Moví mi cuerpo para acomodarme en la cama, y al hacerlo me percaté de que la cama se encontraba vacía, ¿a dónde ha ido de Daxne? Me levanté, me estiré y busqué con la mirada el bastón; observe la puerta del baño, estaba cerrada, ¿habrá entrado? Decidí levantarme, caminé al escritorio y continué con mi lectura del libro de economía.
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Microeconomía y Macroeconomía.
Microeconomía: es el estudio de las micro no mía es el estudio de las elecciones de individuos y empresas como esas elecciones interactúan y que influencias tiene el gobierno sobre ellas.
Macroeconomía: estudia efectos de la economía nacional y global por parte de los gobiernos.
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Acababa de escribir la definición de estos conceptos, cuando se abrió la puerta; Daxne venía entrando con una charola llena de comida, sonreí y guardé mis cosas -Buenos días, amada mía - saludé complacido, ella llevaba el vestido y las joyas que le había obsequiado - Buenos días, esposo mío, ¿Cómo te encuentras?- preguntó mientras colocaba la charola de mi escritorio; me levanté despacio, le di un beso y tomé su mano derecha e hice que se girará sobre sí misma, el vestido hondeo - te ves hermosa, amada mía - la halagué, ella sonrió y me besó, le correspondí y me senté nuevamente, era cansado estar de pie con una sola pierna - Te traje el desayuno que indicó tu doctor - anunció mientras se entregaba un vaso de agua natural y una pastilla, suspiré al tomarlo - Gracias - susurré antes de tragarla, luego dejé el vaso vacío, ella sonrió, se sentó en mis piernas y me dio el desayuno en la boca; estuvimos en silencio, ella era la paz que necesitaba, me dejé envolver por la armonía que sentía.
Alrededor de las dos de la tarde, llamaron a la puerta, Daxne se levanté de la cama dejando el libro que leía y fue abrir, era mi madre, ella sonrió - Hola, mis niños, ¿cómo están? - saludó mientras entraba - bien, mami, estaba en mi lectura de economía - respondí sonriente, ella me dio un beso en la frente - ¿y tú? ¿qué tal estás, Dax? ¿Mi hijo te mantiene ocupada? - bromeó mirándola - no, señora, él es muy tranquilo - se sonrojó, mi madre la abraza - bien, ¿quieren bajar a comer o prefieren quedarse aquí? - preguntó mirándonos uno a uno - Quiero bajar, ¿está papá y Jared? - me levanté animado, sosteniéndome del escritorio - Si, amor, le tocó cocinar a Jared - se rió Jared y ella se turnaban para cocinar; Dax sonrío - Espero que me puedan considerar en los turnos, me gustaría serles útil - pidió con timidez, mi madre sonrío, le brillaron los ojos - claro que sí, muñequita, con cuidar a mi pequeño ya eres útil, pero si te gusta cocinar, podemos negociarlo - sonrió ampliamente - Gracias - la abrazó emocionada; acomodé mis cosas e indiqué con la cabeza la puerta - ¿vamos? - pedí, ambas me miraron, querían ayudarme, les mostré el bastón y salí primero.
En el comedor, Jared se movía deprisa, iba de la estufa al refri, a la isla y de vuelta la estufa, luego comenzó a servir; Daxne se acercó a ayudar - Hola, hijo, ¿Cómo te sientes? - me saludó mi padre mientras servía los jugos - bien, papá, ¿Qué tal tu día? ¿Qué hicieron? - pregunté curioso - fuimos a trabajar, hijo, la oficina es un lío, hay algunos empleados y socios que no están de acuerdo con que yo sea el director, otros que si, afortunadamente... - comenzó a explicar y se interrumpió al darle un trago a su bebida, yo lo imité, Jared, Daxne y mi madre se sentaron a nuestro lado sin hacer ruido para no interrumpir - ...sin embargo, mañana irá Veatriz a poner orden - mi padre suspiró, Jared torció la boca y mi madre veía perdida el plato; Daxne y yo nos miramos preocupados - ¿puedo ir? Quisiera ver qué hace mi tía - pedí - Y si les parece bien, yo lo acompañaría para cuidarlo, en todo caso, contribuir, usted sabe que sé de negocios - anexó mi esposa, mi padre sonrío - Me alegra que lo digan, iremos todos ya que Jared y tú deben aprender algo de la empresa, y tu madre quiere ver a tu tía - se alegró mi padre, luego miró a Dax - como eres parte de la familia, nos complacería llevarte con nosotros - sonrío ampliamente mientras tomaba la mano de ella.
Me aclaré la voz para llamar la atención y miré a Jared - ¿Y qué tal vas con tu proyecto, hermano? - él sonrió, se limpió la boca y se cruzó de brazos luciendo relajado - bien, Samy, ayer fui a la delegación para hacer un par de entrevistas, Koichi y yo fuimos por la tarde a a un bufete jurídico... - se detuvo - perdón por interrumpir, mi familia tiene un bufete, si te parece, podría llamarles para que te respondan tus preguntas - Daxne ofreció y Jared se rió - gracias, Dax, te tomaré la palabra porque a donde fuimos sólo nos explicaron la parte económica de una demanda - agradeció - ¿De qué trata el caso? - preguntó mi padre - es una demanda por violación - dijo complacido, mi madre tosió - ¿De dónde sacaste esa idea? - preguntó impactada - es un caso real, a una amiga de Koichi le pasó, así que hemos decidido usarlo, ella nos contó todo lo acontecido y cómo su abogado la defendió, el tipo está en la cárcel y ella es madre de una niña - nos contó dejando su comida a un lado, se veía emocionado, mi padre sonreía, pocas veces vemos que Jared se emocione por algún trabajo; mi madre estaba horrorizada, ella escucha esos casos a diario; Daxne, por su cuenta, saca un trozo de papel del bolsillo que siempre trae y escribe un número - toma, son mis tíos Quintero, espero te ayuden - sonrío - Gracias, Dax - Jared cogió el papel y lo guardó, tomó su último bocado antes de recoger sus cosas y marcharse. Tanto mis padres, como nosotros, estuvimos en silencio; me quedé pensando en Jared, es asombroso cómo logra realizar tantas cosas sólo proponiéndoselo, esto me recuerda a aquella ocasión en la que se empeñó a crear algo artístico cuando éramos más chicos, a Jared no se le daba el dibujo, pero cuando vio los trabajos de Arielle, se esforzó para aprender a dibujar y hacerle una sorpresa, asistió casi un año a clases y en el cumpleaños número diez de ella, le regaló un retrato de ellos dos...