El arte es abstracto, pero muy real.
Es ese algo que todos tenemos, no obstante, no todos tienen la suficiente fortaleza para poder descubrirlo.
Además, no todos saben apreciar el arte que hay en tí. Ya sea porque no lo compronden, algo les carcome que les impide disfrutarlo o simplemente están incrustados tanto en la rutina que dirán que ese talento que tienes no te va a servir para nada.
Pero, ¿sabes?
Si, que sirve. Sirve para hacerte feliz y para tener esa esperanza de que aún día puedas mostrar todo ese arte que hay dentro de tí. Independientemente de si les gusta o no. Y eso vale más que cualquier palabra negativa.