Secretos Oscuros

Algo me protege

 

Salimos de aquel sitio, mientras íbamos en el camino me pasaba por la mente, qué hará ese hombre con Tonny, tendrá el mismo castigo que su hermano o acaso querrá otra cosa de él. Bueno solo espero que Tonny utilice la cabeza y salga de ese lugar, a pesar de todo lo seguía queriendo como amigo que fue, tal vez otros dirán, estás loco cómo puedes querer a alguien que mato a tus padres, pero todo sucede por algo, además fue contra su voluntad. Es mi mejor amigo y es lo que importa, no tengo que esperar que el venga a mí, sino yo ir en busca de él, yo soy el que necesita de su compañía. ¡La amistad no se toca, se siente!

Rosa ha llamado mi atención, a pesar de mi distracción, se me ha quedado mirando todo el camino, entonces de reojo la miro y le pregunto:

― ¿Qué pasa?

―Solo he notado en ti una tristeza aun mayor que la de la última vez, ¿acaso me ignoras por lo que supiste de mi procedencia familiar?

― No, descuida es solo que probablemente pierda a mi mejor amigo.

― ¿Por mi culpa?

― No, no es tu culpa, es de él mismo, pero han sido mucho los golpes en el transcurso de mi vida, que no sé si será que yo he sido un mal ser humano o es que Dios ha descargado su ira sobre mí.

― Deja de hablar disparates, Dios no es un Dios vengativo, además, sigues vivo aun ¿verdad?, esa es una señal de su misericordia.

― ¿Qué sabes tú de Dios?

― Lo que al parecer tú no sabes.

Sin querer, me hace sonreír, es buena para eso, no lo puedo negar. Casi llegamos a la capital y le pregunto:

― ¿A dónde vamos a ir, ahora?

― Obviamente a mi casa.

Sin ningún reparo me dirigí hacía ya, me sabía la dirección ya que fui una vez y me aprendo rápido los lugares que ya he ido.

Llegamos a su casa, nos desmontamos, nos paramos al frente de la casa y ella se adelantó, miro hacia atrás, me vio y dijo:

― Han sido días difíciles te quedarás ahí parado vamos, o acaso te vas sin entrar.

Miraba como se alejaba y su vos corría en mis oídos como fuentes de agua celestial. No, no puedo estar enamorado, es solo una imaginación de mi estúpida cabeza.

Me entré en el carro, me puse el cinturón, coloqué las manos en el timón, listo para irme, luego se rellena mi mente de esa vos de la Bestia al salir de su casa: "Cuida de ella".

Qué habrá dejado decir con eso, él sabe que vivo en los EEUU por qué me dijo eso, si ella es de aquí, somos dos polos opuestos.

― ¿A caso te vas sin despedirte? No soy quien para decirte eso, pero te debo mi vida y no sé, quería hacerte algo, una cena, una comida, en gratitud de tu solidaridad.

Qué… cuándo se acercó, no me di cuenta, seguro fue por la distracción de mi mente, qué me está pasando, mis sentidos me traicionan y no sé por qué. Es Rosa que causa ese susurro como una vos en mi interior.

Me he quedado paralizado, ante la doble sorpresa, la de Rosa acercarse así, silenciosamente y la de esa vos, acaso fue un fantasma o qué.

― Hola… Wander, que te pasa estás estático, ¿oye me escuchas, hice algo malo?, está bien perdón, por la molestia, que llegues bien a tu casa.

Todavía no podía moverme, aunque quería hacerlo, veía nuevamente como Rosa se alejaba y su vos desaparecía en mi mente, qué me ocurría, por qué no puedo moverme, mis ojos se apagaban y la poca fuerza se me acababan, hasta que caigo en un sueño profundo.

―*Hola Wander.

― ¿Quién eres?

―*Tu subconsciente.

― Imposible que esté hablando contigo.

― *Bueno, puedes verlo de la manera que quieras, solo quiero decirte que me debes mucho.

― ¿Qué te debo?

― *Soy un efecto producido por el cerebro, el órgano más importante del cuerpo, es capaz de controlar sentimientos, estímulos, nervios, información, imaginación, pensamientos y a los sentidos, pero yo soy como el sexto sentido.

― Por qué estoy hablando contigo. ¿Qué es lo que te debo?

― *Todo lo que no sabes y lo que sabes…

De repente se puso todo nublado, y fue cuando pude despertar, gracias a aquella voz suave que se deslizaba por mis oídos, me estaba invocando, provocando que mi espíritu regresara de aquel sueño.

― ¡Wander, Wander...!

― Eh...

Era Rosa la que me llamaba para que despertara. Me había quedado dormido justamente en el botón de la bocina del vehículo, eso hizo que ella viniera.

 



#5070 en Novela romántica
#600 en Thriller
#292 en Misterio

En el texto hay: misterio, armas, accion

Editado: 21.02.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.