Sempiternos: El Jinete

Capítulo 26: lazos tensados

Tiamat abrió los ojos y se vio nuevamente de pie, Sigurd, Génesis y Egberto o en nuevo caso Allerick le observaron sin comprender que acababa de ocurrir, la joven observo sus brazos y manos temblando, creyó que caería nuevamente pero no fue así, esa vez quien decía ser su viejo amigo logro tomarle en brazos y llevarle hasta uno de los sofás para que se recostase.

—Gen, tráele un té por favor, está muy pálida —Dijo el  hombre sentándose en cuclillas frente a ella y por primera vez en mucho tiempo logro ver autentica preocupación en su rostro

—No sé qué ocurrió —Se llevó la mano hasta la frente intentando apoyarse en el codo pero no lo logro

—No por favor, será mejor que te recuestes, puede ser contraproducente —Escucho los pasos de su amiga alejándose en busca del té que Egberto le pidió —Sigurd ¿Tienes alguna idea de que fue lo que paso? — Pregunto mientras apoyaba la cabeza de la joven sobre uno de los respaldos con cuidado

—Su especie es prácticamente un misterio, no sé qué respuestas dar, créeme, no tengo una

—En menos de un parpadeo me encontraba… no entiendo — levanto su mano señalando el sitio e intentando no perder el conocimiento —El acaricio su mejilla preocupado

—Ti, por favor, no te desmayes, no sabemos que fue todo eso y no quiero perderte, no de nuevo —pasaron algunos minutos antes de que Génesis regresara con la taza de té o podría decirse que a mitad de esta porque gracias a el pánico que sintió que le hizo correr la otra parte se quedó en el suelo, Allerick tomo el té y se lo entrego ayudándole a dar pequeños sorbos

Génesis no daba crédito a todo lo que les estaba ocurriendo, ahí se encontraba Allerick, frente a ella, alguien a quien en ocasiones considero solo un producto de la gran imaginación de su mejor amiga estaba ahí ayudándole a tomar té. Su padre le observo para después de tomarle del brazos y pedirle que le acompañara afuera, ambos sabían que no había porque preocuparse, su amigo estaba para cuidarle y no le dejaría sola.

—Allerick Alastair de Celeros —Fue lo primero que dijo el Guardián en cuanto tomaron asiento tras un estante — Siempre creí que ese tipo era producto de una imaginación muy hiperactiva y míralo ahora, sentado con ella cuidándola

—Si tu estas así no imagino como esta ella, solo mírala, la pobre no puede ni moverse, ni siquiera es capaz de mirarle a la cara y ambos sabemos que es porque… — Se mordió la lengua intentando callar la estupidez que estuvo a punto de cometer —Bueno, ya sabes, fue su mejor amigo, lo único que tenía cuando sus poderes comenzaron a manifestarse

—Eso me preocupa aún más, conoces las reglas

—Lo sé, lo se… nada de lazos afectivos con Sempiternos, ella es muy consciente de ello pero te pido por favor que por el momento no se los arruines, acaban de reencontrarse después de tanto tiempo, tantos años… deja que limen sus asperezas y sean felices aunque sea por unas horas

Sigurd asintió mientras observababa a ambos jóvenes y aunque trato de ocúltalo sintió mucha preocupación porque sabía que había algo más ahí que una simple y vieja amistad y lo vio en los ojos de ambos.

Paso cerca de una hora antes de que todos en la habitación comenzaran a ser vencidos por el cansancio y el sueño, el último en hacerlo fue Allerick quien tuvo la oportunidad de conversar con Sorin que al ver a la joven dormida en la silla con los brazos y la cabeza apoyados sobre la mesa decidió llevarla hasta su habitación en brazos, Dorian enseguida ingreso pero no intervino, algo dentro de él le hizo saber que Tiamat se encontraba en las manos correctas pues lo vio en el rostro del hombre, Allerick no se percató de la mirada del ex novio de la joven, su atención estaba completamente entregada a su vieja amiga y preocupado de que no estuviese durmiendo bien tomo la decisión de tomarla en brazos y llevarle hasta su recamara; Sigurd fue despertado por Dorian para darse cuenta de que se encontraban solos en la sala, se preocupó e intento ir en búsqueda de los jóvenes pero el guardia le tranquilizo haciéndole saber que era lo que había ocurrido y frotándose los ojos se marchó a buscar a Tiamat.

El Guardián se detuvo en seco al ver a Allerick y a Sorin sentados en el suelo charlando con las espaldas apoyadas sobre la pared viendo directamente hacia las habitaciones de las jóvenes y no se alertaron de su presencia hasta que este carraspeo.

—Jóvenes, creo que deben regresar a sus habitaciones, ha sido una noche bastante larga y… el cansancio no ayuda, yo cuidare de ambas

—Lamento llevarte la contraria Sigurd pero no me moveré de aquí hasta saber que Ti está bien, así tenga que clavar mis pies al suelo —El Guardián observo a Sorin quien se encontraba algunos centímetros detrás del Sempiterno

—Solo charlaba un poco con el… ya me voy — antes de marchase se detuvo frente a el —Esta bien ¿Cierto? Solo se durmió por el cansancio — Asintió y al saberlo se sintió con tranquilidad suficiente para retirarse a descansar

Allerick volvió a sentarse con su antebrazo apoyado sobre la rodilla  y la vista a la alfombra, tratando de analizar los patrones de diseño para no dormirse.

—Deberías traer una de las almohadas de su cama para que no te lastimes la espalda —La comisura de su labio se elevo

— Me eh enfrentado a los Wart, Tiamat casi me rompe la barbilla, creme, un suelo duro con alfombra no me afectara, estaré bien



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Editado: 06.07.2023

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