Gabriela'S
-Creo que estamos a salvo - dije temblando y apretando la herida de Theo, la cual no dejaba de sangrar - ¡traigan a Judith maldita sea! - cerré mis ojos tratando de tranquilizarme, y sin despegar mis manos de su pierna.
Isaac limpió el raspón de su frente - los perdimos, pero pueden encontrarnos en cualquier momento - su respiración suena agotadora y se inclinó hacia Theo, quien sigue inconsciente - Judith está en el otro bunker, sabes que no puede salir al exterior. Sería un suicidio.
Tragué fuertemente mientras miro a mi alrededor.
Hice una mueca al oír los llantos de Lizzie, y Trevor intentando calmarla.
Éste maldito lugar con olor a polvo, lleno de suministros, pequeño y con una puerta de acero siendo vigilada por Isaac, comienza a ponerme los pelos de punta.
-Se está desangrando, necesitamos sacarle la bala y suturar la herida - suspiré profundo al ver que la cara de mi hermano se vuelve más pálida a cada segundo que pasa - Isaac, necesito tu ayuda - tragué fuertemente mientras señalo los botiquines de un costado - tráeme uno.
Isaac hizo una mueca bajando el arma, mientras se la entrega a Trevor, quien contiene a Lizzie en sus brazos.
-¿En que momento todo se salió de control? - dije con la voz temblorosa.
~Tres horas antes~
-Necesitamos irnos de aquí lo antes posible - dijo Isaac golpeando una de las sillas del salón.
Me sobresalté por el sonido y centré mi vista en el que se hizo pasar por Jared.
Apreté la manta a mi cuerpo intentando generar calor, y me arrimé hacia donde está. Que por lo visto, sigue lamentando el insoportable dolor del suero.
-Dime tu nombre - hablé firmemente.
Éste entre abrió sus ojos, y me miró incrédulo - ¿y eso de qué te serviría?
Me encogí de hombros - está bien, te llamaré idiota - me crucé de brazos.
-Derek - suspiró y luego se quejó por el dolor en todo su cuerpo - y ya pueden matarme, se adelantarían ya que por lo visto fallé en mi misión, y a mi jefe eso no le sentará nada bien.
Asentí lentamente mientras siento el habla débil de Jared, el cual está siendo atendido por Judith y Tom a su lado.
Me generó un poco de ternura, ver que Lizzie no suelta la mano de Jared y le cuenta sus historias de fantasía.
-¿Sabes? Lo que acaba de decirme no importa Derek - le guiñé un ojo - sólo quería saber tu nombre, para no recordar la muerte de un cuerpo desconocido - apreté mis dientes harta de salir lastimada - vas a pagar por cada daño que le ocasionaste a ésta familia - dije señalando a Tom y a su hijo.
-Ya que tu vida no vale nada - Theo se acercó con un mapa - dime en cuanto tiempo estará tu equipo aquí.
Ben se cruzó de brazos y miró de reojo a Trevor, quien no para de caminar de un lado a otro - relájate, me pones nervioso cuando te mueves mucho.
-Como se supone que quieres relajarte ¿cuando tienes a un escuadrón de hombres que vienen por ti? - dijo algo histérico - y a juzgar por su gesto, estarán aquí en cualquier segundo - dijo señalando a Derek, quien se quedó callado mirando un lugar perdido en la nada.
-Otra dosis lo hará hablar - dijo Isaac de forma violenta y elevando el suero.
-¡No! - soltó sin más, mientras alza sus cejas desesperado - ¡no más de eso!
-Entonces di lo que necesitamos saber - dijo Theo alzando su ceja como si fuera algo obvio.
Apreté mis dientes, y caminé lentamente hacia Theo, quien no despega la mirada del mapa.
-¿Te quedas callado de nuevo? - dijo Isaac riendo, y tomando su cabeza a un costado, para hacer notar su cuello.
-¡Hablaré! - Derek cerró sus ojos desesperado, y pude notar pequeñas lágrimas brotar de sus ojos.
-¿Cuánto tiempo? - repitió por segunda vez Theo.
-Una hora, tal vez un poco menos - dijo cerrando sus ojos, y apretando sus puños atados a la silla.
Abrí mis ojos y me giré hacia Theo al ver su cara de preocupación - ¿qué? - pregunté nerviosa.
-En una hora lograremos cubrir éste terreno - dijo señalando una parte del mapa, la cual está cubierta de bosque - y aquí - dijo golpeamos un punto en específico - están los refugios que necesitamos.
-¿Refugios? - dijo Isaac alzando una ceja y avanzando hacia nosotros - no oí nada de eso cuando vinimos aquí.
-No confiaba en ti - dijo haciendo una mueca - sin embargo no sé si seguirán estando, fueron echos bajo tierra en épocas de guerra. Justo al límite de la frontera - sonrió de costado - todo gracias a mis clases de historia.
-Hay que intentarlo - sacudí mi cabeza - no queda otra opción. Es eso, o quedarnos aquí para que nos atrapen.
Ben se arrimó y tomó el mapa - la única desventaja es que los refugios están a dos horas de aquí - negó lentamente - si descubren cual fue nuestra ruta de escapatoria, estamos fritos. Además ni sabemos si siguen existiendo.
-No nos queda otra alternativa, hay que confiar - dijo Trevor y abrió sus ojos molesto - ¡genial! ¡ahora tendremos que matar al señor que se llevó el Oscard del año!