Seré Tu Esposa (primer Libro)

Capitulo 23

Eran las 5:00 am y Jared se había levantado para ir al gimnasio, tenia sueño y ademas mucho frió, el invierno cada vez se acercaba mas y mas, Ya había pasado una semana desde que organizamos todo para la boda, mañana es el gran día, hoy tengo mi prueba de vestido, estoy demasiado nerviosa y no quiero ir, ademas es viernes y solo quiero estar acostada, por suerte Jared entra al cuarto y le ordeno que se acueste a mi lado un rato mas. 

-¿Que vas a querer como regalo de boda?- dijo Jared mientras me abraza y yo me apoyo en su pecho.. 

-Sabes siempre me he preguntado ¿las personas con dinero pueden tener todo?- el asintió- ¿todo de todo? 

-Claro que si, el dinero lo compra casi todo... 

-Entonces quiero un panda, uno pequeñito- el negó 

-Enserio ¿quieres un panda?- yo asentí- entonces te comprare un feo y tierno panda... 

-Es broma, aunque amaría tener un panda, pero no, no quiero nada de nada, ya es suficiente con esta gran boda- comencé a jugar con su mano 

-Claro que no, eso es poco si quieres te regalo el mundo entero..

-Para que quiero el mundo, solo quiero que los fin de semana no vayamos a trabajar, quiero que nuestros fin de semana los pasemos juntos, conociendo un poquito mas del otro- el me abrazo aun mas fuerte y sonó mi alarma, me separe del fui al baño hice mi rutina diaria y baje, esta vez hice huevo revuelto con un tazón de frutas. 

Luego de comer Jared me fue a dejar a la tienda de vestido, por suerte no estaba la madre de Jared, hoy en la prueba de vestidos estaban los hijos de Angélica y Esteban, los saludes y entre a un cuarto, una señora me ayudo a ponerme el vestido y luego salí, los niños comenzaron a gritar -tía te ves como una princesa- a Angélica se le llenaron los ojos de lagrimas y Esteban la abrazo, me ponía muy feliz verlos juntos, me mire al espejo y a mi opinión me veía perfecta me sentía segura y hermosa con el vestido, volví al cuarto me lo saque y ellas lo guardaron, me dieron una gran caja rosada con brillos y una cinta, Esteban tomo el vestido y nos fuimos para la casa, Jared hoy no llegaría y en la casa solo estarían los niños, Angélica y yo, por otro lado  en la casa De Esteban estaría Jared, hoy tendría que dormir sola y eso no me gusta, maldita costumbre de tener a mi futuro esposo a mi lado. 

-Tía Yuli tenemos hambre- me gritaron los niños, fui a la cocina y vi que estaban subido a un silla intentando sacar un frasco con galletas. 

-¿les cuento porque ese frasco de galletas esta tan alto?- ellos se bajaron de la silla y se ganaron adelante mio- Jared las dejo ahí arriba para que yo no me las coma, son las galletas favoritas de Jared y son deliciosas, me las quiero comer, yo me subo a la silla- ellos se rieron yo me subí a la silla, pero era imposible alcanzarlas están muy altas..

-¡¿que están haciendo?!- pegue un pequeño salto y veo a Angélica de brazos cruzados y con esa típica cara que ponía mi madre cada vez que me iba a regañar.

-Amiga mía, Jared tiene unas galletas deliciosas las cuales no podemos alcanzar porque están muy altas- quizás Angélica me puede ayudar ella debe medir 1,70 y yo con suerte 1,58 pero gracias a los tacones me veo mas alta. 

-Esteban también me escondió unas galletas y también son deliciosas, si no me puedo comer las galletas de Esteban me comeré las de Jared- me baje de la silla, Angélica se subió ¡Pum Nena! las saco, nos fuimos al sillón y las comimos, es como estar en el paraíso, amo las galletas y estas son mis favoritas. 

-Jared me va a matar cuando se de cuenta que me comí sus galletas, pero vale la pena son exquisitas- terminamos de comer las galletas y mi teléfono comenzó a sonar, por suerte mi bolso estaba abajo y no tuve que subir. 

-Hija, soy tu padre, me entristece mucho enterarme por otras personas que mañana es tu boda, pensé que nos ibas a invitar, aunque no tengamos el dinero suficiente para ir nos hubiera gustado que nos hubieras mandado las invitaciones- 

-¡¿Que?! Papá yo les mande las entrada, incluso hasta me confirmaron que llegaron, las fueron a dejar, Papá solucionare esto de verdad yo les mande las entradas ¡ah que estresante esto! yo pensé que iban a venir, Jared dijo que los irían a buscar al aeropuerto, solucionares esto ya que  si ustedes no están la boda se cancela- dije bastante decidida 

-Hija relájate debe haber una equivocación relájate si no podemos ir a tu boda esta bien, ya me tengo que ir, cuídate mucho mi cielo- corto la llamada y no pude evitar sentir tristeza, por suerte tenia a la madre de Jared en mis contactos, Angélica no me dejo llamarla y me quito el celular de las manos. 

-Niños suban al cuarto quiero hablar con Julie- los niños se fueron y me senté en el sillón- relájate aunque sea un poco, vas a llamar a esa señora y la pondrás en su lugar, nada de malas palabras- me extendió mi celular, Marque el numero de la señora Klein y al tercer tono hablo.. 

-Hola ¿Con quien hablo?- dijo de lo mas inocente la hija de su madre..

-Hola soy Julie, acabo de llamar a mis padre y no han llegado sus entradas ¿Como estarán en la boda mañana?- dije calmada 

-¡Ay linda! lo siento pero tu familia no podrá ir a la boda, necesitaba esas entradas para unos empresarios- adiós tranquilidad o respeto... 

-¡¿Que ha echo que?! ¿Porque hizo eso? ¿Esta loca? ¡Es mi familia!- puse la llamada en alta voz y Angélica se gano a mi lado, del otro lado de la llamada se escuchaba ¿Jared? 

-amor lo siento pero tu familia no podrá asistir, y trata mas con un poco mas delicadeza a mi madre, por favor- creo que mucho hemos escuchado esa frase "lo que no tiene de altura lo tiene de enojona"

-Es que no esa señora no se merece que la trate con delicadeza a dejado a mi familia fuera de mi boda, es que obvio no tu no lo entenderías porque tus mil socios y toda tu familia asistirá a la boda, solo pedí ocho entradas, solo ocho de quinientas, sabes Jared estoy cansada, este es el problema de tu madre si mañana mi familia no esta aquí para la boda, con el dolor de mi alma tendré que cancelar la boda- colgué la llamada, fuimos a acostar a los niños, Angélica dijo que dormiría conmigo, pero no podía dormir tenia impotencia, tristeza, era una mezcla enorme de sentimientos, en estos momentos solo quiero dormir y no puedo por el simple echo de que no dejo de llorar, todo iba bastante bien para ser verdad. 




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