Seré Tu Esposa (segundo Libro)

Capitulo 3

Hoy por fin es sábado, hoy iríamos de Fiesta con Angélica, son las 7:00 pm y ya estamos lista, yo voy con un vestido celeste, la verdad es que me siento un poco incomoda con el vestido y se que es por el color, no suelo llevar muy seguido, para siento que en este vestido y para la ocasion convina de maravillas, obviamente no pueden faltar mis zapatillas blancas, que me acompañaran toda la noche para darlo todo en la piesta de baile, ya era necesario salir a bailar, a veces es bueno despejar la mente y que mejor forma de hacerlo que con amigos, alcohol y baile, y por mucho que vaya arreglada no me puse maquillaje, ya que al sudar se corre todo y no quiero ir a cada momento a retorcarlo. estaba en la sala de estar esperando que Angélica llegara, pense que es mujer llegaria antes, pero que equivocada estab luego de esperala bastantes minutos. Esteban como buena persona nos iría a dejar y a buscar, así que me puedo embriagar tranquila, ademas se que puedo ir tranquila, porque si llego a desaperecer el me buscara por cielo mar y tierra.

-¡No quiero que vayas! ¡quédate! ¡¡vamos a dormir o veamos una película!!- yo negué y el timbre sonó, me pare le di un beso en la frente y salí de la casa, me subí al auto y nos fuimos a la fiesta. 

Esteban dijo que lo llamáramos cuando nos quisiéramos ir, nos bajamos del auto y en cuanto entramos al lugar se nos acercaron unos chicos, pero no los tome en cuenta, fuimos a pedir unos tragos y nos fuimos a sentar, luego de un rato cuando comenzaron a poner buena música Angélica nos paramos y nos pusimos a bailar, un grupo de chica se nos acercaron y comenzamos a bailar junto con ellas. 

Necesitaba ir al baño, tire a Angélica del brazo y fuimos al baño, luego fue a buscar su trago y yo no lo permití, así que compramos otro y nos fuimos a la pista de baile junto a otras chicas, pero no pudimos seguir bailando con ellas ya que todas estaban con chicos. 

Ya eran las 2:00 am y nuevamente fuimos al baño, pero esta vez fue porque tanto yo como Angélica teníamos llamadas perdidas de Esteban, entramos al baño, lo llamamos pero no contesto, así que volvimos a la pista de baile. Luego de un rato, me tiran del brazo y por la poca luz no me deja ver con claridad quien era, cuando salimos del lugar veo que es Esteban. 

-¡las estuve llamando!vamos.- yo me quede parada ya me había preocupado- suban al auto y les cuento que sucedió- subimos al auto lo mas rápido posible y Esteban comenzó a conducir. 

-¡habla! ¡¿que paso?!- dije desesperada. 

-Jared, se entero sobre que su la señora Elisa no es su madre.- 

-¡¿como?!- dije rápido. 

-el fue a ver a su padre,como tiene llaves de esa casa, entro y nadie se dio cuenta, sus padres no se dieron cuenta que el estaba ahí y comenzaron a hablar sobre el tema y como se lo dirían, Jared me contó que sus padres no dijeron nada y el solo los gritaba, nadie sabe donde esta, tu eres nuestra única esperanza, estoy desesperado, Jared es capaz de hacer cualquier cosa- me quede en silencio y comencé a pensar en donde podría estar. 

-vamos a casa y de paso me pasan un auto- llegamos rápidamente a la casa y Esteban me paso el auto, fui lo mas rápido posible al parque y no estaba comencé a dar vueltas por diferentes lados y es que es difícil saber donde esta, esta cuidad es Grande y yo que sepa Jared no tiene ningún lugar favorito, solo su oficina ¡su oficina!

llegue a la empresa, los guardias por suerte me dejaron pasar, me subi al elevador y llegue al ultimo piso, corrí hasta la oficina de Jared, abrí la puerta y ahí estaba, mirando la cuidad con una botella de Ron en la mano. 

-¡Jared!- me acerque a el.

-tu lo sabias- mierda, ya estoy mas que frita a ounto de estar muerta- escuche que tu los amenazaste con decirme ¡¿porque no me lo dijiste?!- 

-perdón, pero no era mi deber, yo no me puedo meter en sus vidas, solo quería que te lo contaran rápido- 

-¡¡te metiste en mi vida!! ¡¿porque no en la de ellos?!- auch, eso si que me dolio. 

-¡tu me obligaste a que me metiera en tu vida!- dije lo mas sincera posible. 

-no quiero discutir ¡abrázame!- yo lo abrace y el comenzó a llorar de forma desesperada, yo solo lo consolaba, luego nos fuimos a acostar al sillón el se acostó en mi pecho y siguio llorando. 

-amor relájate, por favor- dije mientras le secaba las lagrimas. 

-estoy cansado, estuve toda mi vida tratando de que mi madre me quisiera y ahora resulta que ni siquiera es mi madre, me duele todo esto- debe ser difícil. 

-lo superaremos y seguiremos enfrentando nuestro destino- el sonrió y me beso, poco a poco sus ojos se fueron cerrado y yo jugaba con su pelo, cuando se quedo bien dormido lo abrace le di un beso en la frente nos quedamos dormido en el sillón de su oficina.

 




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