Fui a comprar nuevas armas, a un sucio tipo llamado Zack, era un maldito traficante, un cerdo, un drogadicto, pero joder, el tenia las mejores armas de la ciudad, era la única persona en todo el país a quien podía recurrir en este tipo de situaciones. Llegar con el no era nada fácil, pues vivía en uno de los barrios mas peligrosos de la ciudad, pero tengo que conseguir armas ya y matar pronto a este tal Alex lo mas pronto posible y así poder marcharme, no quiero seguir en esta ciudad, al menos por un buen tiempo.
Llegue a mi destino, era bastante tétrico, gente ebria en cada esquina, mujerzuelas por todos lados, y vagabundos medios moribundos en cada callejón. Aparque mi vehículo en un lugar oscuro lo mas alejado posible de toda aquella gente. El lugar estaba completamente a oscuras, y un olor a droga inundaba todo el sitio, era bastante desagradable.
Me llevo a la parte trasera, en una especie de bodega blindada con una puerta de seguridad, algo mas moderna para proteger toda su valiosa mercancía. El lugar estaba mas iluminado, y por suerte tenia un aroma mucho mas grato que afuera.
Ya tengo las armas, ahora, solo debo acercarme a este chico. Volví al lugar en donde me estaba alojando. Seguí revisando su información, vi la dirección en donde vivía, una vez mas para asegurarme que en verdad vivía a unas pocas calles de aquí. Busque una maleta para guardar el arma mas grande, la que usaría para dar el primer tiro, el único tiro. Fui hacia donde el vivía, bueno no exactamente, mas bien al edificio de enfrente, quedando justo en la azotea en donde podre tener una mejor visión de su apartamento. Instale el arma, con su base y mira, y me puse a observar con detalle. Encontré su apartamento, el estaba ahí, pero no solo, estaba en compañía de dos chicos mas, no puedo matarlo con tantos testigos potenciales, tendría que matarlos a todos de una buena vez.
Seguí observando por casi una hora, pero en ningún momento quedaba solo. Maldita sea, me senté un rato para poder descansar mi espalda. Observe hacia otro edificio y en la azotea de este, había un sujeto con aspecto macabro apuntándome con un arma directo a mi pecho. Pero que rayos, disparo hacia mi, esquive como pude aquel disparo, pero este rozo mi brazo derecho, de inmediato comenzó a bajar un hilo de sangre. Saque mi arma desde el interior de mi chaqueta y dispare, tengo muy buena puntería, y con mucha facilidad le di un tiro en la cabeza haciéndolo caer. Como pude agarre el arma mas grande para salir lo mas rápido posible de ese lugar.
A pesar de que la herida era superficial, corría bastante sangre de mi brazo, además que duele bastante. Es la primera vez que alguien me dispara, no pensé que fuese tan doloroso. Estaba confundida, no se porque rayos quieren asesinarme ¿Acaso dudan de mi capacidad para lograr mi objetivo? No se quien demonios se cree, pero nadie se mete conmigo, nadie me traiciona y se va así como así. Alex, tu por el momento te has salvado, ahora debo encargarme de encontrar a ese señor y matarlo de una buena vez por toda, pero primero curar la herida en mi brazo.