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Después de un par de advertencias para no acercarme a algunas personas y otras sugerencias, me acompañaron hasta la parada del metro donde tomé uno hasta Cambridge y después tomé un bus a casa, al llegar vi a Kate intentando no quemar la cocina.

—Llegaste, me comenzaba a preocupar —Dejé el abrigo en el perchero

—Fui a ver a mi padre —dije

—Alan llamo, dijo algo por el estilo y que prácticamente huiste de él y no le dio tiempo de decirte la cosa 

—Si bueno no quiero escuchar la cosa —dije

—Algún día tendrás y deberás responder —Negué —Vamos Abby no puedes huir por siempre, ¿Qué te dijo tu padre?

—Que voy a ir a un viaje de negocios y después pueden alcanzarme ustedes si vamos a seguir con el viaje 

—No iras conmigo a Alemania —Negué triste —Entonces solo iré con Brad y Alan

Kate era alemana, pero estudiaba relaciones exteriores y Empresariales, aquí, su novio y su familia estaban en Alemania.

—¿Qué le vas a decir a Alan? —Pregunto

Miré lo que había cocinado, la primera vez que lo hizo, tuvimos indigestión, pero ha ido mejorando, se veía comestible, no inflamable, ni tóxico, lo probé y tuve que retener mis ganas de vomitar

—¿Qué es esto?

—Queso y tallarines —dijo dudosa

—¿Qué le pusiste? —Bufo

—Solo le puse un poco de pimienta

—Parece que le vaciaste el recipiente de pimienta 

—No evadas el tema —Menciono enojada

—No lo sé Kate, como le digo que lo quiero como mi amigo y que vivo obsesionada con un tipo que solo aparece en mis sueños

—Como me lo has dicho a mí —dijo

—No es sencillo, parece que hablo queriendo herir a la gente, no importa cuánto cuidado tenga término lastimando a la gente

—A mí me gustaría tener ese don, piensan que les digo cumplidos y no, estoy siendo sarcástica, pero a veces es lo contrario, te lo dirá mañana

—Perfecto pensaré en qué decir —dije —Y practicaré mi tacto, que te parece si te preparo frijoles —Asintió

—Muero de hambre

—Mañana iré a una exposición, ¿Ya te lo mencioné?

—¿Quieres que te vaya a ver?

—Me quedaré con mis padres —dije sacando los frijoles y la cebolla

—Bien tienes un plan de huida 

Pues no, nada parecía ir bien, habíamos acabado el día, bueno, al menos yo, Kate tenía un día más junto a Alan, ellos me acompañaron hasta la estación.

—Será genial escucharte hablar, espero que no interfiera con tus planes de viaje —dijo Brad —Mañana iremos a comprar ropa porque tú aparte de divertirte deberás llevar la mejor ropa y querida, no eres fan de la moda —Me reí 

—Lástima que no podre ir con ustedes

—Es lamentable si —Alan miró a Brad y después este alzó las cejas —Iré a ver a Kate, ya se tardó esta niña

—¿Estás emocionada por ir a Italia? —asentí

—Creo que será una gran experiencia —dije —Debo irme —Mire detrás de él a ver si venían para despedirme

—Yo quería decirte algo Abs —Lo miré —Yo creo que no a pasado desapercibida mis atenciones hasta ti, y es evidente que tú sientes lo mismo. —Lo miré que era esto una confesión muy bien elaborada, solo él era capaz de hacerlo, me sentía atrapada en alguna mala escena de película. —Así que considero que no debemos evitar más esto y demostrar nuestro amor al mundo, realmente me gustaría que me vieras como más que un amigo —Vaya primero, pensé que estaba seguro de lo que yo sentía y ahora, vi a Brad y Kate acercándose

—Yo realmente no sé qué decir

—Sabía que mi confesión te dejará sin habla —dijo orgulloso de sí

—Yo —Lo miré —Yo realmente estoy sorprendida, no pensé que tú pensaras eso —Me miro confundido —Mira Alan, eres uno de mis mejores amigos, te quiero, pero como mi amigo, lamento haberte dado a entender algo erróneo —dije —Espero que esto no dañe nuestra amistad —Él parecía avergonzado

—Yo, pensé que tú ... —Me miro —O solo estás bromeando, ya que sabes perfectamente que nadie más te aceptara con el pasado que tienes —Ignore su comentario

—Y es por eso por lo que no funcionaria, no te quiero perder como amigo —No pude seguir hablando porque él se fue

—Creo que no te fue bien —bufe

—No tengo el don de hablar —dije

—Tranquila, esto ya se venía venir, pero más vale tarde que nunca —Viré los ojos

—Debo irme los veo mañana en la tarde

La exposición de arte estaba muy concurrida por diversas personas, apagamos los celulares y comenzamos a caminar por los pasillos llenos de cuadros del renacimiento y otros no tan antiguos. Clara me iba preguntando algunas cosas al igual que yo al guía, estábamos por terminar el recorrido, nos detuvimos frente a una pintura muy imponente de una chica; la pintura era hermosa, el tallado de los ojos, daba el toque que te miraba, la mirada no proyectaba ningún sentimiento era seco en ese aspecto, pero eso era lo que más te atraía de ella.