Capítulo 5

Mientras que esos chicos se comenzaban a alistar, yo llame a un viejo amigo, alguien con una historia en común, a quien conocí hace algunos años, su nombre Josh, lo salve de unos cuantos tipos que querían matarlo, y bueno, llegue justo para salvar su vida. El tiene unas propiedades en el sur del país, creo que será un buen lugar para llevarlos, aunque ese lugar encumbre sus negocios truculentos y sucios.

¿Bueno?

Josh, soy Soe.

Hola, vaya tiempo sin saber de ti, supongo que estas en serios problemas y necesitas cobrar el favor que te debo.

Si, exactamente.

¿De que se trata?

Es difícil de explicar. Creo que es mejor que te cuente todo cuando lleguemos allá.

¿Lleguemos?

Si, luego te explico todo, que me dices ¿Cuento contigo?

Claro, así quedamos a mano.

Exacto.

Bien, ya tenia todo listo, tenia que ir a mi apartamento primero para recoger todas mis pertenencias, luego habrá tiempo para curarme esta herida en mi brazo, aunque estoy perdiendo bastante sangre. Aquellos chicos ya estaban listos, cada uno cargando un bolso, ahora tengo que conseguir un vehículo mas grande, esta claro que en mi deportivo no vamos a caer todos.

Ustedes bajaran como si nada, yo conseguiré un auto mas grande y me esperaran en la entrada.

Deberías curar tu brazo primero.

No hay tiempo. Ahora, vamos.

Ellos se fueron en el elevador, yo por mi parte baje por las escaleras, bueno, mas bien me deslice en ellas hacia abajo para llegar mas rápido. Ahora a encontrar un vehículo, en el callejón había un señor descargando algunas cajas de una furgoneta, he de suponer que son para el hotel, prefecto, es justo lo que necesito.

¿Disculpe?

¿Si?

Necesito su vehículo, Ahora.-Saque mi arma apuntándole con esta.- Las llave por favor.

Es…esta bien.-Se alejo y me entrego las llaves.-

Gracias, que amable.

Me subí y volví a la entrada del edificio en donde ellos estaban esperando, se veían nerviosos, apenas me detuve abrí la puerta para darles ingreso. Subieron al vehículo y me dirigí a mi apartamento, tengo que actuar rápido. Ya no puedo seguir perdiendo mi tiempo. Como pude cargue las cosas llevando estas hacia el vehículo dejando estas en la parte trasera de este para poder subir nuevamente al asiento del piloto, Mi brazo cada día dolía mas, y podía sentir la sangre espesa bajar por mi brazo.

El viaje lo hicimos en silencio total, en este momento ya comenzaba lo malo, mi vida, la de ellos corría riesgo y gran peligro. Creo que jamás debí haber aceptado este trabajo, solo ha traído problemas en mi vida. Mas de los que ya tenía.

El viaje fue largo y agotador, sentía como poco a poco oba perdiendo el conocimiento. Al llegar, Josh estaba en la entrada. Baje avanzando hasta el para poder darle un fuerte abrazo-

Wow, mírate, que cambiada estas.

Pienso igual.

¿Quiénes son ellos?

Son a quienes debo proteger.

Entiendo, bueno que esperamos, vamos adentro y me cuentas todo lo que pasa.

Vamos.

El lugar era lindo, seguro, y como no si habían muchos hombres armados por todos lados, todos llevaban escopetas y otras armas de alto calibre. De inmediato aquellos chicos se pusieron nerviosos. La casa de Josh es enorme y como no si es uno de los mayores traficantes de toda Corea y Asia. Es un cerdo arribista. Pero no me meto en sus negocios.

Se quedan aquí, vuelvo de inmediato.

Fuimos hasta su oficina en donde podríamos hablar sin que nadie nos interrumpiera.

Bueno, cuéntame.

Bueno así va la cosa, un tipo me contrato para asesinar a uno de los chicos que están en tu sala, intente matarlo dos veces por dos motivos, uno, ese señor intento matarme dos veces, me dio un tiro en el brazo el cual fue superficial, y esto fue la segunda vez.-Me abrí la chaqueta dejando ver la herida que por suerte había dejado de sangrar.- Y la otra, no se porque, pero no pude matarlo.

¿Te gusta ese chico?

No lo se.

Y bueno ¿Qué piensas hacer ahora?

Asesinar a ese sujeto antes de que venga por mi.

¿Y que quieres que haga yo?

Solo te pido refugio, no molestaremos en tus negocios, solo quiero un lugar en donde escondernos.

Soe, querida, mi hogar es tu hogar, mis hombres cuidaran de ustedes, ahora, iras con mi medico personal para que te saque esa bala y te cure aquella herida.