Rouses
Alessio y Jack están frente a mí, es notable la molestia Alessio. Jack, por otro lado, no ha dicho nada. Mi encargado de las relaciones internas esta aquí, le he pedido ayuda y accedió, además también hablé con Casio, nos ayudará a fomentar propaganda positiva para Alessio y su empresa.
—Ferran, gracias
Ferran se va después de presentar un informe de lo que se dispondrá hacer, deja las dos carpetas frente a cada uno y se va. Miro a los dos hombres frente a mí.
—¿Entonces?
—¿Cuánto costará esto? —Pregunta Jack —No sé si lo sabe, pero no estamos bien de dinero
—Nada
—Nada es gratis en esta vida su alteza real
—No, nada lo es, pero esto no vale nada más que trabajo duro. Cuiden a mi familia como lo han estado asiendo y yo me veré por bien pagada.
—¿No nos hará firmar nada? —Habla con sorpresa
—No
—¿Entonces usted es la buena y la maldita de su prima es la mala? —Sonrió
—Digamos que yo no pido el alma como parte de pago.
Asiente y miro a Alessio que no ha dicho nada.
—Debemos hablarlo con la encargada de California —Dice Jack regresándome a ver —Rachel —Alzo una ceja —Ella es socia ahora
—No lo sabía —Los miro y Jack se rasca, la cabeza —Entiendo —Dojo una tercera carpeta en la mesa y mando un documento en digital al correo de Alessio y Jack
—La cosa es que…
—Ya le dije que no mezclo el trabajo y lo personal. Espero que ustedes tampoco. Negocios son negocios.
—Es que tal vez no les guste saber que nuestro cliente más importante no nos pagara
—Yo no dije que no les pagaría —Se sorprende —Yo le pedí algo mucho más grande que solo hacer su trabajo, le pedí lealtad.
—Yo…
—La lealtad es algo fácil de fracturar y difícil de conseguir. Solo pregúntate ¿Por qué le cobra en dinero si es lo que más tengo? Prefiero cobarde con algo escaso para mí.
—El problema es…
—¿Cuál de los dos se acostó primero con ella? —Pregunto y ambos se miran
—¿Cómo sabes que…? —Pregunta Jack
—Solo sume dos más, uno y bueno
—Fue en la universidad —Murmura, Alessio
—Los dos —Alzo las cejas y tomo la botella de agua —EL punto es que usted no es su persona favorita
—Lo supongo —Sonrió —Creo que de la mayoría, pero tampoco es que quiero que seamos amigas. ¿Por qué no le dice que es por prestigio? Que me parece indigno de un Alessandretti trabajar con una empresa que ba a la baja y ya.
—¿Lo cree así? —Pregunta Jack
—No, porque si pensara eso no hubiera aplicado el contrato —Asiente —Digámosle la verdad, que parte de esto que les pasa es mi culpa y trato de arreglarlo.
—No es tu culpa —Miro a Alessio
—Lo es
No dice nada más. Tomo aire.
—Estoy seguro de que hablo por los dos y que también por mi colega en California y aceptamos el trato —Asiento en dirección de jack —Pero al menos déjenos pagar algo
—No
—¿Por qué?
—Porque eso ya lo hicieron —Se miran entre ellos —Pablo, Marco, Pedro, todos ellos lo hicieron con su vida. Iba a cumplir dieciséis cuando ellos se hicieron cargo de la seguridad, siempre estuvieron conmigo, trataban de que me sintiera humana y normal. Jugaban conmigo, bailaban y me daban consejos. Aprobaban o no mis citas, y cuando estas eran un desastre me sacaban de ahí. Compraban pastel para mi cumpleaños, fueron conmigo a mi primera charla de educación sexual. Ellos eran mi familia y por ende ustedes y su empresa también, esta es mi manera de decirles gracias.
—Déjame hablar con ella Jack
Jack asiente, toma las carpetas y sale.
Alessio se pasa las manos por la cabeza y yo me pongo de pie, la puerta se cierra y voy hasta donde él y me siento en sus piernas. Me mira muy serio.
—Sabes estos días ha sido un reto hacerte reír.
—¿Por qué querías hacerme reír?
—Me gusta verte sonreír, y apreciar esos lindos hoyuelos
—¿Crees que soy lindo? —Habla coqueto
—También eres guapo cuando estás serio, pero esta seriedad no me gusta porque sé que algo te pasa y no me quieres decir —Aparta la mirada —Bien
—Prométeme que si te lo digo no saldrás huyendo —Dice en un susurro
—Vez, estés anillo —Levanto mi mano —Si es lo que creo que significa, deberás confiar en mí, porque esto significa más que solo una promesa de labios para fuera. Significa que deberemos apoyarnos mutuamente o ¿Qué significa esto para ti Alessio? ¿Un chiste? ¿Eso es?
—No lo es. Quiero ser tú a poyo y que tú seas el mío. Quiero despertar cada mañana y encontrarte al otro lado de la cama. Eres mi fantasía, mi sueño, mi hoy y mi mañana. Este anillo significa más de lo que crees, te hace mía y me hace tuyo. Tienes mi contrato de propiedad.
Lo beso, sintiendo su respiración, mezclarse con la mía. Paso mi mano por su cabello, suave y desordenado, y le acaricio las mejillas, cálidas bajo mis dedos. En este momento, el mundo entero desaparece, dejando solo a Alessio y a mí.
—Te amo, Alessio, me gusta ser tu dueña
—Y a mi ser el tuyo
—¿Entonces no hay problema con la ayuda? —Toma aire
—Déjame pagarte
—Hagamos un trato —Paso mis brazos por su cuello —Cuando tu empresa se haya recuperado y haya superado como estaba antes, hablaremos de un pago, ¿te parece?
—Bien, pero firmaremos un contrato
—Bien —Me muestro mi meñique —Los tratos de meñiques pueden ser mortales
Sonrie y beso sus hoyuelos.
—¿Qué?
—¿Tienes miedo?
—No —Toma mi meñique con el suyo —Bien Alessandretti, trato
—Trato, señor Caruso
Me quedo sobre sus piernas, mientras se relaja. Toca la puerta y se abre Maritza entra y detras de ella Regina. No me muevo, pero ella se detiene.
—La pareja perfecta en un domingo por la tarde.
—¿Qué quieres Regina? —Pregunto
Me pongo de pie y me aliso la falda.
—No puedo darte el 80%
Suspiro y me siento detras del escritorio.
—¿Crees que soy misericordiosa o qué? —Me mira
Editado: 06.01.2025