- Hey, tu debes ser Aaliyah, eres mas hermosa de lo que me habian contado- se dirigio a mi con una voz que podria derretir a cualquiera, con un toque de picardia y acento britanico, no era un tono grave pero tenia ese tono seductivo. Lo acepto era el tipo de hombre que me encantaba, presumido, extranjero, ojos verdes, alto, un cuerpo bien formado y oh ese acento era lo que mas me gustaba. Solo teniamos 3 años de diferencia pero a diferencia de mi, yo era mas madura por lo menos eso es lo que yo creo aparte yo era la directora y el, nuevo subdirector, por lo menos deberia de respetarme mas. - Sr Gerald no sabia que habria un nuevo subdirector pero con gusto yo me encargo de capacitarlo- le conteste al Sr Gerald ignorando el comentario de Dario.
Dario hizo una sonrisa burlona lo cual me estreso un poco pero como estaba en presencia del dueño no le mostre mi molestia, -Si querida, de ahora en adelante el trabajara con nosotros, espero que los dos se lleven bien y se comporten- dijo el Sr Gerald refiriendose mas a Dario y luego me miro a mi. Despues de que se fue Dario y yo nos quedamos solos, el no quitaba sus ojos de mi, eso no se que me hacia sentir, no se si inseguridad o intimidada.
- Soy la directora de esta editorial, como me di cuenta ya sabes cual es mi nombre asi que vamos a lo importante..- no me dejo terminar de hablar cuando veo que esta solo a unos pocos cm su cara de la mia, no supe como llego hasta ahi, no lo dude ni un segundo y que lo empujo impulsivamente lo cual hice que el se fuera hacia atras y empujara a una empleada que llevaba una charola de cafes y todos se le cayeron encima de el. Todos nos miraron y la gente comenzo a hablar enceguida, no lo podia creer, mi reputacion de directora perfecta se acabaria por haber empujado al nuevo subdirector, creerian que soy mala o cosas asi y lo peor de todo es que no entenderian las razones, yo no queria pero el porque me hizo eso, es culpa de el, me asusto.
Estaba sobrepensando las cosas todo porque el mocoso no sabia lo que era espacio personal, no me lo hiba a permitir asi que hice lo que cualquier persona madura haria. - Perdon ¿estas bien?, disculpa fue un accidente, estaba pensando en otras cosas y me asustaste, perdon encerio no fue mi intencion - le dije inocentemente y le ofreci papel para limpiarlo y que la gente no piense mal de mi, el me miro incredulo, con mirada acusatoria, - no es cierto, lo hiciste adrede - me respondio, - no es cierto claro que no, mejor deja te ayudo a limpiarte - le conteste algo forzada, el parecia que se habia dado cuenta de mis intenciones pero no dijo nada, cuando pense que todo hiba a acabar.
- Si tanto querias tocar mis biceps y verme sin ropa me lo hubieras dicho, no habria problema no tenias que hacer que me tiraran cafe para quitarme - empezo a decir enfrente de todos, los empleados empezaron a mirarse unos a otros y algunos se reian, yo tenia la cara roja, no podia creer lo que acababa de pasar, solo lo habia empeorada, ese niño me las pagara lo juro.
- Sigue soñando - inocentemente trate de contestarle mientras me reia con los demas como si todo hubiera sido una broma, Dario me sonreia creidamente como si hubiera ganado y puede que por ahora pero pronto me encargare de que el sea el que me pida perdon.