Narra Luna:
Me encontraba en mi oficina con unos papeles muy importantes sobre asuntos de unas manadas en Asia, mi esposo esta resolviendo unos asuntos de su manada y nuestro hijo mayor lo esta acompañando ya que es él siguiente en ser el alpha de su manada, nuestra manada. Aun recuerdo el día en que me presente ante ellos y les explique quien era yo, todos se sintieron tan honrados al verme por primera vez, también les había explicado sobre las manadas que se crearían, algunos se vinieron con mi esposo y conmigo para vivir y reinar desde aquí y otros fueron divididos en las actuales manadas de ahora, una hermosa familia dividida en varias partes.
Salgo de mis pensamientos al darme cuenta de que alguien está tocando la puerta, digo el típico pase y la persona que estaba detrás de la puerta lo hace, no me esperaba tan grata sorpresa, mi sobrino me esta visitando, no sé la razón pero la quiero saber, quiero saber que lo trae por aquí después de tantos años que no nos vemos. Creo que no veo a mi sobrino desde que deje de visitar a su hermana.
-¿Qué haces aquí, sobrino?- le pregunto al instante, la curiosidad me estaba matando y no quería que su padre lo usara para su maldito beneficio como siempre.
-Tía, vengo a pedirte ayuda- me dice con notable preocupación en la voz.
-¿Que pasa? ¿por que estas así?- ahora soy yo la preocupada.
-Tía Luna, mi hermana esta en peligro, su lado demoníaco esta empezando a salir otra vez, y esta vez temo que sea incontrolable- me asuste de inmediato, a mi sobrina le pueden pasar muchas cosas malas si eso llega a pasar, lo bueno es que ella tiene el control de ese lado- Hace unas noches se descontrolo ya que uno de tus hijos rechazó a su mejor amiga. Tía, esa chica es mi otra mitad y me duele tener que fingir con ella, ¿porque me la diste como pareja?- me dolió la forma en que lo dijo, ya que el tiene que ocultar su olor a demonio para que no lo echen de la manada.
-Sabes que llevas tiempo pidiendo a alguien con quien estar, así como Casian me ha pedido que tu hermana sea solo de el, pero no puedo dejar a tu hermana en sus manos, Jayden es el indicado, el no le haría daño si se llega a enterar de lo que es tu hermana, a ella le dolerá mucho saber que toda su vida fue engañada, ni siquiera Erick sabe lo que es ella- le digo y el asiente, creo que tendré que hablar con mi sobrina sobre estas cosas, solo tengo que esperar un error de mi hermano y listo.
Mi sobrino, Alex y yo nos quedamos platicando un rato, me comento que su hermana estaba en cama y duraría un tiempo así. Hablamos hasta que mi esposo e hijos llegaron, siempre me gusto estar con mis sobrinos, ellos y mis hijos siempre se llevaron bien y creo que voy a tener que enviar a mi hija menor con Julia, a ver si así deja de ser tan rebelde, aparte de que ella misma lo esta pidiendo desde hace tiempo.
A mi hija Lina y a Julie siempre les gusto estar juntas, ya veo que fue un gran error de mi parte el dejar a mi sobrina sola con su madre, ellas necesitaban de mi, y mas cuando Julia era una niña pequeña e ilusa, soñaba con que su papá cambiara, pero con el paso de los años nada paso y ahora ella esta decepcionada de su padre, le costo mucho confiar en Erick y ahora le cuesta mas confiar en las demás personas... menos en Jayden, ese chico si supo como ganársela.
Lo peor es que no sabe que lo mismo paso con su prima, la hija de mi hermano mayor Lusian, el aun no supera la muerte de su hija Sol, ese es el nombre que el quería para su única hija, mi hermano no sabe sobre nuestra sobrina, no sabe que ella es la viva imagen de la suya, aunque mas poderosa que cualquier Deidad, es incluso mas poderosa que mi padre, y el lo sabe, pero la ama demasiado como para hacerle daño a su pequeña de ojos negros.
Mi padre conoce muy bien a Julia e incluso esta tratando de protegerla de mi hermano Seth, mi hermano no sabe lo que hace mi padre por ella y si intenta tan solo tocar a mi sobrina, el podría quedar en el olvido y yo no quiero eso, a pesar de todo, yo sigo amando a mi hermano, sé que a el solo lo mueve la envidia y la codicia por tener la Luna y gobernarla, pero el no sabe que la luna sin mi no va a continuar con ese brillo que todos aman, yo soy la única que le puede dar luz a esa enorme roca, pero al parecer eso a el no le importaría porque lo único que el quiere es poder y nada mas.
Después de pasar un rato muy agradable con mi sobrino, hijos y esposo, todos se retiraron a sus deberes, Alex había ido a checar en su hermana, me explico todo lo que paso cuando se salio de control por lo de su hermanastra, hace unos días que se mantiene tranquila, pero que ahora esta en cama por una terrible noticia sobre uno de sus amigos, me hace sentir mal por no estar a su lado en estos momentos.
Estaba en mi recamara pensando en como ayudar a mi sobrina hasta que unos enormes brazos me sacan de mis pensamientos. Sabia de quien se trataba y me sentía tan feliz de que continuara de esta manera, cada día me enamoraba aun mas, así ha ocurrido desde hace siglos.
-¿En que tanto piensas, mi hermosa Luna?- me dice con su voz ronca, aun no puedo creer que Damien siga a mi lado después de tantos siglos.
-Pienso en que debo ayudar a mi sobrina con su problema- le digo con toda seriedad y preocupación- Así como también pienso en enviar a Lina, para que me deje en paz de que quiere irse a vivir con mi hermana en la Tierra- veo como su cara cambia y se que no le gusta la idea, Lina es como la consentida de todos, así como también lo es Julia, la diferencia es que a mi sobrina no le gusta que la consientan.