Señor Presidente

013) Señor Presidente

Capítulo:13 

Tom jones.-it's not unusual

Megan sé levantó con energía era la primera vez en meses que sé encontraba feliz y con energía al no estar Erick en la casa. 

Pensó en los planes que ella haría sin Erick, y como disfrutaría su vida al máximo, él día iba hacer hermoso. Era como volver al pasado y no estar casada con él presidente Erick Morgan.

Megan estaba tratando de desayunar, era una gran cantidad de alimentos para ella.  Era extraño comer sola, y no poder hablar o discutir. No sabía cuánto tiempo pasaría hasta que Erick regrese, así que simplemente debía vivir cada momento su vacaciones sin él. 

«Me pregunto como estuvo su viaje», pensaba Megan, mientras partía su filete de res. 

Megan pensó en Erick y en su viaje, él no la había llamado, al menos para decir que su viaje estuvo estupendo. Era un hombre frío, malvado y controlador que no era capaz de llamarla para decirle que el avión aterrizó bien.

«¿Quién te extraña? Yo no», pensó Megan.

¿Por qué se preocupaba por Erick? «cómo que no sabes» «él es tú esposo y debes preocuparte por él» «Además debes disculparte lo acusaste en que te humilló», «A lo mejor quiere que lo llames» «y si él está disfrutando con una chica», pensó Megan.

«¡Si lo haces estás muerto Erick Morgan!».-exclamó Megan.

-Señora Megan, ¿Sé encuentra bien?.-le Preguntó Cassandra, la nueva cocinera.-¿Sé siente mal?.

-No, estoy bien Cassandra, Por cierto. ¿Erick llamó?.-le Preguntó Megan.

-No, señora Megan, él señor Erick no llamó

Megan asintió, o al menos lo intentó, Erick no había llamado y le preocupaba que algo le hubiera pasado. Comenzaba a pensar en lo peor.

-Señora Megan, entiendo que esté muy preocupada por él señor Erick pero estoy segura que él la llamará.

-¿Preocupada?.-le Preguntó Megan.-¿Quién está preocupada por ese malvado?.

-Su boca lo dice pero su corazón no dice eso.-Cassandra era una chica de 23 años, que al igual que familia de generación en generación han trabajado para la familia Morgan.-siendo sincera usted es más amable y divertida que la señorita Kristine.

-Gracias por tú comentario

-De nada, entonces me retiro y volveré a la cocina.

Megan asintió con una sonrisa.-Está bien

«Voy a disfrutar al máximo y tú no vas arruinar mí felicidad, Erick», pensó Megan.

Toda la tarde Megan sé encontraba en la calle disfrutando de que Erick no estaba para controlar su vida.

-Señora Megan, es hora de irnos.-le informó Max, su guardaespaldas personal.

Megan sé detuvo un instante y luego observó al rubio guardaespaldas personal de ella.-¿Qué dijiste?.-le Preguntó.-¿Me estás controlando?.

-Señora Megan, tiene cinco minutos para entrar a la limusina.

-No voy a entrar

Doce minutos después, Megan sé encontraba en la limusina observando todos los árboles que aparecían desde el cristal de la limusina.

-Señora Megan, ¿Tiene planes para mañana?.-le Preguntó Max.

Megan lo miró fríamente, no podía creer que ese guardaespaldas que Erick contrató fuera capaz de entrarla a la limusina a la fuerza.

-¿Te interesa saber qué haré?.-le Preguntó Megan.-lo que quisiera hacer es ilegal y puedo ir a la cárcel, ¿Quieres saber qué deseo hacer?.

-No, está bien señora Megan.

-Eso pensé

Max, él guardaespaldas personal de Megan, sabía que ahora mismo la esposa de su jefe estaba enojada. Él sabía muy bien que Megan con la forma de como le habló era capaz de matarlo y fingir como si nada a sucedido.

Después de una hora, Megan sé encontraba en la sala viendo una película de terror con algunos empleados de Erick.

-Viene la mejor parte.-Megan estaba comiendo palomitas de maíz y bebiendo una soda naranja.-oh por Díos.

-Señora Megan, él señor Erick llamó y dijo que adelantó su viaje dijo que hoy regresa.-le informó Cassandra.

-Cassi, estamos viendo una película no puedes hablar.-le contestó Megan.

-Está bien, señora Megan.

Megan estaba sorprendida y enojada, Erick no había llamado y ahora regresaba a la casa como si nada hubiera pasado.

Eran las 7:30 pm, Megan estaba aún enojada y no había mencionado una sola palabra desde que Cassandra le había dicho que Erick regresaba.

Megan iba caminando por la sala y sintió unos pasos detrás de ella, cuando sé detuvo pudo ver que esos pasos provenían de Erick Morgan.

-¿No vas a saludar a tú esposo?.-le Preguntó Erick, con una sonrisa sarcástica.

Él pudo ver como Megan estaba dispuesta a gritar y luego tapó la boca de su esposa.-antes que digas algo no tenía señal.




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