Contemplo a la mujer que amo profundamente dormida, su cabello rojo, su piel blanca y delicada, sus labios gruesos y rojos, su belleza indescriptible, no me he alejado de ella desde que todo empezó; finalmente esas gemas no están más en el mundo.
Fueron un error y dañaron demasiado, Selene hizo posible muchas cosas, incluso más de lo que esperábamos.
Muchas vidas fueron restauradas y lo permití porque se lo debíamos.
Aún no se cuando despertará Perséfone, el tiempo que pasa conmigo termina y deberá volver con su madre pronto, no sé como le voy a explicar ésto a Deméter.
Soy el Dios del inframundo, todos me temen, hago temblar hasta al hombre más valiente y sin embargo heme aquí, esclavo de una diosa pelirroja, con ferviente deseo de besarla, de acariciarla y protegerla aún cuando ella no me desea cerca.
Los pasos apresurados de las moiras llaman mi atención, debieron irse hace tiempo, ya nada las retiene aquí. Sé que se trata de ellas porque son de las pocas que pueden moverse a su antojo a mi palacio.
— Mi señor. — dicen al unísono. El que me hablen en ese tono no es algo bueno, generalmente dice cosas sin sentido cada una logrando confundir a todos.
— Sucede algo. — las observo a las tres que se miran entre sí, algo nerviosas, siendo mis hijas se que muy pocas cosas pueden alterarlas.
— Es su esposa, me temo que su alma quedó atrapada en el cuerpo que usted le dió.
— ¿Cómo es eso posible?
— Selene reinició todo la cantidad de almas que dejaron el inframundo eran incalculables y entre ellas la de su esposa también escapó pero ésta vez ella no sabe que es una diosa, en realidad cree que es una humana común.
— ¿Puedo traerla? — digo buscando tocar su mano y sentirla conmigo, pero no hay nada.
— No puede, debe ir usted mismo por ella. — responden
— Hablas de ir al mundo humano. — No he pisado la tierra jamás, la creación de Zeus es intocable, sólo me encargo de las almas que vienen al tártaro.
— No hay otra opción si desea recuperarla.
Y con esas palabras empieza mi nueva tarea, nunca antes había dejado el infierno, pocas veces visité el olimpo, salvo por casos de urgente naturaleza pero ahora la razón más importante de todas me obliga a salir de aquí.
Recuperar a mi esposa.
NOTAS DE AUTORA:
upsss
No me resistí
Aún no sé si será libro, aunque no tengo día, ni horario, ni fecha en el calendario.
jejeje
Pero me gustaría hacer, todo depende del amor que reciba el extra.
Gracias por leer :)
Nah es broma si es un libro se llama El deseo de Hades perteneciente a mi saga "Batalla de los dioses"