45. Uno que otro sentimiento

El silencio inunda la habitación, Tracy se deja caer abruptamente en el sillón más cercano a ella y Lucian asiente, como si aún no reaccionara del todo a la noticia. 

― ¿Y quién más sabe sobre tu embarazo?― miré a Tracy removerse incómoda en su sitio.

― Lucian fue el primero en enterarse.― habla ella.― Noah también le dijo a Callum y cuando fui a despedirme de Joanne y Eliot, antes de partir a Francia, se lo dije a ella.

Así que, era la última en enterarme de su embarazo. Una puntada de decepción invade mi sistema, suspirando, asiento con una sonrisa. Después de todo, fue sólo una noticia...

―Muy bien.― la voz de Jake nos sobresalta a todos.― La doctora Harlem dijo que debías mantener reposo, al menos, por este fin de semana.― nos mira, como si se hubiese dado cuenta de que acaba de interrumpir algo.― También habló de unas vitaminas y volvió a repetir lo de pasar malos momentos.― se mantiene alejado, pero me sonríe con aquella sonrisa reconfortante.― Así que, los porotitos están en perfecto estado.

Sentimos un ruido que provenía de la cocina, ahí, oculto entre la pared y el umbral de la cocina, se asomaba la calva cabeza de Eliot.― Pss.― hizo otro sonido, llamando a Jake.― Nino, ¿mi mamá está mejor?― susurra en un murmullo audible para todos los presentes.

Jake le sonríe y asiente.― En perfecto estado.― dice mi amigo mientras acaricia su cabeza.

― Genial.― Eliot sale de su escondite y camina hacia mí.― ¿Quieres que te dé de comer? Puedo traer tu comida hasta aquí.― dice con una sonrisa.

― Me encantaría.― le sonrío, Eliot besa mi mejilla con mucho cuidado, como si de alguna manera, creyera que podía romperme en cualquier momento.

La puerta es golpeada y Lucian va abrir.― ¿Qué haces aquí? Pensé que estarías con los mellizos.― habla Lucian mientras vemos como Callum entra.

― Sara se llevó a los niños a la casa de Robert.― sisea de mala gana.― No entiendo porqué tiene que ir hacia allá.

― Simple, porque Robert y su madre han estado en todo momento con Sara.― le respondo a modo de saludo.

Callum parece avergonzado por aquella indirecta que acabo de decir, sin embargo, simplemente, asiente.― Tienes razón.― se gira hacia Jake e intercambia una sutil pero perceptible, mirada a Lucian.― Soy Callum, amigo de Lucian.― le tiende la mano a Jake, quien acepta sin titubear.

― Soy Jake Dallas, amigo de Elizabeth y padrino de Eliot.― responde con el mismo tono en el que le había hablado Callum.

―Un placer.― Le sonríe Callum.

―Lo mismo digo.― le responde Jake.

Eliot se suelta de mi lado y camina hacia Callum.― Hola, tío.

―¿Qué tal, pequeño?― besa la frente de mi hijo.

― Nino, ¿Te conté que Lita me regaló un rompecabezas?― pregunta Eliot con entusiasmo, Jake niega.― Pues lo hizo, pero, ¿Me ayudas a armarlo?

Jake le sonríe.― Yo encantado.

―¡Genial!― Exclama mi hijo.

― Por cierto, ¿Te quedarás a cenar?― Le pregunto a Jake, con esperanza, pues sabía por su mirada que no debe estar sintiéndose cómodo con toda la situación.

― Me encantaría.― responde Callum.

Sonrío.― Le hablaba a Jake, de cualquier manera, no creo que alcance para ti.

Callum ríe.― Cierto, había olvidado que ahora tenemos a más bocas que alimentar.― dice en tono juguetón.― Porque Tracy vale por dos.

Sonrío y asiento.― Tienes razón.― miré a Jake quien me asintió en respuesta a mi pregunta.― Por cierto, si te puedes quedar, era una broma.― le dije a Callum, él me guiña y asiente.

Veo como Eddith sale de la cocina y mira a mi alrededor, su mirada se posa en la mía y me observa con preocupación.―¿Cómo te encuentras?― pregunta mientras se acerca para colocar una fría mano en mi frente y correr el cabello que me caía sobre ésta.

―Bien.― dije cerrando los ojos al relajarme con su suave mano acariciando mi cabello.

― Te dije que debías tener cuidado.― susurra con preocupación, ya que estuvo al tanto de mi desmayo y de la visita de la Doctora.― ¿Cómo está?― pregunta en modo de saludo a Callum.

―Bien, gracias, y usted, ¿cómo ha estado?― pregunta en respuesta Callum.

― Excelente.― sonríe.― Bien, la cena está lista, pasen al comedor.― dicho esto, sale de la sala y vuelve hacia la cocina.

― Te ayudo.― Lucian se acerca a mí y me ayuda a levantar de mi cómoda posición.

― Gracias.

―Mami, recuerda que yo te daré la comida.― Eliot venía detrás de nosotros.

―Sí, cariño.

―¿Estás enferma?― pregunta Callum con preocupación.

Niego.― Embarazada, acabo de desmayarme y golpearme contra el suelo.― explico mientras tomo asiento al lado de Eliot.

―¡Felicidades!― Callum besa mi frente.― Otro pequeño que alimentar, si siguen así, acabaré cenando debajo de la mesa.― bromea.

Río y niega.―Es mejor que te prepares.― me mira extrañado.― Estoy esperando gemelos.

Veo su rostro contraerse por la sorpresa y unos segundos más tarde, sonríe abiertamente.― Lucian, ¿no me digas que querías competir?

Lucian sonríe, la primera sonrisa real en toda la noche.― Sí, qué te puedo decir.― se encoge de hombros con elegancia.― No me gusta perder.

Eliot cubre mi barriga con sus manos y se acerca a mi oído.― ¿Tendré hermanitos?― pregunta bajo, más despacio que de costumbre. Asiento.― Te amo.― responde después de unos minutos, besando mi mejilla.

― Y yo a ti.― miro a Jake quien estaba sentado en frente de mí y le sonrío.

Él me devuelve la sonrisa y pronto comenzamos a comer, en silencio, salvo por alguno que otro comentario de Callum, que lo único que hacían era alivianar el ambiente.

***

La cena había transcurrido sin dificultades ni discusiones, fue más tranquila de lo que imaginé y supongo que todo se lo debo a Callum y a Eliot quienes no dejaban de hablar de cosas estúpidas y divertidas. 

Callum se había ido en cuanto terminó de comer diciendo que debía de ir a ver al padre de Sara, para conversar algo de suma importancia.