarró del brazo y me hizo girar
-¡York! Que bueno que te encuentro ¡Donde rayos te habías metido!- sonaba enojado ¿Quien es?
-¿Perdón?
-Que rayos te paso- dirigió su mirada a la parte mas baja de mi escote, en donde tenia una mancha, mi marca de nacimiento, abrió un poco mas esa parte para ver mas mi mancha