Capitulo 2: El Héroe y la chica elfo

''Eres el indicado para esta misión, pero eso no significa que no puedas perder la vida si pierdes mi protección divina'', esas son las palabras que escuche en aquel sueño, no entendía mucho de lo que hablaba y tampoco cual era esa protección divina la cual podía perder, pero no entendía tampoco el echo de porque estaba siquiera aquí, a pasado una semana desde que llegue a este mundo, el señor Solrak no solo me dio el trabajo de mesero en la cantina, sino que también me permitió quedarme, mi habitación esta en el ático, y aunque no lo parezca es muy cómodo para mi.

Al principio fue algo difícil el hacer de mesero ya que no me conocía muy bien los pedidos ni el lugar de la mesa, pero poco a poco me fui acostumbrando, la mayoría de los clientes eran siempre soldados que volvían de viajes o misiones fuera de la ciudad, pero usualmente también venían a comer y beber guardias de esta ciudad, la verdad es que la mayoría de los aventureros me tomaban como a un demasiado joven para el trabajo, pero no les molestaba que les diera sus pedidos, me llamaban el pequeño ángel de la cantina, al principio me molestaba pero me empecé a acostumbrar a sus palabras, de echo, me llegue a enterar que Yukue tenia un apodo parecido en su tiempo de mesera, digamos que eso hizo que me acostumbrase mas rápido al saber que no era el único.

El Sr Solrak es el cocinero así que pasa casi siempre en la cocina, cada que acabo mi turno me sirve un pequeño plato de lo que parece ser curry, me encanta comer su comida, tiene un sabor muy increíble, Yukue es la que sale de compras cuando Solrak necesita ingredientes o algo parecido, la verdad ya me e acostumbrado a este trabajo.

-Oye, Sato, hoy puedes tomarte el día libre, hoy vamos a cerrar mas temprano asi que puedes ir a visitar el lugar si es que quieres-

-Gracias Sr Solrak, creo que podría ir a la biblioteca pero antes buscare algo de mi habitación--No te esfuerces mucho el día de hoy, aun eres joven, disfrútalo-

Como de costumbre el señor Solrak era amable conmigo, luego de la charla subí rápidamente al ático, me saque el delantal que uso para el trabajo y busco la pequeña piedra roja, no entendía el porque pero parte de mi sentía que era mejor llevarla conmigo a todas partes, luego de tomarla la guardo en el bolsillo de mi pantalón y bajo del ático para poder ir hacia la biblioteca.

-Hoy parece que habrá otro día soleado-

Rápidamente me dirija fuera del local hacia la dirección de la biblioteca, esta semana estuve yendo seguidamente así que me aprendí el camino fácilmente, cada día trato de ver si puedo encontrar algo referente a porque estoy aquí pero parece que soy el primero en llegar a este mundo, de por no decir que ese echo ya es raro en si fui traído por un Dios, parte de mi investigación es también de buscar algo sobre la piedra que vino conmigo porque la verdad creo que si averiguo de esta piedra podre resolver mas fácilmente el misterio de mi llegada a este mundo.

Una vez llegue a la biblioteca comencé a buscar en alguna parte donde no halla buscado anteriormente, comencé a leer como siempre cerca de un rincón del fondo, donde me sentía mas cómodo, poco a poco mientras mas buscaba algo que me sirva por fin había encontrado algo, y no solo era información valiosa que me sirviera, sino que trataba de esta piedra que llevo conmigo, cuando empecé a leer pagina por pagina no creía que era lo que decían.

Al parecer no era la única piedra existente ni el único tipo, en este mundo existen 7 Dioses que componen el poder absoluto, de entre esos dioses se encuentra el Dios Carmesí, el que posiblemente me trajo a este mundo, según lo que dice, los 7 Dioses representan habilidades dependiendo que Dios sea, entre esos están el fuego, la tierra, el aire, el agua, la luz y la oscuridad, el ultimo se desconoce de que puede representar, tal parece ser que el Dios Carmesí representa el fuego y esta piedra es algo así como una protección divina de este.

-Así que esta piedra es la protección divina que no debo perder...- Susurre para mi.

Por lo que decía el libro, no soy el único con protección divina, según dice que solo los mas fuertes obtienen protecciones divinas y también según su habilidad será la de uno de los 7 dioses que existen.

-¿Asi que dependiendo de tu habilidad recibirás una protección divina?, pero porque tengo una-Susurre para mi.

Comencé a pensar que ese tal Dios Carmesí se equivoco al darme dicha protección, no tengo ninguna relacion con el fuego, así que porque tendría siquiera una habilidad así, además, ¿a que se refiere con habilidad?, tras una respuesta se me vino otra pregunta, pero de todas formas esta información me ayudo a entender que era esta piedra y porque esa voz me dijo que no la puedo perder, pero que pasaría si la pierdo, la verdad no quería saber la respuesta a eso.

Estaba tan concentrado con el libro que no me di cuenta de que me estaban observando a lo lejos, no tarde mucho en percatarlo, sentía una sensación rara por mi espalda, mis nervios estaban completamente activados, trate de disimular que no me había dado cuenta de que era observado y trate de observar con cuidado de donde era, no podía ver absolutamente a nadie cerca observando, de repente sentí un pequeño viento que iba hacia mi nuca, los nervios se me pusieron de punta haciendo que me levantase rápidamente del lugar, luego de que pasase eso escuche una voz que venia de delante mío.

-Así que los de tu clase puede sentir el calor a su alrededor, es increíble que así puedas sentir la presencia de otras personas a través el calor que provocan, además, es adorable que puedas sentir el calor de una mujer de a voluntad propia-