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CAPITULO 7
JUN
Mi primer recuerdo de niño es… ver a mi hermana mayor y el que sería mi mejor amigo peleando por ver quién me cargaba primero, desde la infancia siempre he presenciado sus constantes discusiones, algunas por cosas que a nuestra edad parecía importantes otras en verdad muy estúpidas, aunque el día de hoy pienso que todas sus discusiones son estúpidas
A medida que íbamos creciendo, igual el odio que se sentían mutuamente, aunque eso era lo que afirmaban ellos, pero yo sé que en el fondo se preocupan mutuamente, también he sido testigo de todas las cosas buenas que han hecho uno por el otro sin que se den cuenta, por ese motivo siempre he tenido la esperanza de que ellos puedan terminar siendo amigo y tal vez algo más…pero estoy pidiendo demasiado, eso jamás va a pasar
De igual manera ahora que soy un adulto tengo otras cosas de que preocuparme además de estar detrás de esos 2 y sus peleas, una es mi empresa que a pesar de que sé que mi hermana me está ayudando, no le puedo dejar toda la responsabilidad a ella, aunque es muy cierto que confió en ella, debo decir que los métodos que utiliza para conseguirlo no son muy comunes pero dar resultado así que mientras no haga nada ilegal tengo que buscar métodos para apoyarla
Por eso hoy me encuentro con uno de mis mejores trajes (escogido por mi hermana) en la entrada de uno de los restaurantes más elegantes y caros de la ciudad (escogido por mi hermana) esperando a la que será una nueva y posible socia en un nuevo proyecto de mi hermana y claro yo debo supervisarla
- Hola Siento llegar tarde- volteo para ver a la dueña de la voz y mis ojos se abren de golpe y mi corazón empieza a latir con fuerza, Isabella cargaba un vestido verde fosforescente de tiras y escote de corazón brillante, el vestido era largo hasta el piso pero con una pequeña abertura en la pierna, tenía unos salsillas de diamantes largos que le quedaban hermosos con su pelo amarillo corto y hacia brillar sus hermosos ojos marrones claros – Yuma ¿estás bien? – regreso a la realidad al escuchar su voz de regreso
- Si todo está bien ¿entramos?- ella asiente y entramos, una vez dentro nos guían a un salón privado para 2 cosa que haga que mire extrañado al mesero – disculpe creo que se ha equivocado, nosotros vamos a una cena de negocio para 3- el mesero revisa y me mira
- Usted es el señor Yuma con la señora Isabella – yo asiento y él sonríe- entonces no hay ningún error señor este espacio ha sido reservado por la señorita zahorí
Mi cara se descompone automáticamente en ese momento llega un mensaje de mi hermana “espero que disfrutes, me gusta como mi cuñada, no lo eches a perder hermanito ;) posdata: también reserve un cuarto en un hotel por si quieren disfrutar más la noche” mi cara se pone automáticamente roja, rayos me descubrió además ¿cómo se le ocurre decir eso? Miro a Isabella que está viendo algo en su teléfono e igual que yo esta roja como un tomate ¿será que zahorí también le mando un mensaje?
- ¿Isabella?- ella sobresalta cuando la llamo cosa que hace que me ponga más nervioso- si te sientes incomoda cenando solo conmigo nos podemos ir- ella desvía la mirada
- No está bien, podemos quedarnos, si tu deseas…- mi corazón late con fuerza así que solo asiento
Ambos entramos al espacio reservado, ella se sienta al frente de mí y después de mirar el menú esperamos que nos traiga la comida
- La verdad estoy sorprendida, no sabía que zahorí tenía un hermano- una media sonrisa apareció en mi cara
- No me sorprende solo pocos lo saben, ella desconfía mucho de la gente- ella asiente- por eso me sorprendió que te comentara y tu ¿cómo conociste a mi hermana?- ella toma un poco del vino que nos sirvieron antes de hablar
- Pues resulta que me había ido del país por un trabajo que me ofrecieron pero resulto que era mentira, termine enredada en un tráfico de humano, zahorí me salvo cuando la policía entro en fuego contra los responsables, me cuido, me alimento y me dio dinero para mis gastos médicos y después para volver a casa- con cada palabra que sale de su boca me quedo cada vez más sorprendido
- Pero todavía no entiendo ¿cómo es que mi hermana término trabajando con la policía? Tengo muchas dudas –ella me mía extrañada
- Ella nunca te comento nada- niego- parece que zahorí es una chica de secretos- nos empezamos a reír – la verdad no se mucho al respecto solo sé que zahorí ha trabajado con la policía en diversos casos, no fui la única que ha salvado pero creo que deberías hablar con ella sobre eso…- asiento dándole la razón pero no puedo evitar quedarme sorprendido de las cosas que ha hecho mi hermana ¿qué otras cosas no se de ella?
Pasamos toda la noche hablando y riendo, jamás pensé en tener una cita con Isabella y mucho menos que ella y yo tuviéramos tanto en común, después de comer la subí a mi carro para llevarla a casa, cuando llegamos me baje del carro para acompañarla a la puerta
- Gracias por la cena me la pase muy bien, lástima que no pudo venir zahorí – le sonrió
- Tal vez para la próxima podamos volver a cenar pero esta vez solos ¿si tú lo deseas?- mi corazón late con fuerza y mi cara se pone algo roja al igual que la de ella
- Eso me encantaría – suelto un gran suspiro de alegría
- Bueno entonces creo que te veré mañana en el café...- ella asiente y mientras yo regreso a mi carro sin querer me tropecé con la acera
- ¿estás bien señor Yuma? – yo asiento con toda la cara roja
- Si estoy bien e Isabella ¿podrías dejar de llamarme señor? Puedes llamarme solo Yuma – ella sonríe
- Hasta mañana Yuma – con eso entra a su casa