***
Nunca te sientas menos que nadie, todo es posible si uno se plantea esa meta.
****
—¡Carajo! Tengo un millón de vistas en el blog. —exclama Mellea dando brincos en la cama.
—Realmente el tema que tocaste es muy bueno. —digo miro con dirección a Mellea la cual tiene los ojos brillosos.
—¿Qué te pasa?... ¿Mel?
—Las personas comentan que todo es gracias a tí y que yo solo te usé, ¿Tal vez tienen razón? —jalo su cuerpo y la siento sobre mi regazo, se limpia de manera rápida esas lágrimas rebeldes.
—Las personas siempre hablarán sobre la vida de otros.
—Si... Pero.
—Nada de pero Mellea, no sólo hablas de mí, los temas que tocas son diversos, lo que realmente hiciste en el último artículo es increíble preciosa. —susurro en su oído, coloco los mechones rebeldes de su cabello atrás de sus orejas.
Rodea mi cuerpo con su brazos y se pega más a mi pecho.
—El amor propio.
—La carencia de amor u sentimientos en sus vidas hace que tengan envidia por la vida de otras.
—Soy muy estúpida por estar llorando por estás cosas, últimamente me siento sensible con todo. —dice y se limpia las lágrimas con su manga de su camisa.
—No digas eso preciosa, no lo eres. —le digo mirándola fijamente.
Ella parece sentir vergüenza y tapa su cara con sus manos.
—Todos pasamos por esos lados sensibles.
—¿Por qué eres tan genial? —dice con un tono que apenas puedo percibir.
—Nací con ese don. —sonrió ante lo que digo y ella también lo hace.
Me encanta verla sonreír se ve de una manera tierna y divertida otra faceta es verla enojada, sus facciones son duras y difíciles de manejar.
—Hoy iré a ver a tu hermana, me encanta los consejos de moda que dice de la manera más fácil de entender.
—No quiero que estés sola Mellea, ¿Puedo contratar a un guardaespaldas?
Su sonrisa se amplía y toca mi mejilla, deja un sonoro beso en mis labios.
—Lo haré yo Jassel, ya conseguí el número de una agencia, sé el peligro que corro ahora y no estoy tan loca como para andar sola.
—No escatimes en gastos en el personal, si necesitas apoyo estoy yo.
—Lo sé Jassel, pero ahora no necesito tu apoyo económicamente.
Se levanta de mis piernas y me toma de las manos.
—¿Deberíamos ir a ver cómo quedó la casa?
—No creo que sea buena idea Mellea.
—Algo pudo haber salido bien, nada perdemos si no nos vamos.
Ella mueve las manos de una lado para otro.
—Esta bien.
Siento como mi celular vibra en mi pantalón, lo saco y veo el nombre de los dos infiltrados en la casa de Vadim.
<Konstantin está vivo, no murió.>
¡Mierda!
¡Y yo que iba a llevar flores a su tumba del desgraciado!
—¿Qué pasó?
—Nada Mel, solo era sobre el tema de la presentación en la galería.
Mellea sonríe y da brincos en su sitio.
—Yo estaré ahí apoyándote.
Los recuerdos de otra persona acompañando me a las presentaciones inundan mi mente en segundos, cierro los ojos con fuerzas y disimulo.
¡Maldición!
—¿Te gustan las poesías?... Yo realice una en especial para la presentación de mañana ya que es tu regreso después de nueve años.
Después de nueve años, un largo tiempo que tome ese descanso que pensé que duraría poco.
Una poesía sonaba espectacular, sin embargo, la voz de Gabrielle empezó a sonar en mi cabeza con su poesía que relato esa noche.
—Lo harás genial. —susurro con tranquilidad.
<Ahora solo son recuerdos>
***
—Te dije que no todo estaría destrozado, parece que está puerta sigue intacta.
Mis autos relucen cuando abro la puerta del sótano, en estos momentos mi acto poco inexplicable hace que ame mis tonterías de borracho.
Paso mis manos por todo el auto negro el cual luce en perfecto estado tal cual como lo deje, aunque con algo de polvo cubriéndolo.
—Te dije que toda la casa no estaba destruida.
—¡Oh, si!
—Tienes muchos documentos aquí, deben ser importantes ya que este cuarto es seguro por lo que veo.
—Quise hacer un búnker el cual fuera fuerte y seguro.
—Si que lo es.
Unos papeles se caen de los cajones y Mellea se arrodilla para ordenar los papeles.
—¿Por qué hay una foto de Gabrielle aquí y está con una fecha de este año?
Eso me confunde, camino hacia ella y tomó los papeles en mis manos, la persona que está en esa foto es Gabrielle y en la esquina de esa fotografía sale la fecha en la que se tomó, llevo las manos a mi boca confundido.
—Lograron entrar al sótano y dejaron esta foto.
—¿,Por qué lo harían?
—No lo sé Mel, pero están intentando cualquier cosa para generar más caos..
—Hablare con Andreas.
—¿Qué tiene que ver Andreas aquí?
—Tiene espías en el bando del ruso creo que será de mucha ayuda su aporte.
—Es sólo una mentira Mellea, no creas en fotos falsas, pudieron haber puesto la fecha.
—Debemos seguir esto Jassel.
—No, realmente no deseo hacerlo y hasta aquí llegamos, es hora de irnos, más tarde mandaré a alguien para que recojan mis autos.
Ella sostiene mi brazo y me mira a los ojos.
—Lo siento, pero averiguaré sobre está foto.
***
Alessia y Andreas tendrán su propio libro. ¿Les parece buena idea eso? 😊
¿Foto de Gabrielle?
Pudo ser un edit
Editado: 18.01.2021