Capitulo 41

Jared y su padre se miraban desafiante, yo me cruce de brazos y espere a que alguno dijera algo, pero no, solo guardaron silencio y Jared nos volvió a mirar a cada uno, se detuvo en mi. 

-¡¿Que tenían en mente?!¡como le hacen eso!¡Julie en que estabas pensando!¿te sientes mejor?¡¿porque lo hicieron?!¡ella no se lo merece!- 

-bien merecido lo tiene esa hija de puta, a pesar de tanto daño que te hizo sigues a su lado como un perro- Dijo Esteban bastante enojado.

-Si, me siento mejor y me bajas el tono de voz, esta bien que sea tu esposa, pero no por eso permitiré que me grites, sabes me vale una berenjena lo que digas, me siento excelente al haberme vengado de esa chica, además porque tanto espectáculo, cuando ella me golpeo y corto mi pelo usted no hizo nada, así que si me disculpa necesito seguir con mi trabajo.- me sorprendió lo relajada que me salio eso, aunque por dentro no era así ya que estaba muy enojada, solo fue una bromita no entiendo porque tanto enojo. 

A la hora de salida Angélica me fue a buscar a mi oficina y me dijo que Jared quería hablar conmigo pero me negué a ir a su oficina no quería hablar con el, además tuve mucho tiempo para poder hacerme ideas erróneas o quizás no sean erróneas y sean verdad. 

Al final Angélica me obligo a entrar a la oficina de Jared, lo busque con la mirada y estaba sentado en el sillón con una cerveza en la mano, me quedo mirando y me pidió que me sentara a su lado y así hice, me senté y guardamos silencio por unos minutos mientras mirábamos la hermosa vista a la cuidad, esas son las ventajas de ser el jefe la oficina es grande y tiene un gran ventanal como el de las películas, ese en el cual se puede ver toda la cuidad. 

-Jared- el me miro y dije en voz baja- ¿sigues enamorado de Mariana?- no se porque, pero al decir eso sentí un gran nudo en mi garganta. 

-Eso sonó como una afirmación- dijo rápidamente sin mirarme. 

-Lo es- esta vez si me miro 

-No, no la amo- 

-no te creo, a veces creo que solo soy  uno de tus caprichos- ya no quería seguir hablando, pero aun así me quede, ya me canse de siempre correr de mis problemas, desde ahora tengo que enfrentarlos. 

-No la amo, solo que todavía no supero todo, todavía no puedo superar la muerte de nuestro hijo, todavía no supero el gran trauma que le provoque, si tan solo yo no la hubiera obligado a ir a la fiesta ese día, yo estaría con ella, casado y estaría aquí mi hijo, quizás jugando en esta oficina- ay eso dolió y mucho, ya mis  lágrimas eran incontrolables y en ese momento me di cuenta Jared me tenia a sus pies, Me gusta Jared me encanta y no puedo decir que estoy enamorada, quizás lo siento pero por el momento lo quiero negar. 

-quiero ir a mi departamento- el negó- entonces vamos a casa- Jared dejo la cerveza detrás del sillón y salimos de la oficina nos fuimos al elevador y luego al estacionamiento, buscamos el auto y luego nos fuimos a la casa. 

En cuanto llegamos a la casa, subí al cuarto busque mi pijama y me fui a dormir a otro cuarto, hoy no abrace la almohada, hoy solo llore y es que tenia una pena tan grande, quizás es idiota, pero el chico me gusta y el solo piensa en su ex. 

Me levante a las 5:00 am y fui a buscar mi ropa para el trabajo, Jared estaba durmiendo y se que no se levantara, fui a su velador y apague la alarma, Luego me fui a bañar, me vestí y baje a tomar desayuno, en la noche no dormí nada, creo que solo dormí una hora y además no tengo hambre, solo me tome un café y ya no podía mas, quería ir a dormir, pero si me duermo me levantare muy tarde y no quiero llegar tarde al trabajo. 

A las 7:00 en punto salí de la casa - me lleve el auto de Jared- cuando llegue a la empresa no había casi nadie, salude a los guardias y me fui a la oficina. El día paso demasiado rápido Jared no apareció en todo el día por la oficina y Esteban tampoco, Angélica estaba preocupada, pero yo no, se que Jared debe estar en casa, además tengo un dolor de cabeza insoportable y no se pasa el dolor con nada, por suerte ya es la hora de irnos a casa, paso a dejar a Angélica a la casa de Esteban y yo me voy para la casa, estaba pensando irme al departamento, pero se que Jared no me dejara. 

Llegue y la sala de estar estaba echa un asco, había botellas de cerveza por todo el suelo, papales de comida y todos los cojines estaban por suelo, vi que Jared estaba sentado, me senté a su lado y el apoyo su cabeza en mi hombro. 

-si eso hubiera pasado, seguiría engañado, lo mas probable es que Mariana me engañaría y que nuestro hijo hubiera pasado de niñera en niñera ya que todas lo encontrarían un niño desordenado- comenzó a reír- las cosas están mejor así, soy feliz ¡demasiado feliz! soy el Jared que ha querido salir a la luz siempre y soy el jefe ¡soy el maldito jefe! pero aun así todos me intentan controlar y ahora estoy tomando mis decisión, llevando la vida que quiero llevar, sonriendo y amando, como siempre quise, nunca olvidare a ese bebe pero si es momento de seguir adelante...